"Nos separan 26 a?os, nos une la marcha y el apellido Garc¨ªa"

La historia va de marchadores. Jes¨²s ?ngel Garc¨ªa Bragado, de 45 a?os, es el m¨¢s veterano de la Selecci¨®n en Pek¨ªn, donde en los 50 km cumplir¨¢ 12 Mundiales (cuatro medallas) y se convertir¨¢ en el atleta que m¨¢s ediciones ha disputado. El caso opuesto es Diego Garc¨ªa Carrera (20 km). Con 19 primaveras, el campe¨®n de Europa j¨²nior en 10 km es el benjam¨ªn de Espa?a. Les separan 26 a?os, pero tienen mucho en com¨²n...

¡°Para empezar nos apellidamos Garc¨ªa y somos madrile?os, del Este¡±, relata Bragado, afincado en Barcelona, pero que suele visitar su barrio de Canillejas. En una de esas incursiones conoci¨® a un chico de 14 a?os, de Arturo Soria, que se llamaba Diego. ¡°Le mostr¨¦ los circuitos de la zona, por donde yo entrenaba¡±, cuenta Chuso. ¡°Para m¨ª era incre¨ªble que Bragado me estuviese acompa?ando. Era una leyenda que ve¨ªa en la tele, y de repente lo ten¨ªa delante¡±, a?ade Garc¨ªa Carrera.

Pese a la diferencia de edad, han cultivado una buena amistad. ¡°Yo he visto pasar ya a a mucha gente y algunos me ver¨¢n como un bicho raro porque tengo la edad de los entrenadores... pero con esta generaci¨®n he encajado¡±, dice Bragado, capit¨¢n de la Selecci¨®n, que no falta a ninguna cita internacional desde 1992. En Pek¨ªn, Chuso har¨¢ su carrera: ¡°Correr¨¦ atr¨¢s e intentar¨¦ ir hacia adelante. A ver qu¨¦ pasa. Ya es diferente, antes luchaba por medalla y ahora me lo tomo de otra forma. Tengo que aceptar mi rol, pero quiero estar entre los diez primeros¡±. Diego lo idolatra ¡°por su car¨¢cter¡±. ¡°Las narices que le echa en competici¨®n son incre¨ªbles. Da igual la edad, que le operen de la cadera... Para ¨¦l no valen excusas y su longevidad es asombrosa. No me veo tanto tiempo marchando¡±.

Diego cumpli¨® con el oro europeo j¨²nior en 10 km, pero no est¨¢ en Pek¨ªn ¡°para disfrutar¡±. ¡°Ya que se queda gente en casa y llevo todo el verano entren¨¢ndome, no voy a hacer el tonto. Quiero hacerlo bien y pelear¨¦ por estar lo m¨¢s adelante posible. Ser de los 15 primeros ser¨ªa un ¨¦xito total. Voy el 30 o el 31, pero jugar¨¦ con la estrategia¡±, dice Diego, que acredita unos prometedores 1h 21:45 en su prueba de Pek¨ªn: los 20 km. Toca el tromb¨®n de maravilla (10? de conservatorio) y tiene una mente ¡°clara y madura¡±. Lo dice Bragado: ¡°Es m¨¢s precoz que yo. Su futuro est¨¢ por escribirse y lo mejor que tiene es la actitud. Sabe lo que quiere. Como yo, tiene car¨¢cter, aunque ¨¦l lo lleva mejor ¡±.

Sigue la marcha. En Shanghai, tras una prueba, Diego quer¨ªa salir de noche. ?Qui¨¦n se apunt¨®? ¡°Chuso. Aguant¨® como el que m¨¢s tras haberse metido un 50 km¡±. ¡°Fui en plan padre¡±, bromea Bragado, que pide: ¡°Ojal¨¢ coincidamos en R¨ªo¡±.