Los Cubs siguen su camino para terminar con la maldici¨®n
En una vibrante serie que les enfrent¨® a los San Francisco Giants y que puso a prueba su resistencia ante los momentos complicados en playoffs.
En las Series Divisionales entre los Cubs y los Giants se juntaron dos de las ¡°maldiciones¡± m¨¢s conocidas en la MLB, una con 71 a?os de historia, la maldici¨®n de la cabra de los Cubs, llevan 108 a?os sin ganar las World Series, la ¨²ltima fue en 1908 -el Titanic se hundi¨® en 1912-, y tras la maldici¨®n de 1945 no han llegado a ninguna final, antes llevaban dos t¨ªtulos y ocho finales. Y otra m¨¢s reciente: que los a?os pares los Giants se llevan las Series Mundiales; 2014, 2012 y 2010. Una termin¨®, este a?o par los de San Francisco no van a llevarse las World Series, y los Cubs consiguieron torear la cabra, esperando no ser envestidos en la Final de Conferencia.
No fue una eliminatoria f¨¢cil, los Giants estuvieron a un gran nivel, es un gran equipo que antes del Partido de las Estrellas que se disput¨® el 12 de Julio ten¨ªa el mejor r¨¦cord de toda la MLB, 57-33 por delante de unos Cubs, 53-35, a los que muchos ve¨ªan capaces de superar el r¨¦cord de m¨¢s victorias durante una temporada, los Seattle Marlins del 2001, que consiguieron un incre¨ªble 116-46. Despu¨¦s los Giants fueron perdiendo fuerza, perdiron su divisi¨®n ante los Dodgers, pero llegaron a Wild Card donde derrotaron a los Mets.
En el primer partido lanz¨® Cueto para los de San Francisco, un pitcher capaz de lo mejor y de lo peor, y esta vez fue de lo mejor: jug¨® todo el partido completo, concedi¨® 3 Hits y una carrera, pero no le acompa?o el resto de su equipo que no pudo anotar ni una carrera ante un gran Jon Lester que permiti¨® 5 Hits, y para cerrar Chapman y sus bolas a m¨¢s de 100 millas por hora -m¨¢s de 161 kil¨®metros por hora-. Fue el partido de Javier Baez, que mand¨® la bola fuera del campo en la octava entrada.
El segundo partido empez¨® a mandar claras se?ales de que esta ser¨ªa una eliminatoria para los Cubs, porque cuando a uno le sale todo bien y al otro no le est¨¢n funcionando tan bien las cosas, es que algo ocurre. El pitcher de los Cubs, Kyle Hendricks, consigui¨® un doble que impuls¨® dos carreras para su equipo, pero no pudo lanzar muchos innings, 3,2, recibi¨® dos carreras. Un pelotazo oblig¨® a Joe Maddon a cambiarlo por Travis Wood, que pitche¨® perfecto, 1,1 innings, 0 hits y 0 carreras, y bate¨®, y no consigui¨® ni un simple, ni doble ni triple, el se?or Wood consigui¨® un Home Run. Cuando los pitchers rivales te batean as¨ª prep¨¢rate para perder o para sudar sangre para ganar. Y las casualidades, Wood sali¨® por un pelotazo del rival, le toc¨® batear a Wood, un jugador que hab¨ªa conseguido su ¨²ltimo Home Run en el 2014, que llevaba este a?o una media de bateo de 0,182 (2 Hits de 11 At Bats), y llega ese momento y la saca del estadio. ?Qui¨¦n quiere ahora meter bateadores designados en la Liga Nacional? Yo lo quer¨ªa hace dos a?os, pero ahora ya no. 2-5 para los Cubs y vuelo hacia San Francisco.
Tercer partido, lanza Madison Bumgarner, ¡°M¨ªster Octubre¡±, ante Jake Arrieta, un aut¨¦ntico duelo de pistoleros. Madison lanza 5 innings y recibe 3 carreras. Arrieta 6 innings, recibe 2 carreras y bateando consigue un Home Run que da tres carreras a su equipo. El duelo se lo lleva el jugador de apellido vasco, pero el partido ser¨ªa para los de San Francisco. Los Giants consiguieron 3 carreras en la octava para ponerse dos por delante, pero estos Cubs que nunca se rinden consiguieron empatar en la novena, 5-5. En la decimotercera Joe Panik consegu¨ªa un doble para que Brandon Crawford anotara, 5-6 y nos vamos al cuarto partido.
Los Cubs pusieron a lanzar a John Lackey, los Giants a Matt Moore, sobre el papel era mejor Lackey (veterano, WAR 2,5, ERA de 3,35) ante un Moore que tuvo una mala temporada 2015, que hab¨ªa sido traspasado por los Rays a San Francisco a mitad de la temporada 2016, con un WAR de 2.2 y un ERA de 4,08. Eso era el papel, porque en el terreno de juego Lackey concedi¨® 3 carreras en 4 innings y Matt Moore dos carreras en 8 innings. As¨ª que llegamos a la parte alta de la novena entrada, 2-5 para los de San Francisco, parece que vamos de cabeza al quinto partido, de los 9481 partidos de temporada regular a los que se ha llegado con una ventaja de 3 carreras para el equipo local en la novena 9287 han sido para el equipo local, ¨²nicamente ha habido 194 remontadas, las posibilidades de victoria del equipo que va por delante en el marcador son del 97,95%. Y si miramos Playoffs esta situaci¨®n se ha dado 824 vez con 3 remontadas, las posibilidades de ganar bajan al 0,36%. Por eso uno no debe rendirse jam¨¢s, porque siempre hay un camino, aunque se nos antoje invisible.
Las apuestas se pagaban en ese momento a 48,78 euros por euro apostado a los Cubs. Y llego el milagro, ya no aparecieron gatos negros ni espectadores que cog¨ªan la bola en la grader¨ªa ni cabras que quer¨ªan entrar en el estadio. Los Giants utilizaron 5 pitchers diferentes para cerrar a los Cubs, Law, L¨®pez, Romo, Smith y Strickland, pero la historia ya estaba escrita, los Cubs consiguieron 4 carreras en la novena para ponerse por delante 6-5, en uno de los momentos m¨¢s m¨¢gicos e incre¨ªbles de la historia de este deporte. Y para cerrar el partido apareci¨® el ¡°Se?or 100 millas¡±, Aroldis Chapman, para endosar 3 Strikeouts a los ¨²ltimos 3 bateadores. Si alg¨²n amigo vuestro se quiere aficionar al b¨¦isbol este es uno de los partidos que los puede enganchar, final de pel¨ªcula, pero real.
Ahora los Cubs se encontrar¨¢n con los Dodgers o los Nationals, esta noche lo sabremos. Y si pasan los de la capital los Cubs volver¨¢n a encontrarse el verdugo de la pasada temporada, Daniel Murphy, que jugando con los Mets los mand¨® a casa. Y, ?saben cu¨¢l era el nombre de la cabra a la que no dejaron pasar a Wrigley Field, estadio de los Cubs?. Si, lo han acertado, Murphy era el nombre de la cabra.
Y para terminar el momento paranormal de la jornada. Me acost¨¦ el martes tarde despu¨¦s de cena y copas, prometi¨¦ndome ver el partido al d¨ªa siguiente, pero me despert¨¦ cuando todav¨ªa era oscuro, me dije, ¡°algo est¨¢ pasando en San Francisco¡±, abr¨ª el iPad y vi la ¨²ltima entrada del partido. Tengo un problema, mi subconsciente se ha aficionado al b¨¦isbol.