Espa?a logra una plata europea con acento latinoamericano
De los 24 jugadores del plantel que jugaron en Holanda, s¨®lo dos han nacido en suelo espa?ol; los otros, 16 venezolanos y 6 dominicanos
Espa?a jug¨® las dos primeras finales de los Campeonatos de Europa de b¨¦isbol, con plata (1954) y oro (1955). Luego, 16 bronces sin llegar a la final, y con una Liga nacional cada vez m¨¢s decadente. Y el pasado domingo, en Amsterdam, 61 a?os despu¨¦s, una tercera final para colgarse la plata tocando el oro porque la selecci¨®n anfitriona s¨®lo pudo ganar por 3-2 y en el extra inning. Un ¨¦xito cuando se anuncia el regreso al programa ol¨ªmpico.
Pero... en esta Selecci¨®n s¨®lo hay dos jugadores nacidos y formados en Espa?a: el barcelon¨¦s Eric Segura, director t¨¦cnico de la Federaci¨®n Catalana, y el donostiarra Jorge Balboa, de padre guineano. El resto, 22 jugadores, ha venido de fuera: 16 venezolanos y seis dominicanos. Con cuatro cubanos listos tambi¨¦n para entrar en la posici¨®n de lanzadores, aunque no obtuvieron permiso de sus equipos para jugar el Europeo.
Juan Carlos Cerd¨¢, director t¨¦cnico de la Federaci¨®n Espa?ola de B¨¦isbol, explica que ¡°todos los jugadores tienen pasaporte espa?ol, y todos los han obtenido por v¨ªa de sangre o por matrimonio¡±, porque no habr¨ªa dinero para ¡°intentar nacionalizaciones por carta de naturaleza, por ejemplo¡±.
Los jugadores que han estado en el Europeo han recibido 60 euros al d¨ªa para gastos de bolsillo, y ahora seguramente logren del CSD 900 euros m¨¢s por la medalla de plata. Es decir, poco para alguno como Beltre, que en 2014 ganaba 200.000 d¨®lares en Texas. Ahora bien, la mayor parte de este grupo podr¨¢ luchar por disputar los Juegos Ol¨ªmpicos de Tokio, cuando regresa este deporte al programa: Espa?a s¨®lo ha ganado un partido ol¨ªmpico, en el Juegos de Barcelona.
La mayor¨ªa de los jugadores act¨²an en la Liga Espa?ola, 16, escaparate para otras ligas: Italia, Grecia, Jap¨®n... porque los Marlins de Tenerife o los Astros de Valencia, que son los mejores, pagan lo justo. En 2010 un buen jugador pod¨ªa llegar a ganar 10.000 euros por los casi cinco meses de competici¨®n. Hoy, ni eso.
Dice Cerd¨¢ que la mayor¨ªa de los internacionales ha aparecido de manera voluntaria ¡°por el boca a boca, unos han tra¨ªdo a otros. Hay centenares de hijos de espa?oles en Am¨¦rica¡±.?Por ahora ni miran en las Grandes Ligas ¡°porque est¨¢ prohibido por norma que jueguen en los Campeonatos de Europa¡±, pero permitidos en los Cl¨¢sicos Mundiales.
La plata ha sido una sorpresa relativa. Espa?a roz¨® el oro ante la anfitriona, la intratable Holanda, la mejor del continente y con una Liga profesional. ?En realidad, en Estados Unidos la Liga espa?ola no es tan clandestina, tanto que fue muy celebrado el fichaje del holand¨¦s Rub¨¦n Rijkhof por los Bravos de Atlanta procedente de Espa?a: su primer europeo, formado en Marbella desde los tres a?os de edad. Aqu¨ª la noticia no existi¨®; en Am¨¦rica, lo suficiente.
Entre catalanes, madrile?os y un vizca?no, el oro de 1955
En 1955, con Juan Antonio Samaranch, elegido edil del Ayuntamiento de Barcelona, volcado en el segundo Campeonato de Europa que se jugaba en Montjuich, Espa?a conseguir¨ªa su ¨²nica medalla de oro con un grupo de 25 jugadores: 13 catalanes, 11 de Madrid, y un vizca¨ªno. Los madridistas Braulio Garc¨ªa y Paco Amescua (luego delegado del baloncesto del Real Madrid) eran algunas de las estrellas que trascendieron al Europeo, y siguieron en el deporte.