New England empieza sufriendo y termina arrasando con Brady

Durante los primeros minutos todos los fantasmas sobrevolaron Foxboro. La l¨ªnea ofensiva de New England volv¨ªa a ser un coladero, y Tom Brady no paraba de correr por su vida. Las carreras interiores de Hil y Bernard entraban por el medio desarbolando el front seven local y Andy Dalton completaba a placer, sobre todo quemando a Logan Ryan, incapaz de cubrir a un solo receptor. No era un asunto de p¨¢nico, pero s¨ª daba la sensaci¨®n de que la vuelta de Brady hab¨ªa relajado la disciplina espartana que hab¨ªa definido al equipo de Belichick durante todo el mes de septiembre.

Lo curioso es que, pese a todos esos agujeros, los Patriots no solo se adelantaban con un field goal de Gostkowski de 46 yardas, sino que consegu¨ªan parar cuatro veces a los Bengals a una yarda de la l¨ªnea de anotaci¨®n. Incluso cuando las cosas no acaban de funcionar, los Pats saben sacarse ases de la manga. Que si hasta entonces las carreras interiores les estaban destrozando, las tres veces que Cincinnati intent¨® ganar esa yarda corriendo por dentro fue frenado en seco.

Sin embargo, poco despu¨¦s llegaba un touchdown de carrera de Dalton que adelantaba a su equipo 3-7. Los Patriots echaban mucho de menos al rookie Elandon Roberts, que estaba jugando un partidazo supliendo a Jamie Collins, pero que tuvo que abandonar el partido poco despu¨¦s de comenzar el segundo cuarto por un golpe en la cabeza y ya no volvi¨® hasta la segunda mitad.

Cuando m¨¢s colapsado estaba el ataque de New England, con Brady agobiado por la presi¨®n y la l¨ªnea hundi¨¦ndose casi en cada jugada, lleg¨® una penalizaci¨®n salvadora de Kiekpatrick a Hogan (curiosamente otra penalizaci¨®n similar entre ellos en la segunda mitad tambi¨¦n fue decisiva). Hubo un antes o despu¨¦s de ese pa?uelo, porque justo entonces apareci¨® el Tom Brady desatado de los mejores momentos, imparable, que ya no par¨® de crear magia hasta el final del partido y que adelant¨® 10-7 a los suyos con un pase de 15 yardas a White. Parec¨ªa incre¨ªble. Los Bengals hab¨ªan jugado mucho mejor en la primera mitad, Dalton hab¨ªa completado casi todos los pases que hab¨ªa intentado, la defensa de Cincinnati parec¨ªa tenerle cogida la medida al partido y, sin embargo, New England se iba a descansar por delante.

Tras el descanso, parec¨ªa que los Bengals segu¨ªan con el viento a favor. Se adelantaron 10-14 con un touchdown de LaFell, pero fueron las ¨²ltimas bocanadas de un equipo que se sent¨ªa mejor sin saber que ya era un cad¨¢ver. Poco despu¨¦s del touchdown, Dalton sufr¨ªa un safety de Hightower, inmenso durante toda la segunda mitad. De ah¨ª hasta el final, el quarterback de Cincinnati ya estuvo permanentemente agobiado, sin el tiempo y la soltura de la primera mitad. Segu¨ªa encontrando con cierta facilidad al receptor cubierto por Logan Ryan, que tuvo una actuaci¨®n horrible, pero para ganar el partido estaba obligado a aguantar el ritmo de Brady, y eso era imposible.

El quarterback de New England pr¨¢cticamente no us¨® a sus tight ends en la primera mitad, pero tras la anotaci¨®n de los Bengals el partido se convirti¨® en un concierto entre ¨¦l, Bennett y Gronkowski, que acab¨® el partido con unos n¨²meros impresionantes (162 yardas y un touchdowns), que pudieron ser mejores si no se hubiera pegado con media defensa rival, e incluso con Belichick, que termin¨® por sacarle del campo una jugada para intentar tranquilizarle. Brady completaba a placer, cambiando las lecturas a ritmo vertiginoso, sorprendiendo siempre con el pase m¨¢s inesperado, y dando otra lecci¨®n de football con 29 de 35 completados, 376 yardas y tres pases de touchdown, el ¨²ltimo de los cuales fue tambi¨¦n para White (14-25), que cada vez rinde mejor en su papel de receptor desde el backfield, aunque tiene que mejorar, y mucho, en los bloqueos tras la l¨ªnea.

El ¨²ltimo cuarto pr¨¢cticamente sobr¨®, mientras la defensa de Cincinnati perd¨ªa completamente la concentraci¨®n y se enzarzaba en permanentes t¨¢nganas que recordaron su peores momentos del a?o pasado. Una falta de disciplina que nos devuelve lo peor de la ¨²ltima etapa de la franquicia. Tras un arranque de temporada demasiado gris, los Bengals necesitan reinventarse si quieren sobreponerse a un r¨¦cord 2-4.

Antes del final todav¨ªa hubo un field goal para cada equipo (28-17), y entre montonera y montonera Legarrette Blount culmin¨® una gran actuaci¨®n de 13 carreras para 50 yardas, y 20 yardas de pase con un touchdown que dej¨® el marcado final en 35-17. A esas alturas nadie se acordaba de que en los primeros minutos sobre Foxboro sobrevolaron algunos viejos fantasmas. Tom Brady los conjur¨® en cuanto despleg¨® su magia.

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