"En los Juegos, R¨ªo no ser¨¢ segura al 100% con el zika"
Clarice Arns, investigadora y coordinadora de la Red Zika, ha encontrado el test de diagn¨®stico r¨¢pido y dice: "No creo que haya contagio por saliva o fluidos".
Sacar del laboratorio durante estos d¨ªas a la doctora Clarice Arns da un poco de pudor. Esta prestigiosa investigadora de la UNICAMP (Universidad de Campinas, S?o Paulo) coordina la Red Zika, formada por los institutos biol¨®gicos de las principales universidades paulistas. Llevan trabajando varias semanas a tiempo completo en una prueba que diagnostique a la mayor brevedad posible el virus Zika, para poder controlar mejor la enfermedad y allanar el camino. Las lentitud de las pruebas que hasta la fecha se est¨¢n utilizando son un obst¨¢culo m¨¢s en la lucha contra el enemigo p¨²blico n¨²mero uno de Brasil en la actualidad.
La nueva diablura del mosquito Aedes aegypti, viejo conocido que lleva toda la vida agitando Brasil propagando dengue, fiebre amarilla y chikungunya, tiene al mundo m¨¦dico patas arriba. El aumento de episodios de beb¨¦s con microcefalia, nacidos de madres que sufrieron el virus, tres muertes combrobadas en adultos (durante 2015) e incluso casos de s¨ªndrome Guillain-Barr¨¦, han alertado s¨²bitamente a las autoridades. De estas supuestas conexiones, a¨²n en an¨¢lisis, viene la declaraci¨®n de emergencia de salud p¨²blica de importancia internacional de la OMS. Ah¨ª est¨¢ el quid de la cuesti¨®n: lo que empez¨® siendo m¨¢s leve que los casos m¨¢s leves de dengue, y solo transmitido por picadura, corre riesgo de irse de las manos, sobre todo si se llegase a comprobar cient¨ªficamente tanto la propagaci¨®n a fetos como el contagio tambi¨¦n a trav¨¦s de la saliva, la sangre y los flu¨ªdos sexuales. Ambos factores, junto con la articulaci¨®n de la mencionada prueba r¨¢pida que diagnostique la enfermedad, son ahora mismo el objetivo n¨²mero uno de las investigaciones. Sin estas informaciones ser¨¢ complicado avanzar en la vacuna ¨CEl Ministro de salud anunci¨® que podr¨ªan comenzar los trabajos el a?o que viene. Primero, por cierto, llegar¨ªa la del dengue, cuyo desarrollo se encuentra ya en la ¨²ltima fase¨C.
Clarice Arns habla pausadamente, apoyada en la experiencia de treinta a?os estudiando, aislando virus y coordinando equipos. Cree en el trabajo en equipo. Antes de entrar en profundidad en su ¨²ltimo e importante avance, subraya: ¡°Lo hemos conseguido con una buena ayuda del Instituto Pasteur, que es un buen socio nuestro, nos ha cedido gran parte de la tecnolog¨ªa que usan en los an¨¢lisis de virus en ?frica¡±.
Respecto a la prueba de diagn¨®stico, Clarice Arns y la Red Zika tienen excelentes noticias. En unos d¨ªas se lanzar¨¢ el muy necesario primer test de diagn¨®stico r¨¢pido. ¡°Es un test adaptado de otro que lleva funcionando desde hace a?os, orientado a otros virus, como el dengue. Es un test molecular, no falla y es m¨¢s r¨¢pido que los test celulares. Este detecta la gen¨¦tica del virus Zika, detecta en cuatro o cinco horas si el virus est¨¢ en el organismo; solo en pacientes agudos, que lo tengan dentro en ese momento¡±. Esto es fundamental para poder ir mapeando la dolencia por todo el pa¨ªs, y que el resto de investigaciones puedan ser m¨¢s efectivas.
La investigadora recuerda que ¡°una persona que ya ha sufrido el virus Zika, se convierte en inmune, y adem¨¢s no lo transmite, solo se transmite cuando est¨¢ en la sangre; por lo tanto las futuras mujeres embarazadas [ante las investigaciones que cada vez m¨¢s relacionan zika con la microcefalia en fetos] tampoco tendr¨¢n problemas de ning¨²n tipo¡±.
De momento no hay prueba efectiva que verifique tambi¨¦n si se poseen anticuerpos del virus por haberlo sufrido en el pasado. Arns resta importancia a este hecho. Lo razona as¨ª: ¡°Esos ser¨ªan test de serolog¨ªa, los tenemos en S?o Paulo, pero a¨²n no consiguen ser espec¨ªficos para el Zika, son comunes a todos los Flavivirus (dengue, fiebre amarilla, chikungunya, etc), y no adelantar¨ªamos nada por esa v¨ªa. Los resultados saldr¨ªan muy confusos. Por eso hemos tenido que trabajar en otra v¨ªa m¨¢s efectiva¡±. Tambi¨¦n es primordial, por lo tanto, para el control de la enfermedad, que todo aquel que crea tener los s¨ªntomas se haga la prueba al instante.
El Gobierno brasile?o, mientras los estudios avanzan fugaces, lucha a muerte contra los focos del mosquito, un enorme peligro de diminuto tama?o al que le gustan los grandes n¨²cleos urbanos, las acumulaciones de agua estancada ¨Ccharcos de agua sucia, dep¨®sitos, desag¨¹es, macetas¨C y la plena luz del d¨ªa, o la noche en lugares iluminados. El 80% de los focos se localizan en ambientes domiciliarios o alrededores. Por eso el epicentro de la locura puede encontrarse c¨®modamente instalado en la casa de cualquier vecino despistado, y por eso se han intensificado las exploraciones desde la regi¨®n nordeste ¨Cel estado de Pernambuco es el m¨¢s afectado¨C hasta las grandes metr¨®polis ¨CS?o Paulo preocupa mucho, por su casi quince millones de habitantes, y R¨ªo, claro, por las Olimpiadas y su inmenso altavoz al exterior¨C. En algunos municipios nordestinos los agentes de salud van casa por casa, acompa?ados incluso por militares, recordando de paso que la prevenci¨®n tiene que ser llevada a cabo entre todos, dados los conocidos gustos del mosquito a la hora de asentar criaderos.
Lo peor de todo ser¨ªa la nada deseable corroboraci¨®n de que el virus Zika se contagia por saliva, sangre y fluidos. Ante esto, la investigadora Clarice Arns se sincera: ¡°No creo que el Zika sea contagioso por saliva o flu¨ªdos. El virus se manifiesta en esos flu¨ªdos, pero eso no quiere decir que tenga la capacidad de transmitirse. Puede darse el caso que en alguna herida abierta en contacto con otra herida abierta, donde fluya la sangre, suceda, pero es muy raro. El virus necesita la sangre para hacer la multiplicaci¨®n, necesita el vector. Los supuestos casos que han aparecido en algunos lugares no est¨¢n demostrados m¨¦dicamente, no los veo l¨®gicos¡±.
El debate de la influencia del Aedes aegypti en la ¨¦poca de los Juegos Ol¨ªmpicos, por supuesto, contin¨²a. Se sabe que act¨²a m¨¢s y mejor con temperaturas altas y, por supuesto, con humedad; y agosto en R¨ªo es el mes m¨¢s seco, y con unas temperaturas medias que pueden estar 8-10 grados por debajo de las de su verano. Sin embargo, el mosquito lleva tantas d¨¦cadas empadronado en la Ciudad Maravillosa que poco a poco se va acostumbrando tambi¨¦n a esas condiciones climatol¨®gicas.
El Ayuntamiento de R¨ªo de Janeiro remarca que ¡°de manera habitual, un batall¨®n de 3.000 agentes de salud municipales vigilan a diario los focos del conocido mosquito, incluso en la ¨¦poca de menor riesgo. Las acciones de prevenci¨®n se intensifican en verano (diciembre, enero y febrero)¡±, cuando R¨ªo es un horno y las lluvias son colosales. Desde el gobierno municipal se subraya que la ciudad sede de las Olimpiadas ¡°no sufre ninguna epidemia de las afecciones provocadas por el Aedes aegypti (Zika, Dengue, Chikungunya)¡±. El a?o 2015, en este sentido, fue un buen respiro en cuanto a resultados, rompiendo la tendencia negativa del ¨²ltimo lustro.
Ante la presi¨®n internacional de cara a la organizaci¨®n de los Juegos Ol¨ªmpicos en el mes de agosto, la Secretar¨ªa de Salud del Ayuntamiento de R¨ªo anuncia que, a pesar de tratarse de una ¨¦poca de menor incidencia del mosquito, se van a intensificar las acciones de prevenci¨®n para presentar una ciudad cien por cien segura. Un mes antes de la inauguraci¨®n, un equipo especial de los agentes municipales de salud va a recorrer una a una todas las instalaciones y residencias ol¨ªmpicas, para eliminar cualquier foco infectado que se localice. Una vez iniciada la competici¨®n, otro equipo especial quedar¨¢ fijo en estas mismas zonas, en vigilancia permanente (Zonas organizadas en las regiones de Barra da Tijuca, Deodoro, Maracan?, Copacabana y Villa Ol¨ªmpica.). ¡°Una ciudad cien por cien segura yo no dir¨ªa¡±, aclara Clarice Arns. ¡°No puedes asegurar que nadie se infecte, aunque el 70% de las personas infectadas ni sepa que le ha picado el mosquito. Si en agosto siguen las dudas, yo no recomendar¨ªa visitar las zonas afectadas a ninguna mujer embarazada¡±. ?Pero cu¨¢ndo se podr¨¢ confirmar si existe relaci¨®n directa entre Zika en embarazadas y microcefalia de los fetos, y si hay nuevas formas de contagio? ¡°En cualquier momento. Las investigaciones, nuestras y de los estadounidenses, van a toda velocidad¡±.