Liga de Campeones | Valencia 2 - Arsenal 1
El rey de las Fallas
Carew mete al Valencia en cuartos. Dos goles que valen el liderato. Muy bien Albelda, Vicente y Aimar

La traca la encendi¨® Carew, un tipo que siempre se guarda una bala para el Arsenal, bueno en este caso dos, para convertirse en el Rey de la Fallas de 2003, que pasar¨¢n a la historia por el primer premio de Na Jordana en la secci¨®n especial, por ser las fiestas que m¨¢s visitantes han acogido estos cuatro intensos d¨ªas, y por el brillante pase del Valencia a cuartos de final como cabeza de grupo gracias a este noruego capaz de sacar su mejor versi¨®n cuando m¨¢s lo necesitaba su equipo para rematar la buena faena del Valencia.
En cuanto se sacudi¨® la presi¨®n del Arsenal y esos peque?os fantasmas que rondaron en otro saque de esquina neutralizado por Vicente casi en la misma raya de cal, volvi¨® el Valencia de la grandes citas, ese equipo solvente y generoso en el esfuerzo, que empieza en Albelda y acaba en Aimar, buena sociedad, que ya quisieran muchos de los grandes de Europa, para hacer bueno a Carew, que le cuesta enchufarla pero se crece cuando tiene delante a estos ingleses, a los que ya mand¨® a casa tambi¨¦n hace dos a?os.
Y as¨ª con un valenciano, fuerte y noble en el corte, y un argentino, que volvi¨® cuando de verdad hacia falta que derramara su fantas¨ªa en la dosis precisa, se rehabilit¨® este delantero tan especial dentro y fuera del campo, que anoche s¨ª hizo bien sus deberes para colocar al Valencia entre los ocho mejores conjuntos de Europa, como l¨ªder de su grupo, como hace a?os, a la espera del Madrid, el Inter, de C¨²per (por aqu¨ª se le prefiere en la final, por aquello de que no gana una) y la Juve. Fue el pleno al ep¨ªlogo de San Jos¨¦, la nit de la crem¨¤ y la nit del gol, ¨¦sa que tanto se necesitaba. Pero ante todo, fue una verdadera lecci¨®n de raza de los gladiadores de Ben¨ªtez, que s¨ª recuperaron esas virtudes que le hicieron grande: templanza, presi¨®n y pegada para darle ritmo a la cacer¨ªa inglesa.
Aguant¨® la salida demoledora de Vieira, Henry y, sobre todo, Pires, que montaron un buen l¨ªo en especial por la movilidad del franc¨¦s, que parec¨ªa correcaminos, hasta que este champion¨ªsimo dijo eso de "aqu¨ª mando yo". Y mand¨®, ya lo creo porque no hay nada mejor que tocarle el orgullo. Y lo hizo por la izquierda con el estilista Vicente, que se merend¨® a su buen amigo Lauren, (buen gusto el de Wenger cuando intent¨® ficharle para su proyecto), por el centro con el capit¨¢n Albelda, que se bast¨® para hacerles ver a Vieira y Gilberto, que el bueno es ¨¦l. Por la derecha con Rufete, que se entendi¨® mucho m¨¢s con Angulo, y en especial por la zona de creaci¨®n, con ese Aimar, que da el pase final con toda la elegancia del mundo y por el pu?al de Carew, muy bien arropando el bal¨®n y mat¨¢ndolo cuando tuvo la ocasi¨®n. Cuatro disparos en total y dos goles, el segundo de ellos acrob¨¢tico, made in John, vamos.
Grandeza. La grandeza de la noche salpic¨® a todos, incluido a Palop, que tuvo que lidiar un buen toro en cuanto se lesion¨® Ca?izares. Aunque bien visto, fue un golpe psicol¨®gico para Henry, que ya le hizo tragar quina en Highbury, un partido que aguant¨® a peso el portero valenciano. Desde luego fue una noche completa, el ep¨ªlogo esperado a estas fallas porque este partido, que no fue nunca apto para cardiacos, lo tuvo todo, pero, ante todo, emoci¨®n a raudales.
Siempre abierto, por momentos bronco y con mucho empuje, seguramente la clave para que este Valencia levantara un partido que empez¨® feo y que termin¨® por consagrar a un equipo, al que la radiograf¨ªa confirma que vuelve a ser ese bloque solvente, eminentemente f¨ªsico al que le van los match-ball. El partido de anoche era mucho m¨¢s que una final por las posibles repercusiones an¨ªmicas de un equipo, que podr¨ªa vernirse abajo en la Liga si se desped¨ªa de su sue?o europeo. Pero arruin¨® al Arsenal, que acab¨® bailado, porque este Valencia y por este Carew, que cuando quieren son muy buenos.