Javier pudo al fin dejar atr¨¢s la Nigeria cerrada por ¨¦bola

Javier Mart¨ªnez ya vuelve a pedalear por ?frica en su aventura de dar la vuelta al mundo en bicicleta. Recorre la selv¨¢tica cuenca del r¨ªo Congo, sobre suelo de Camer¨²n, entre animales salvajes y poblados remotos mientras retrata la vida (fotos con las que colabora con ONG¡¯s) por esas latitudes (como se puede leer en su blog, bicicleting.com). Su verdadero objetivo tras dejar atr¨¢s su estancia de m¨¢s de un mes en Nigeria en el que ha conocido, si no lo hab¨ªa hecho ya, algunos de los problemas con los que tienen que lidiar d¨ªa a d¨ªa los ciudadanos de aquel pa¨ªs. ¡°Me acuerdo de la gente maravillosa que he encontrado, donde lo mejor ha sido conocerlos. Desgraciadamente, aunque s¨ª la mayor¨ªa, no todos fueron buenos...¡±, relata.

Todo empez¨® cuando, tras planear concienzudamente atravesar Nigeria, evitando las zonas controladas por los grupos terroristas isl¨¢micos, se encontr¨® atrapado dentro. La epidemia de ¨¦bola hab¨ªa obligado a cerrar las fronteras y ¨¦l se ve¨ªa obligado a esperar en Calabar, frontera con Camer¨²n. Y durante su estancia, no ha sido la enfermedad lo que m¨¢s problemas le ha causado en un pa¨ªs que ha controlado su contagio, sino, primero las sospechas que reca¨ªan en los diferentes pueblos sobre aquel extranjero (fue acusado de terrorista) para luego sufrir, como cualquier otro nigeriano, la corrupci¨®n de parte de la polic¨ªa. ¡°Bueno, ?no tienes un regalo para m¨ª?¡±, escuchaba en los controles.

Aun as¨ª, Javier logr¨® continuar con su aventura, pero no sobre su bicicleta. Mientras su veh¨ªculo navegaba sobre el Delta del N¨ªger camino de Camer¨²n, ¨¦l debi¨® volver a Lagos para cruzar a Ben¨ªn y, desde ah¨ª, viajar hasta el pr¨®ximo pa¨ªs de su ruta. Alejado de las grandes ciudades, vuelve a encontrar bondad y mucha curiosidad por el extranjero. ¡°?Qu¨¦ tengo que hacer para ser turista?¡±, le preguntan. Y ¨¦l mira de nuevo hacia su destino, Sud¨¢frica, mientras vuelve ¡°por fin, a disfrutar con este viaje¡±.