Primus inter pares: ?cu¨¢l es la dinast¨ªa m¨¢s grande de la NFL?

?Con esto qu¨¦ pretendo decir? Pues que resulta de todo punto imposible identificar la mejor dinast¨ªa sobre el emparrillado cuando de pasiones, fobias y filias deportivas hablamos. Est¨¢ claro que cualquiera de los seguidores de las franquicias citadas tiene argumentos ¨Ccuantitativos, cualitativos y sentimentales- m¨¢s que de sobra para considerarse miembros de la estirpe m¨¢s exitosa del football profesional. Los amigos del hockey hielo, canadienses y por tanto mucho m¨¢s pragm¨¢ticos y poco amigos de las controversias, tienen reconocido oficialmente en su Hall of Fame de Toronto un lugar para los equipos ?din¨¢sticos?: Senators, Maple Leafs, Red Wings, Canadiens, Islanders y Oilers. Mientras eso no ocurra en Canton, ser¨ªa bueno aportar a este debate algunas dosis de objetividad de la mano de las siempre as¨¦pticas matem¨¢ticas, de forma que cuando alguien se ufane de su impecable linaje footbalistico, se le pueda contravenir con argumentos inapelables articulados desde la racionalidad. Y en este sentido, pocos juegos hay m¨¢s racionales que el ajedrez.

Hasta 1960, la Federaci¨®n de Ajedrez de los Estados Unidos empleaba como sistema de clasificaci¨®n num¨¦rica el ideado por Kenneth Harkness que si bien era razonablemente justo, en muchas ocasiones desvirtuaba el aut¨¦ntico nivel del jugador. A partir de aquel a?o se instaur¨® un nuevo mecanismo de valoraci¨®n dise?ado el profesor de F¨ªsica de la Universidad de Marquette, Arpad Emrid Elo, reforzando el modelo estad¨ªstico del c¨¢lculo de manera que se vincularan los resultados de las partidas con las variables subyacentes que representan la verdadera capacidad competitiva de cada jugador. La puntuaci¨®n Elo ¨Cque as¨ª se bautiz¨® el m¨¦todo- de un jugador se determina a partir de sus resultados contra otros competidores; la diferencia de ese puntaje entre los jugadores determina una probabilidad estimada de puntuaci¨®n entre ellos, llamada ?puntuaci¨®n esperada? o expectativa, lo que se configura como su probabilidad de ganar m¨¢s la mitad de su probabilidad de hacer tablas. Les dejo aqu¨ª el algoritmo del Profesor Elo; por lo que a mi respecta, lo miro y siento lo mismo que cuando abro el cap¨® de mi coche.

Lo cierto es que este sistema de escalafonamiento fue el empleado por la FIDE desde 1971, siendo su primer l¨ªder el legendario Bobby Fischer (2.760 puntos Elo), ostentando al d¨ªa de hoy el record de puntos el joven Magnus Carlsen (2.862 puntos). La fiabilidad de este sistema de puntuaci¨®n pronto fue importado por otras disciplinas tanto de esparcimiento como deportivas. As¨ª, organizaciones de Scrabble ¨Cexcepto en el Reino Unido, c¨®mo no-; federaciones de backgammon o diversos juegos online emplean este sistema. En cuanto a los deportes, los practicantes del korfball holand¨¦s, o la muy valorada clasificaci¨®n de mundial de selecciones de futbol ¨Cno confundir con el ranking FIFA- tambi¨¦n usan los Elo ratings. Por lo que respecta al deporte norteamericano, desde 2006 la prestigiosa Baseball Prospectus aplica el algoritmo de Elo en su base de datos y el football universitario manej¨® asimismo entre 1998 y 2013 este modelo estad¨ªstico para la elaboraci¨®n de su Bowl Championship Series, sustituido despu¨¦s por el reciente College Football Playoff.

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Tenemos entonces el algoritmo, disponemos de la masa cr¨ªtica, conocemos la fiabilidad del m¨¦todo¡­pues basta de conjeturas ?Cu¨¢l es la dinast¨ªa de las dinast¨ªas? ?Cu¨¢l es la estirpe sagrada? ?Qui¨¦nes son brahmanes y quienes chatrias? Para contestar a estas preguntas nos ayudaremos del engorroso trabajo de campo efectuado por el analista y estad¨ªstico Nate Silver, quien se tom¨® la molestia de aplicar el sistema de puntuaci¨®n Elo a los mejores equipos de la NFL ¨Cera post-merger, lo que deja fuera del estudio a los Packers de Lambeau y Lombardi-, tomando como variables periodos temporales comprendidos entre uno y veinticinco a?os, de manera que la cata ofrezca una perspectiva temporal solvente en la que apreciar la evoluci¨®n del equipo. La primera columna representa el segmento temporal considerado, en la segunda figura el mejor equipo, con la puntuaci¨®n Elo a su derecha y debajo la temporada o temporadas donde ?rein¨®?, en la segunda y tercera, se repiten los elementos, pero referidos a los mejores segundos y terceros equipos. El resultado de aplicar el algoritmo de Elo a la elite de la NFL es el siguiente:

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Del anterior cuadro se pueden extraer algunas conclusiones que si bien antes pod¨ªamos inferirlas, ahora resultan estad¨ªsticamente incontrovertibles. En primer lugar, y dese 1970, las franquicias m¨¢s exitosas de la NFL han sido b¨¢sicamente seis: Miami, San Francisco, Pittsburgh, Dallas, New England y Green Bay. En segundo lugar, tambi¨¦n puede afirmarse m¨¢s all¨¢ de toda duda que, tomando como referencia periodos de tiempo superiores a cinco a?os, 49ers, Patriots y Cowboys son los equipos que ofrecen una mayor regularidad en segmentos temporales extensos, en otras palabras, son franquicias que se han caracterizado por largos periodos de dominio, mostr¨¢ndose como estructuras deportivas s¨®lidas m¨¢s all¨¢ de aspectos coyunturales como el buen tino en los drafts, lesiones, trades o cambios en el staff. De igual manera, pero en relaci¨®n con las prestaciones en una sola temporada, es inapelable la fortaleza de los Pats, cuyas temporadas 2007 y 2004 arrojan los mejores ratings de Elo del estudio, por delante incluso de los inolvidables Bears de 1985. Es tambi¨¦n rese?able apreciar la fiabilidad de Green Bay, un equipo que a pesar de tocar el cielo en los arcaicos treinta y en los dorados sesenta, es capaz de ofrecer nuevamente extraordinarios ratios de Elo entre 1992 y la actualidad. Resulta tambi¨¦n sorprendente advertir la dis¨ªmil relaci¨®n entre anillos logrados y preeminencia din¨¢stica: 49ers y Cowboys, con cinco Lombardis, y Patriots, con cuatro, ofrecen tambi¨¦n un reflejo en la dominaci¨®n ejercida durante lustros e incluso d¨¦cadas. Por el contrario, el equipo con m¨¢s Super Bowls en sus vitrinas, demuestra sin embargo un perfil mucho m¨¢s bajo en cuanto a su capacidad intimidatoria durante periodos sostenidos. Los acereros cuando huelen sangre no suelen perdonar, otra cosa es la larga y no siempre regular marcha hacia la presa.

Dicho esto, ?cu¨¢l es el primus inter pares de esta constelaci¨®n de leyendas? Si atendemos a la primera columna, la que hace referencia al mejor conjunto, de los veinticinco par¨¢metros temporales, en quince de ellos el mejor rating Elo lo lograron los 49ers. Dicho de otra manera, en m¨¢s de la mitad de las veces entre las combinaciones cronol¨®gicas comprendidas entre 1970 y 2014, los ex Candlestick Park fueron sin lugar a dudas la franquicia dominante ?puede afirmarse entonces que el equipo de Montana, Young y Rice ha sido la m¨¢s grande dinast¨ªa de la NFL? S¨ª pero¡­no. F¨ªjense, los Patriots aparecen como mejor equipo en ocho ocasiones, pero si atendemos al resto de columnas, consta como mejor segundo en quince ocasiones y como mejor tercero, en una m¨¢s. Total, veinticuatro veces. Los 49ers, a las quince menciones como mejor franquicia, se le deben adicionar cuatro como mejor segundo y tres como mejor tercero, que suman un total de veintid¨®s presencias. A mucha distancia aparecen Cowboys con trece y Steelers con siete. En s¨ªntesis, si bien 49ers ha sido la mejor dinast¨ªa en cuanto a m¨¢xima puntuaci¨®n de Elo, los Patriots se muestran, desde un prisma global, como el conjunto m¨¢s ganador, fiable y regular durante m¨¢s tiempo ?entonces? ?No hab¨ªamos quedado que el c¨®mputo Elo resultaba un m¨¦todo cient¨ªfico ponderado y justo que nos iba a proporcionar por fin la respuesta a la pregunta del mill¨®n de d¨®lares? Pues no, querido lector. Las estad¨ªsticas, las cifras, los datos son, como los sentimientos, manipulables ¨Cque nos lo digan en las jornadas electorales en las que todos ganan indefectiblemente- y susceptibles de utilizarlas a nuestra conveniencia. Es m¨¢s, en el propio ¨¢mbito ajedrecista, se relativiza un ranking Elo donde claramente salen beneficiados los j¨®venes jugadores que disponen tanto de un mayor n¨²mero de torneos, como de apoyos tecnol¨®gicos e inform¨¢ticos muy potentes que facilitan su formaci¨®n. Los especialistas, en este sentido, destacan por ello el valor real de los asombrosos 2.851 puntos de Gary Kasparov.

Por todo ello, olviden todo lo que hasta ahora han le¨ªdo, abjuren de los algoritmos, de las ecuaciones y de las variables. ?Que usted considera que no ha habido cosa parecida a la West Coast Offense?, pues sost¨¦ngalo; que piensa por el contrario que con el druida Belichick se rompi¨® el molde, defi¨¦ndalo; ?acaso cree que los Undefeated Dolphins de 1972 son una referencia imbatible? adelante amigo; si se derriti¨® con The Triplets -Troy, Emmit y Michael- ?porqu¨¦ ocultarlo? ?debe sentirse uno culpable de haber disfrutado ¨Cy ganado- con el juego de Lambeau, Starr, Favre y Rodgers?, en fin, ?hay alguna regla que proh¨ªba emocionarse m¨¢s con un front seven desdentado y tetracampe¨®n que con la posesi¨®n del bal¨®n?

Esto es football, esto es deporte, discuta, debata, provoque, j¨¢ctense de ser el verdadero Princeps sin necesidad de respaldarlo racionalmente. La offseason es larga, fr¨ªa y oscura.