Biarne Riis tambi¨¦n confiesa que tom¨® EPO
Empujado por las confesiones de sus ex compa?eros, Biarne Riis reconoci¨® que tambi¨¦n hab¨ªa tomado EPO, no s¨®lo en el Tour de Francia1996 que gan¨®, sino antes y despu¨¦s. Su falta ya ha prescrito y no le podr¨¢n quitar la victoria. La UCI le pide que devuelva el maillot amarillo.
El ciclismo recibi¨® ayer un nuevo mazazo a su credibilidad: el dan¨¦s Biarne Riis, el hombre que acab¨® con el reinado de Miguel Indurain al derrotarle en el Tour de Francia 1996, confes¨® ayer que se hab¨ªa dopado con EPO entre 1993 y 1998, a?o de su retirada, en una conferencia de prensa en Copenhague (Dinamarca).
Riis no es s¨®lo un ganador del Tour, es tambi¨¦n el director deportivo y propietario de la licencia ProTour del CSC, uno de los mejores equipos mundiales en el que militan Carlos Sastre, ??igo Cuesta, Cancellara, los hermanos Frank y Andy Schleck, Ju?lich y, hasta el a?o pasado, Ivan Basso. En definitiva, uno de los personajes m¨¢s importantes del ciclismo en estos momentos.
El ex ciclista dan¨¦s reconoci¨® que se vio empujado a decir la verdad por las confesiones en cadena de varios miembros del equipo que le ayudaron a ganar aquel Tour (cinco ciclistas, los dos m¨¦dicos y un masajista). Pero tambi¨¦n por causas de conciencia: "He cargado mucho tiempo con esto y puedo decir ahora que soy m¨¢s sabio en mi vida personal y profesional. He venido aqu¨ª para acabar con las discusiones, dejar atr¨¢s el pasado y poder construir algo para el futuro. Esto no debe afectar al brillante esfuerzo y trabajo que hace a d¨ªa de hoy el CSC".
Sin sanci¨®n.
Seg¨²n el C¨®digo Mundial Antidopaje los delitos prescriben en ocho a?os si no se hab¨ªa abierto antes un expediente del caso, por lo que ni Biarne Riis, ni ninguno de los ciclistas que han confesado (entre ellos Erik Zabel, ¨²nico que sigue en activo) podr¨¢n ser sancionados.
Los organizadores del Tour no se han pronunciado a¨²n oficialmente sobre este asunto que deja en el palmar¨¦s de su carrera a un ciclista que ha confesado que se ha dopado. "No pueden hacer nada", afirma V¨ªctor Cordero, director de la Vuelta a Espa?a. "Las clasificaciones no nos pertenecen a los organizadores, sino a la UCI. Es ella quien tendr¨ªa que decidir. El Tour s¨®lo podr¨ªa cometer un error tipogr¨¢fico y dejar un espac¨ªo en blanco".
La UCI si difundi¨® ayer un comunicado, pero en ¨¦l se limitaba a "invitar firmemente al ex corredor a devolver el maillot amarillo, s¨ªmbolo de su victoria". Durante su comparecencia en Copenhague, Riis ya se hab¨ªa adelantado a esta jugada: "El maillot amarillo est¨¢ en una caja de cart¨®n en mi garaje. Pueden llev¨¢rselo cuando quieran. Para m¨ª lo que tienen valor son los recuerdos".
Ullrich.
El ex ciclista dan¨¦s quiso tambi¨¦n justificarse: "He cometido errores y el mayor fue la ambici¨®n. Sacrifiqu¨¦ mucho para estar con los mejores. La perspectiva que ten¨ªamos del dopaje entonces era err¨®nea. Pero para seguir ahora el camino correcto, debemos hacerlo desde el presente y no mirar a los errores del pasado".
Riis exculp¨® a los m¨¦dicos del Telekom, que seg¨²n ¨¦l no facilitaban los estimulantes: "S¨®lo ten¨ªan la funci¨®n de controlar a los corredores que optasen por sustancias prohibidas para que no se pasaran. Fui yo quien compr¨® la EPO y yo la tom¨¦".
De aquel equipo Telekom del Tour 96, s¨®lo quedan tres ciclistas por confesar que tomaron EPO, entre ellos Ull?rich. "Jan debe hacer lo que sea mejor para ¨¦l", coment¨® al respecto Riis, quien dijo no saber si el alem¨¢n se hab¨ªa dopado o no.
En su comunicado, la UCI calific¨® como positivas estas confesiones e invit¨® a hacerlo a todos los corredores que se hayan dopado. "La ley del silencio debe ser rota y todos deben asumir las consecuencias de sus actos".
Pocos se libran de la sospecha en aquel Tour
Pocos se libran de la sospecha de dopaje entre los quince primeros del Tour 96. Riis y Bolts, ya han confesado; Ull?rich ha ca¨ªdo por la Operaci¨®n Puerto; Virenque y Dufaux se vieron envueltos en el esc¨¢ndalo Festina; Alberto Elli, en los registros del Giro 2003; Hamburger dio potivo por EPO; Ugrumov, Escart¨ªn, Olano y Rominger tuvieron que declarar en el juicio del doctor Michele Ferrari, del que eran clientes. Incluso Indurain tuvo un desliz con el Ventol¨ªn, luego aclarado. S¨®lo Luttenberger, Leblanc y Jonkers no tuvieron l¨ªos... que se recuerde.