EUROCOPA DE BELGRADO | ESPA?A 7- RUSIA 3
Espa?a campeona reina en Europa, ... y van siete t¨ªtulos
La Selecci¨®n complet¨® una final perfecta para destrozar a Rusia (7-3) y levantar la s¨¦ptima Eurocopa en Belgrado. Miguel¨ªn y Rivillos comparten bota de oro.
Espa?a, heptacampeona de Europa tras destrozar a Rusia (7-3). Qui¨¦n le iba a decir a Paulo Roberto, Vicent¨ªn, al pionero Javier Lozano que 20 a?os despu¨¦s de que ellos marcaran el camino en C¨®rdoba, ver¨ªan c¨®mo los que recogieron su testigo han acumulado ya en las vitrinas espa?ola ?siete Eurocopas! Todas han tenido sus m¨¦ritos, haza?as, h¨¦roes... y la de Belgrado no ha sido menos. Los 14 hombres que siguieron ciegamente la idea de Jos¨¦ Venancio L¨®pez, ese t¨¦cnico que ha sabido inculcar la importancia de enfundarse La Roja de las dos estrellas, ya han pasado a la historia de uno de los deportes m¨¢s laureados de este pa¨ªs.
Hablaba Skorovich en la previa, que el triunfo ruso sobre la Selecci¨®n en las semifinales de Amberes 2014 era una ventaja psicol¨®gica. Pronto vio que estaba tremendamente equivocado. Espa?a mord¨ªa en defensa, sabiendo perfectamente por d¨®nde iban a venir los peligros de los representantes de la 'Escuela del Este' salpicada de samba brasile?a. A¨²n as¨ª, fue Rusia la que lo intent¨® primero y se encontr¨® con un Paco Sedano que volvi¨® a ser un muro. Pronto Miguel¨ªn, con una tijera espectacular, mandaba el bal¨®n al larguero.
Pero el primer tanto lleg¨® como casi siempre, desde la pizarra de Venancio. Con una jugada sencilla (eso s¨ª, elaborad¨ªsima) que sale casi siempre. Bloqueos para que ?lex, el 'diablo de Cieza' ?le llaman, la pusiera en la escuadra. Golazo.
Tras el tanto, Rusia quiso tomar el control, imponer su ritmo, buscar los aclarados para el ruso-brasile?o Robinho... In¨²til. Un robo de Pola, y una definici¨®n extraordinaria, significaban el segundo. Rivillos, de estrategia, y otra vez Pola, tras birlar otro bal¨®n en la salida rusa, anotaba el cuarto rubricando su enorme torneo y la gran primera parte espa?ola, cuyo ¨²nico borr¨®n fue el tanto de R¨®mulo, a s¨®lo cinco segundos del descanso.
Eso no cambi¨® en nada la intensidad de los espa?oles, que volvieron del vestuario con el mismo nervio defensivo. Rusia era incapaz de encontrar rendijas por las que crear ocasiones. A falta de 14 minutos, Skorovich no esper¨® m¨¢s y meti¨® a R¨®mulo de portero-jugador. La idea del t¨¦cnico ruso, como casi siempre en este torneo, sali¨® al rev¨¦s. Y m¨¢s ante la defensa perfecta espa?ola. Miguel¨ªn rob¨® un bal¨®n (otro) a R¨®mulo para el 5-1 y, despu¨¦s de que Robinho acortara distancias, anot¨® desde su campo el 6-2. Mario Rivillos le imit¨® poco despu¨¦s en el s¨¦ptimo tanto que cerr¨® el partido. Tantos que les hac¨ªan compartir al balear y al torrejonero la bota de oro del torneo. Goles que dan un t¨ªtulo, que remarcan una idea. Que devuelven a Espa?a el trono del f¨²tbol sala europeo.