Los Texans no tienen m¨¢s opciones que Brock Osweiler
A veces el mejor contrato es el que no firmas. Bob McNair y los Texans no encajan en ese grupo.
El propietario de los Houston Texans se enamor¨® de Osweiler como borracho en table dance. Un par de bailes y decidi¨® bajarle la luna y las estrellas. Ahora para sorpresa de nadie, esa relaci¨®n comienza a enfriarse y tal vez se est¨¦n dando cuenta que no son el uno para el otro.
S¨ª. Mucho se puede decir que los Texans son l¨ªderes del Sur de la AFC y que tienen cuatro victorias. Pero en honor a la verdad ser l¨ªder de la AFC Sur es como ser rey del pantano de Shrek. No sirve de nada.
De las cuatro victorias que tiene Osweiler este a?o, solo una (Chiefs) es ante un equipo con marca ganadora. Su equipo ha rebasado los 20 puntos en apenas tres juegos y no hay un solo partido en el que no haya perdido un bal¨®n, incluyendo el Fumble-Pass del lunes que promete convertirse en el Buttfumble de esta temporada.
Pero la culpa no es de Brock, el muchacho es de talentos limitados y todos lo sabemos. Tal vez su mayor virtud sea su representante, Jimmy Sexton, quien fue capaz de convencer a McNair y los Texans que el tipo con siete inicios previos en la NFL val¨ªa 72 millones de d¨®lares.
Si alguien fuera tan amable de conseguirme el tel¨¦fono de Sexton, estoy seguro que podr¨ªa convencer a los de AS que un cero de m¨¢s en mi cheque es apenas lo justo.
?C¨®mo los convenci¨®? Esa es la pregunta del mill¨®n de d¨®lares. M¨¢s bien, de los 72 millones de d¨®lares. Por principio de cuentas, jugaba con el respaldo de una defensiva elite que llev¨® al equipo al campeonato. Estaba arropado por una de las mejores duplas de receptores de la NFL en Emmanuel Sanders y Demaryius Thomas, y contaba con un ataque terrestre que consigue carreras m¨¢s largas que la de Johnny Manziel en la NFL.
En sus siete inicios en Denver tuvo un solo juego de 100 puntos de rating, fue capturado en 20 ocasiones, casi tres por titularidad, y b¨¢sicamente solo tuvo un triunfo de calidad, al derrotar 20-17 a Cincinnati en la semana 15 con tres pases de touchdown.
Brock Osweiler tra¨ªa un par de cuatro de manos y quiso jugar al p¨®ker con John Elway, quien no le pag¨® el bluff, pero sab¨ªa que alguien m¨¢s lo har¨ªa.
Elway a diferencia de McNair o el gerente Rick Smith, fue jugador, conoce del juego. Pero m¨¢s importante, es especialista en quarterbacks al ser uno de los mejores de la historia. Y ?qu¨¦ creen? Gary Kubiak tambi¨¦n sabe lo que ten¨ªa con Osweiler, pas¨® toda su carrera deportiva viendo a Elway ejecutar en el campo, y ahora lo hace en la oficina.
Elway y Kubiak sab¨ªan muy bien que Osweiler no val¨ªa 72 millones de d¨®lares. Lo sab¨ªa tan bien que prefiri¨® darle las llaves del equipo campe¨®n a Trevor Siemian que hacerle una oferta competitiva a alguien que no hab¨ªa demostrado nada.
?Hay contratos peores en la NFL? Por supuesto. Jay Cutler, Ryan Tannehill o Joe Flacco ganan m¨¢s dinero, pero a ellos, ya les llegar¨¢ su turno.