Su esencia: cohetes en Denver como si fuese Cabo Ca?averal

Hacer deporte en altitud es diferente de hacerlo a nivel del mar. Esta es una verdad incuestionable y asumida en todas las competiciones del mundo. Pero en b¨¦isbol es a¨²n m¨¢s especial porque la bola vuela mucho m¨¢s con menor densidad de aire. Es por eso que los n¨²meros de los Colorado Rockies hay que diferenciarlos, siempre, entre los que se producen en casa y los que se producen fuera. Hasta tal punto es as¨ª que al estadio de los Rockies se le conoce como ¡®Coors Ca?averal¡¯, en referencia a Cabo Ca?averal, que es desde donde la NASA hace muchos de sus lanzamientos de cohetes espaciales. Tal cual parecen las bolas en Denver. La cultura del equipo, pues, es anotar mucho en casa, y mucho menos fuera.

Propietario: Monfort Brothers *

Los hermanos Monfort, Dick y Charlie, son unos empresarios de Denver que est¨¢n involucrados en los Rockies desde su creaci¨®n. Es cierto que el fundador de la franquicia fue Mickey Monus, pero un enorme esc¨¢ndalo de corrupci¨®n hizo que perdiese el equipo antes incluso de que debutase en la MLB en 1993.

Manager general: Jeff Bridich *

Jeff Bridich comenz¨® a trabajar en los Rockies en 2004, cuatro a?os despu¨¦s de haber entrado como ejecutivo en las oficinas de la MLB y tras haberse graduado en Harvard. Ha ido ascendiendo en el organigrama ejecutivo de la organizaci¨®n desde entonces. A finales de la temporada 2014 ocup¨® el puesto de manager general. Desde ah¨ª comenz¨® una reconstrucci¨®n que llevaba a?os pidiendose a gritos. Es lo que suele pasar cuando encadenas cinco a?os consecutivos con un r¨¦cord perdedor y has quedado ¨²ltimo de divisi¨®n en tres de las ¨²ltimas cuatro temporadas. No le ha temblado el pulso para destruir, est¨¢ por ver c¨®mo construye.

Entrenador: Walt Weiss *

Walt Weiss fue jugador de los Colorado Rockies entre 1994 y 1997. A pesar de ser de Nueva York, aquella experiencia le marc¨® porque, una vez reitrado, estuvo seis a?os como consejero de la franquicia. Se retir¨® en el 2008 para pasar m¨¢s tiempo con su familia pero, como tantos que pronuncian esa frase, pronto descubri¨® que su familia ten¨ªa m¨¢s cosas que hacer que pasar tiempo con ¨¦l y volvi¨® a la actividad del b¨¦isbol en Aurora, tambi¨¦n en Colorado, entrenando a un equipo de instituto. Los lazos con los Rockies no se perdieron, de la misma forma que no los perdi¨® con el estado en s¨ª, y en el 2013, se convirti¨® en el entrenador de la franquicia a la que est¨¢ unido hace tanto tiempo.

Su gran estrella: Nolan Arenado

La eclosi¨®n definitiva de Nolan Arenado fue una de las pocas buenas noticias de los Rockies la pasada campa?a. Se sab¨ªa que era un jugador estelar en defensa, un tercera base de enorme futuro y potencial... no se sab¨ªa, sin embargo, que pod¨ªa llegar a 42 home runs.

Estrella ofensiva: Carlos Gonz¨¢lez

El venezolano Carlos Gonz¨¢lez, apodado ¡®CarGo¡¯, es una de las pocas constantes brillantes en una franquicia que se ha acostumbrado a perder. Su juego en el outfield ha sido de una estabilidad enternecedora, emocionante entre tanto desastre. Ha sido capaz de ganar el permio a jugador ofensivo del a?o, a meejor pegador, dos all stars y tambi¨¦n tres premios como mejor defensor en su posici¨®n. Es cierto que no al nivel de las m¨¢s grandes estrellas de este deporte, pero s¨ª lo suficiente como para ser querido por cualquiera que ame este deporte como un jugador completo, profesional y admirable. Con una nueve previsible temporada perdedora, la sexta consecutiva, en el horizonte de los Rockies, un traspaso a mitad de a?o se vuelve probable.

Pitcher estrella: Jorge De la Rosa

Jorge de la Rosa no es, en modo alguno, un pitcher estelar de la MLB. Su ERA medio, en sus doce temporadas en la competici¨®n, es de 4.55, que no grita dominio por ning¨²n lado. Adem¨¢s, sus mejores a?os ya han pasado y se ha establecido con un ERA por encima de 4.00 en las ¨²ltimas campa?as. Pero estos n¨²meros son un poco enga?osos, porque lanzar en Denver, a un milla de altitud sobre el nivel del mar, es una de las cosas m¨¢s complicadas que existen en b¨¦isbol, como saben la gran cantidad de pitchers que han pasado por los Rockies sin alcanzar su potencial. En ese sentido, la carrera de De la Rosa es muy estimable y es lo ¨²nico a lo que puede agarrarse la franquicia en su rotaci¨®n titular de lanzadores.

Coors Field: el escenario m¨¢s alto en toda la MLB

El ballpark de los Rockies combina el estilo retro de acero y ladrillo de los a?os 20 parecido al Ebbets Field, con todas las comodidades y tecnolog¨ªa del siglo XXI. Encajado perfectamente en el downtown de Denver, el Coors Field es uno de los estadios con mayor aforo de la MLB, y es que tras las dos primeras temporadas tuvo que ser ampliado porque los 43.000 espectadores iniciales se quedaron cortos. Est¨¢ situado a una milla por encima del nivel del mar, y eso le hace el parque m¨¢s favorable para los hitters en las Mayores.

El para¨ªso definitivo para los bateadores. No hay mejor campo para los bateadores en la MLB. La clave no es tanto la altitud, que tambi¨¦n ayuda, sino que el outfield tiene unas dimensiones enormes que ayuda al ataque de forma exponencial. Los pitchers sufren como nadie aqu¨ª.?

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