Craviotto y el futuro: ¡°Ahora mismo, quiero ser un padre normal...¡±
El pirag¨¹ista, tras el bronce, se queda en la cima del deporte ol¨ªmpico espa?ol, desempatando con David Cal. Tiene seis medallas: dos oros, dos platas y dos bronces.
¡°?Tranquilos, ya no compito ma?ana!¡±. Aparece Sa¨²l Craviotto, liberado ya, ante los medios con el bronce al cuello. Su sexta medalla ol¨ªmpica en cinco Juegos. M¨¢s que nadie en Espa?a. Y sin querer decir que estos son los ¨²ltimos de su carrera.
-?C¨®mo tiene el cuerpo?
-Feliz. El bronce me sabe a gloria. Lo peleamos y estuvimos mano a mano con los alemanes. Lo importante es que dimos espect¨¢culo y el deporte es esto. Que los aficionados se pongan de pie, y si lo hemos conseguido est¨¢ hecho el trabajo.
-En el pantal¨¢n, al acabar, se le vio un poco hundido...
-Pero no por el color de la medalla, sino porque a los 400 metros iba ya picando pala, muerto. Me dej¨¦ todas las energ¨ªas y el alma en la piragua. Una final so?ada.
-?La estrategia fue salir a tope?
-S¨ª, salimos fuertes, con determinaci¨®n. En las finales no vale tanto la estrategia. Tras la semifinal, nos fuimos al hangar con dudas (terceros tras Australia y Serbia). Nos relajamos y casi nos dan para el pelo. Nos dijimos que esto no hab¨ªa acabado. Y ten¨ªamos dos horas por delante. El deporte es una lucha contra la cabeza y puedes entrar en un bucle, as¨ª que nos lanzamos mensajes de ¨¢nimo entre todos. Y sali¨®.
-?La posici¨®n en las semifinales les gener¨® desventaja?
-No creo, aunque fu¨¦semos por la calle siete. S¨ª es verdad que no pod¨ªa mirar hacia al lado y Alemania estaba en la calle cuatro. Ten¨ªamos a Hungr¨ªa de referencia, pero no estar en las calles centrales igual no ha sido lo id¨®neo.
-Van seis medallas, m¨¢s que nadie...
-M¨¢s que el n¨²mero de medallas, valoro haber estado arriba en Pek¨ªn, Londres, R¨ªo, Tokio y Par¨ªs. Son muchos a?os. Hay deportistas que pueden optar a cuatro o cinco medallas en unos mismos Juegos y otros s¨®lo a una. ?Qui¨¦n es mejor deportista? No lo s¨¦. Nunca me han gustado los rankings. Me gustar¨ªa que mi legado reflejara que he sido alguien luchador y constante.
-?Y a partir de ahora?
-?La piragua a un radio de 50 kil¨®metros! Quiero irme de vacaciones, desconectar, pasar tiempo con mis hijas porque ser deportista de ¨¦lite conlleva muchas renuncias. Tengo ganas de ser un padre normal.
-?Este ciclo se le hizo cuesta arriba tras Tokio?
-Pens¨¦ eso al principio, pero no. Ha sido muy bonito. Cooper, Germade y Ar¨¦valo son casi mis hermanos. Ha habido un muy buen rollo y ambiente. Miguel (Garc¨ªa, su entrenador) es otro hermano.
-?Y cerrar¨¢ su carrera?
-Voy a pensar en el presente, en hoy... Aunque tengo 39 a?os y no voy a estar toda la vida con la ¡®pirag¨¹ina¡¯, creo que me merezco afrontar el proceso de pensar qu¨¦ hago. La realidad es que f¨ªsicamente estoy bien, hago lo que me gusta y soy un privilegiado. Igual aguanto un a?o m¨¢s, o lo dejo. No lo s¨¦.
-?Y cree que su figura ha supuesto para el pirag¨¹ismo?
-No quiero que se me recuerde como alguien que gan¨® seis medallas. Sino como alguien que siempre ha tenido claros sus prop¨®sitos, su objetivo, y que se ha sabido rodear. Mi mejor virtud es que he sido lo suficientemente humilde para dejarme ayudar. Constante, pele¨®n y luchador. Es lo que les intento transmitir a mis hijas. En el deporte, en la sociedad, en los estudios, en el trabajo...
-El pirag¨¹ismo ya es el deporte espa?ol con m¨¢s medallas. ?C¨®mo ve el futuro?
-Hay pirag¨¹ismo para rato. Hay chavales de veinte a?os que salen con el cuchillo entre los dientes peleando por medallas. Se est¨¢n haciendo bien las cosas en la Federaci¨®n, los t¨¦cnicos, la base...