Oakland Raiders gana la batalla de las trincheras
The Black Wall es la clave para entender que estos Raiders son m¨¢s serios de lo que la gente pod¨ªa pensar y por lo que pelear¨¢n por llegar a playoff.
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Derek Carr est¨¢ haciendo una temporada m¨¢s que seria. De hecho podr¨ªa entrar sin rubor en la conversaci¨®n para el MVP.?Realmente se trata del alma del equipo, el que le imprime el car¨¢cter. ?l es el viento de oto?o que vaticina la conocida banda sonora de los Raiders. Dejando de lado sus magn¨ªficas estad¨ªsticas, que podr¨ªan avalar dicho premio, lo ves animar, organizar, cambiar jugadas con libertad y lo m¨¢s importante, liderar un equipo joven y ambicioso. Ostenta esos intangibles necesarios para que un equipo le siga sin reproches durante todo el partido, durante todo el campeonato. Pero hay unos compa?eros a los que da las gracias m¨¢s a menudo. En la cuenta de @Raiders_esp los bautizamos en su dia como The Black Wall.
Con la llegada de Reggie McKenzie como general manager de Oakland, las cosas empezaron a hacerse con sentido com¨²n y acierto. Pero aparte de los fuegos artificiales del draft, la gran obra de Reggie es la l¨ªnea ofensiva. En las ¨²ltimas 3 temporadas, las que lleva Carr en el equipo, ha drafteado el guard Gabe Jackson, ha renovado al left tackle Donald Penn y ha firmado free agents de relumbr¨®n como el center Rodney Hudson y el guard Kelechi Osemele. La inversi¨®n en la l¨ªnea ofensiva es la mayor de la liga. Y esa inversi¨®n est¨¢ dando sus resultados. Solo hay que ver entero el partido ante Broncos para darse cuenta de c¨®mo ese muro lleg¨® a dominar a la mejor defensa de la liga.
Ya se conoc¨ªa a ¨¦sta unidad como posiblemente la mejor en pass protection -junto a la de Dallas, por supuesto-, pero hab¨ªa interrogantes sobre su capacidad de ayuda en el juego terrestre. En unas declaraciones tras el partido, Donald Penn explic¨® que los Raiders solo usaron 2 jugadas de carrera durante toda la segunda mitad, ¡°over and over¡±. Se podr¨ªa achacar al staff t¨¦cnico de Denver el no saber sobreponerse a esas jugadas y encontrar alg¨²n plan alternativo para hacerles frente, pero el ¨¦xito del buen hacer ofensivo se encuentra, sobretodo, en 2 aspectos; la ejecuci¨®n y el sexto offensive line. Sobre lo primero, poco que decir. Todos los miembros de la l¨ªnea realizaron sus movimientos tan bien y de modo tan sincronizado, sin fisuras, que uno se pregunta si realmente los Broncos pod¨ªan hacer otra cosa para contrarrestarlos. Pero lo que considero una novedad, y posiblemente la clave para esa mejora del juego de carrera, es el jugar con 6 OLs.
Desde las primeras jornadas de la regular season, se vio como la lesi¨®n del TE bloqueador Lee Smith resultaba un duro golpe en el esquema que iban realizando los Raiders desde hac¨ªa ya 2 a?os. Un esquema que no consegu¨ªa ser dominante, pero si result¨®n, basado en sacar a tu tight end bloqueador en casi todas las jugadas de carrera. Un cl¨¢sico, vaya. Tras esa lesi¨®n, el juego de carrera se perdi¨® en el abismo. Muy poca consistencia solo salvada por algunos big plays de Richard o Washington. Adem¨¢s, Murray se lesion¨® y sin ¨¦l no consegu¨ªan desgastar los fronts rivales con percusiones regulares. Pero el plan cambi¨® con el regreso de Murray y el viaje a Florida. En Jacksonville probaron en 22 snaps jugando con un sexto miembro del muro. Se reparti¨® el trabajo entre el tackle McCants y el rookie Kirkland con un resultado poco destacable. tanto que pas¨® totalmente desapercibido. El siguiente partido en tampa Bay el experimento fue a m¨¢s con hasta 27 jugadas repartidas entre el mismo Kirkland y el tambi¨¦n novato Vadal Alexander. Y llegamos al partido frente a Denver en el que se us¨® solamente a Kirkland como sexto hombre -parece que en las pruebas anteriores fue ¨¦l el ganador de dicho honor- un total de 42 snaps, llegando casi al 50% de las formaciones de ataque y mostrando un nivel muy bueno en todas sus acciones.
Correr ante Denver es la ¨²nica forma de ganarles. Su punto menos fuerte. Y parece que Raiders estuvieron preparando ese partido, ese game plan, desde hace semanas, introduciendo paulatinamente la propuesta de ampliaci¨®n del muro para llegar al Sunday night Football en plenas condiciones t¨¢cticas -seguro que lo ten¨ªan bien marcado en el calendario-. El plan les funcion¨® de maravilla. Oakland cosech¨® el mejor partido corriendo de toda la temporada con un average de 5.1 yardas por carrera, involucrando a los 3 running backs del equipo y recuperando la moral de Latavius Murray, a quien van a necesitar en forma ¨¦sta segunda mitad de liga regular.
Ahora Raiders puede jugar a desgastar con la carrera, puede jugar profundo, hacer un plan de juego balanceado o conservador con pases cortos y seguros. Esa variedad y capacidad se la da su l¨ªnea ofensiva y el talento que hay en el juego a¨¦reo. Y eso tiene que asustar mucho a los rivales. Su 7-2 es envidiable y, por mucho que la gente quiera menospreciarlo mirando los equipos ante los que ha jugado, es totalmente merecido. El golpe en la mesa asestado el pasado domingo va a retumbar con fuerza mientras los Raiders est¨¢n de bye preparando el partido ante Texans que se disputar¨¢ en M¨¦xico. Y ese golpe lo ha dado una unidad a la que podr¨ªamos llamar The Black Wall.