El patriotismo pagado

El pasado mayo, el senador Jeff Flake (republicano por Arizona) revel¨® que esos famosos saludos a las tropas tan vistosos de principios del mes de noviembre en la NFL no eran m¨¢s que mera publicidad y marketing, no un gesto de agradecimiento. M¨¢s de $6 millones de d¨®lares, provenientes de los contribuyentes, que el Departamento de Defensa ha destinado a 16 franquicias de la NFL durante las ¨²ltimas cuatro temporadas para rendir honor al ej¨¦rcito con ceremonias. NJ.com sacaba a la luz, a ra¨ªz de la revelaci¨®n del senador republicano, la lista de contratos de la liga con las organizaciones sobre esta materia.

Flake se ali¨® entonces con otro senador republicano, John McCain, candidato a la Casa Blanca en 2008, para elaborar un informe publicado la pasada semana coincidiendo con la campa?a anual de la NFL Salute to Service. Denuncian lo que denominan ¡°patriotismo pagado¡±: ¡°dado los inmensos sacrificios que hacen nuestras tropas, es m¨¢s apropiado que cualquier organizaci¨®n deportiva que quiera hacerles honor lo haga bajo su gasto y no el de los contribuyentes¡±, reza el informe. Exponen que el Departamento de Defensa financia a franquicias deportivas de NFL, NHL, NBA, MLB y MLS (y tambi¨¦n programas universitarios) a cambio de tributos a las tropas estadounidenses como ceremonias, actividades patri¨®ticas, cantar el himno americano, first pitches de honor, puck drops de honor, etc.

Lo cierto es que el informe, que ha levantado m¨¢s polvareda por coincidir con la campa?a de la NFL (habr¨¦is visto varias ceremonias y tributos en la previa y descansos de los partidos), fue una enmienda de una ley aprobada por el Congreso el pasado junio. Esa enmienda pon¨ªa adem¨¢s presi¨®n sobre las franquicias para donar los beneficios directos de estos tributos a organizaciones sin ¨¢nimo de lucro que ayuden a miembros del ej¨¦rcito estadounidense, veteranos o familias. Pero la ley fue vetada por el presidente Barack Obama por razones ajenas a esa enmienda, por lo que esta regulaci¨®n del ¡°patriotismo pagado¡± que proponen los senadores republicanos sigue esperando en el poder legislativo.

El punto de vista de McCain y Flake, obviamente patri¨®tico, es que los americanos se merecen que los homenajes a los hombres y mujeres que dan la vida por su pa¨ªs sean de verdad, de sentimiento, sin ¨¢nimo de lucro. Adem¨¢s se cuestionan el retorno de inversi¨®n de reclutamiento, es decir, si todo ese dinero est¨¢ bien invertido para traer a m¨¢s j¨®venes chavales al ej¨¦rcito estadounidense.

El punto de vista de la NFL, de nuevo a verlas venir, es que los esfuerzos tradicionales de marketing ¡°no se han mantenido separados¡± de las demostraciones orientadas ¨²nicamente a honrar a las tropas, tal como reza un memor¨¢ndum publicado por la liga el pasado 2 de noviembre en respuesta a los senadores por Arizona. Tarde y oportunista, el comisionado Roger Goodell dijo que la NFL auditar¨¢ esos contratos de los equipos con el Departamento de Defensa y devolver¨¢ el dinero utilizado de forma inapropiada.

El punto de vista de alguien que piense fuera de la caja del patriotismo americano es que sigue la premisa de ¡°robo bancos porque es donde est¨¢ el dinero¡±. Es decir, suelta toda su propaganda con la colaboraci¨®n lucrativa de los due?os de la NFL en un mercado potencialmente enorme para reclutar j¨®venes para sus particulares guerras. Ya no es subliminal, sino que es visible a los ojos de todos, y es que adem¨¢s la correlaci¨®n entre el f¨²tbol americano y luchar en la guerra est¨¢ ah¨ª, tanto en su propia naturaleza como en las met¨¢foras militares de los anuncios de televisi¨®n. Y no es que lo diga s¨®lo yo porque pienso ¡°outside the box¡±, sino que en palabras de la madre de Pat Tillman, aquel jugador de los Cardinals que hizo la transici¨®n de combate sobre el campo de football al combate real en Afganist¨¢n (donde fue abatido por fuego amigo), ¡°el sentimiento de compa?erismo es importante para todos los humanos y creo que el compa?erismo en el deporte da la mayor recompensa. Muchos j¨®venes se unen al ej¨¦rcito para tener ese sentimiento de pertenecer a algo, ese sentimiento de hermandad. Es irresponsable intentar persuadir a los j¨®venes para unirse al servicio militar con mensajes subliminales.¡±