Alejandro Blanco: "Es el COE quien debe fijar el reparto de dinero entre las federaciones"

Alejandro Blanco desembarc¨® en Barajas tras diez horas de vuelo desde R¨ªo y mont¨® en un taxi directamente a la redacci¨®n de AS, acompa?ado de Chuso Garc¨ªa Bragado, abanderado de la clausura en reconocimiento a sus siete Juegos. Un largo viaje, pero el presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Espa?ol y el eterno marchador no dieron se?ales de cansancio, ni de jet-lag. ¡°Dorm¨ª dos horas¡±, cuenta Blanco, que sonre¨ªa como nuevo.

Ambos son tipos duros, alimentados por la euforia vivida en los d¨ªas finales de Brasil que elimin¨® cualquier rastro de fatiga. Espa?a trajo un bot¨ªn de 17 medallas, siete de oro. ¡°Hay que quitarse el sombrero con lo que hemos hecho. Se ha visto que el deporte es la verdad¡±, espeta Blanco, plet¨®rico, a¨²n con el polo de la Selecci¨®n. Ni a cambiarse le dio tiempo, ansioso por relatar lo vivido.

En R¨ªo las haza?as se han multiplicado. Blanco ve ¡°imposible quedarse con una". ¡°Han sido muchas emociones. Todos los d¨ªas hac¨ªa cinco horas de coche para estar junto a Carolina y su emocionante oro, ver las medallas de Mireia, a los pirag¨¹istas o acudir al estadio de atletismo para vivir el t¨ªtulo de Ruth¡­ En el tenis, Nadal fue un referente y ha demostrado que es el ejemplo de deportista¡±, relata el dirigente, que se enorgullece especialmente de la paridad de los podios. ¡°Quer¨ªamos 50% hombres y 50% mujeres. Y de las 17 medallas, nueve han sido femeninas y ocho masculinas, 52% a 48%. As¨ª que no puede ser mejor el resultado obtenido¡±.

Bragado aparece en escena: ¡°La actuaci¨®n ha sido maravillosa¡±. Blanco va m¨¢s all¨¢: ¡°Ha sido un milagro¡±. Y algo tiene de prodigiosa la actuaci¨®n espa?ola si se tienen en cuenta las cifras de financiaci¨®n p¨²blica (177 millones de euros), empobrecidas por las crisis (desde 2007 hasta hoy baj¨® el 70%, n¨²meros de Se¨²l 88). Un ejemplo de ca¨ªda para el mandatario: ¡°El pirag¨¹ismo ten¨ªa un tercio de la ayuda p¨²blica respecto a otros tiempos¡±. En cambio, cuatro medallas al zurr¨®n. Rendimiento asombroso.

Blanco habla de ideas de futuro como ¡°potenciar el ciclismo en pista a trav¨¦s de Llaneras¡±, ¡°enviar deportistas al extranjero para alcanzar la excelencia¡±... Pero para ello quiere un traslado de poderes, que el COE sea el que fije el reparto de dinero entre las federaciones. Y pone ejemplos: ¡°En Europa se hace as¨ª, en los pa¨ªses n¨®rdicos... o en Italia, donde hay un Ministerio de Deporte que traslada el dinero al CONI y este lo reparte entre las federaciones. En Alemania, el Ministerio lo da directamente a las federaciones, pero la pol¨ªtica la marca el Comit¨¦ Ol¨ªmpico. Luego cada federaci¨®n rinde cuentas mediante auditor¨ªa. No pedimos ser como el CONI, pero al menos s¨ª seguir el ejemplo de Alemania. Es algo que tiene que terminar siendo as¨ª. Es la din¨¢mica que hay, la soluci¨®n para que las decisiones se tomen desde el deporte y no desde la l¨ªnea pol¨ªtica del momento. Luchar¨¦ por ello¡±.

M¨¢s all¨¢ de lo p¨²blico y su controversia, desde lo privado han llegado al deporte ol¨ªmpico 311 millones con el faro imperturbable del ADO (que se puede ver perjudicado para 2020 por la salida de TVE) y con la aparici¨®n de agradables sorpresas como las Becas Podium. Blanco las explica:?¡°Telef¨®nica ha invertido 1,4 millones de euros para guiar a deportistas menores de 23 a?os. El programa tiene 88 miembros, de los que 22 han ido a los Juegos y uno de ellos ha ganado el oro¡±. Se refiere a Marcus Cooper, uno de los prodigios del kayak.

El otro mecenas viene desde Murcia con la UCAM, ¡°que costea estudios y ayuda a cientos de deportistas¡±. M¨¢s de 50 fueron a R¨ªo y 11 se trajeron medalla (12 si se cuenta a Niyonsaba, una atleta de Burundi enrolada en el proyecto). Blanco destaca otra ayuda invisible: la familia: ¡°La gente cercana a los deportistas ha hecho lo imposible para que est¨¦n en los Juegos¡±. Otro pilar de Espa?a para el dirigente: ¡°La gran cultura de club existente¡±.

En la v¨ªspera de estos Juegos de R¨ªo se pint¨® la cita como un posible infierno en la tierra con plagas, contaminaci¨®n, violencia¡­ y, sin embargo, quedaron unos Juegos ¡°agradables de ver y con buen color¡±, como dice Alfredo Rela?o, director de AS. Blanco lo confirma: ¡°No hubo noticias del zika, que era tan temido, los problemas con las aguas se solucionaron, en la Villa se estuvo bien... en algunas partes¡±.

Bragado hace cr¨ªtica constructiva: ¡°El tr¨¢fico fue ca¨®tico, aunque el legado que quedar¨¢ a nivel de transporte p¨²blico creo que ser¨¢ bueno¡±. Una de las peores sensaciones (aparte de la anecd¨®tica piscina verde) fue ver instalaciones vac¨ªas. ¡°Ven¨ªamos de Pek¨ªn y Londres, donde todo estaba a rebosar¡±, relata Blanco, que reafirma la teor¨ªa de que la nataci¨®n quit¨® foco al atletismo, lejos del epicentro ol¨ªmpico en Engenhao, donde no luc¨ªa el pebetero. Un sacrilegio a lo tradicional.

Con mucha intensidad vivi¨® la cita Garc¨ªa Bragado, madrile?o de Canillejas de 46 a?os, que compet¨ªa en sus s¨¦ptimos Juegos desde que debutara en Barcelona 1992. Protagoniz¨® uno de los momentazos de la delegaci¨®n espa?ola cuando cientos de personas le hicieron un pasillo al entrar al comedor de la Villa.?¡°No me lo cre¨ªa. Al principio vi solo a los de atletismo y luego estaban las chicas de balonmano, las de b¨¢squet, al final estaba Carolina...¡±, relata el marchador (20? en 50 km), que ¡°impone respeto brutal en sus compa?eros¡±, se?ala Blanco.

Toca mirar a Tokio 2020, donde el dirigente apunta con m¨¢s optimismo que otras veces: ¡°La planificaci¨®n ha ido enfocada a las estrellas de ¨¦lite, que muchas ya se ir¨¢n. Y se abrir¨¢n otros proyectos¡±. As¨ª, y sin dejar de lado el debate Madrid-Atl¨¦tico, Blanco y Bragado se marcharon de AS. Sonrientes y sin rastro de cansancio. R¨ªo segu¨ªa en su mirada.