Dar¨ªo Silva, depredador del f¨²tbol

Otro gran partido de Dar¨ªo Silva, ese depredador del ¨¢rea, del f¨²tbol, para cerrar una temporada inolvidable en La Rosaleda y de paso destrozar el sue?o europeo de un querido enemigo como el Sevilla. Un personaje del que descubriremos su importancia el d¨ªa que deje nuestro f¨²tbol. Olimare?o orgulloso, han pasado 30 a?os desde que naci¨® en la regi¨®n uruguaya de Treinta y Tres, a s¨®lo unos pasos del r¨ªo Olimar. Hijo de Doris y Miguel, antes de admirar a su ¨ªdolo Francescoli y de consagrarse estuvo a punto de dejar el f¨²tbol. Se hab¨ªa iniciado en el Deportivo Espa?ol desde los cinco a?os hasta los doce y fue campe¨®n y goleador en todas las categor¨ªas. De all¨ª al modesto Rel¨¢mpago y despu¨¦s al Yerbalense, justo en la etapa en la que casi lo deja todo. El f¨²tbol le daba poco dinero, y estuvo cuatro meses encarg¨¢ndose del campo y los animales en casa de sus abuelos. Lo ten¨ªa decidido, pero Ricardo Gauet y Pepe Gadea le convencieron para ir a la Sub-20 uruguaya y retomar el mejor camino. Quiz¨¢ tambi¨¦n influy¨® su amigo del alma Luis Almada, al que invit¨® a Italia tras su llegada al Cagliari. Su nivel goleador en el Yerbalense le llev¨® a Defensor y un a?o despu¨¦s al hist¨®rico Pe?arol. All¨ª se hizo futbolista del todo, con Gregorio P¨¦rez como t¨¦cnico. Ascendi¨® m¨¢s a¨²n, se proclam¨® m¨¢ximo goleador de Uruguay en 1994 y olvid¨® su decepci¨®n con la selecci¨®n juvenil en el Mundial de Portugal. Aquellos 18 goles en 24 partidos con los carboneros de Pe?arol le abrieron las puertas del Cagliari italiano. Le esperaba Trapattoni y la necesidad de cubrir el vac¨ªo dejado por Dely Vald¨¦s, reci¨¦n vendido al PSG y con el que compartir¨ªa luego alegr¨ªas en el M¨¢laga. Cuatro a?os en Cerde?a, uno en el Espanyol, cuatro en el M¨¢laga y la consagraci¨®n en la selecci¨®n uruguaya ha sido la pen¨²ltima etapa en la carrera de un delantero de primer nivel. Su golazo al Sevilla le define. Un remate seco a la media vuelta, imparable.