El sheriff Armstrong no dej¨® escaparse a Simeoni

Hace d¨ªas, Filippo Simeoni ya lo advirti¨® en una extensa entrevista en LEquipe: Mi objetivo en el Tour es ganar una etapa, pero no s¨¦ si Armstrong me dejar¨¢. Y ayer se cumpli¨® su anuncio. En el km 32, el italiano arranc¨® para enlazar con los escapados. El americano sali¨® a por ¨¦l en primera persona, lleg¨® al grupo de fugados, se puso a tirar, abri¨® un hueco de 1:50 minutos... Entonces Chente Garc¨ªa pidi¨® clemencia al texano: Si segu¨ªs aqu¨ª nuestra aventura se acaba. Solucionad vuestras diferencias en otro momento. Y los dos volvieron al redil.

El pecado de Filippo es que en 2001 confes¨® a la justicia que Michele Ferrari, preparador de Armstrong y procesado en Italia por dopaje, le hab¨ªa recetado EPO y otras sustancias.

Nunca cit¨® a Lance, pero el americano se debi¨® dar por aludido porque en 2002 sali¨® en defensa de su m¨¦dico en la RAI: Simeoni es un mentiroso. Ha cambiado su versi¨®n tres o cuatro veces. Antes de estar con Michele ya tomaba EPO. El a?o pasado, el texano volvi¨® a la carga en una entrevista en Le Monde. Y Simeoni, cansado, decidi¨® querellarse contra Armstrong.

Al regresar al grupo, Simeoni recibi¨® insultos, sobre todo de los italianos. Benjam¨ªn Noval, gregario de Lance, reconoci¨® que en su equipo ten¨ªan una consigna: Simeoni no se puede escapar; si ataca, hay que ir a por ¨¦l. Es un norma y hay que seguirla. Y Armstrong, justiciero, apunt¨®: Defiendo los intereses del pelot¨®n. En otros ¨¢mbitos, esto se llama mafia.

El americano

Simeoni s¨®lo quiere destruir el ciclismo, el deporte que le paga... No es un ciclista que queramos ver delante. Por eso, he protegido los intereses del pelot¨®n.

El italiano

Cuando he vuelto al pelot¨®n me han insultado Pozzato, Peron, Guerini y sobre todo Nardello, quien me ha dicho que soy una verg¨¹enza para el ciclismo.