El canciller antifascista de la ¡®Mannschaft¡¯
Leon Goretzka llega al Mundial como el futbolista de Alemania m¨¢s combativo contra la extrema derecha y el antisemitismo. Vive en una de las zonas obreras de M¨²nich.
¡°Somos Ministros de Exteriores en pantalones cortos, por eso debemos pelear contra ellos aprovechando que nuestro mensaje llega m¨¢s lejos¡±. Esa frase de Leon Goretzka en ¡®Welt am Sonntag¡¯ resume muy bien la manera de entender el mundo del trabajador mediocentro del Bayern y la selecci¨®n alemana. Se refer¨ªa a sus comentarios criticando sin fisuras al partido de extrema derecha AfD, al que acus¨® abiertamente de ser negacionistas del coronavirus y ¡°relativizar¡± el Holocausto. ¡°Somos una democracia y no van a romperla¡±. Para Hansi Flick es un aut¨¦ntico motor di¨¦sel de amplio caballaje, pero para la Mannschaft es algo m¨¢s. Un futbolista que conecta el vestuario con la calle. Aunque juega en el todopoderoso Bayern, Goretzka vive en uno de los barrios obreros de M¨²nich.
El antisemitismo, un problema siempre larvado en la sociedad occidental y que aliment¨® una de las etapas -si no la que m¨¢s- funesta de la historia de Alemania, preocupa especialmente al internacional teut¨®n. Confes¨® en una entrevista que no hab¨ªa podido evitar llorar al visitar un campo de concentraci¨®n nazi y dej¨® para la posteridad un recuerdo que dice haberle impactado sobremanera. En noviembre de 2020 pudo entrevistarse con Margot Friedl?nder, a sus 99 a?os una superviviente de un campo de exterminio nazi durante la Segunda Guerra Mundial. ¡°La se?ora Friedl?nder me dijo ¡®Todos estamos obligados a asegurarnos de que algo as¨ª no vuelva a suceder¡¯ y yo le promet¨ª que lo har¨ªa de inmediato¡±, relat¨® despu¨¦s el futbolista teut¨®n. ¡°Vivamos juntos una Alemania abierta y cumplamos la promesa de nuestra Constituci¨®n con nuestras palabras y tambi¨¦n con nuestros actos¡±.
La humildad y sobre todo el agradecimiento a qui¨¦nes le permiten ser hoy en d¨ªa un privilegiado son rasgos inherentes a la personalidad de Goretzka. Cuando, a¨²n en el Schalke pero ya fichado por el Bayern, recibi¨® el premio al mejor gol de octubre de 2018 en la Bundesliga, Leon mir¨® hacia atr¨¢s. ¡°Alg¨²n d¨ªa tengo que devolverle algo al Bochum...¡±, se medio lament¨®. El modesto Bochum hab¨ªa su pasarela hacia la ¨¦lite. Pero el Bochum no quiso aceptar el cumplido. Al rev¨¦s, mand¨® una emotiva carta al futbolista d¨¢ndole las gracias por haber salvado al club gracias al dinero que se recaud¨® por su venta al Schalke, un movimiento que hab¨ªa puesto a la afici¨®n en su contra. ¡°Lo que muchos no sab¨ªan entonces es que el Bochum estaba en una de sus peores crisis financieras. En ese momento t¨² solo rescataste al Bochum. Y eso es algo que nunca olvidaremos. Por lo que si alguien debe devolver algo alg¨²n d¨ªa, no es Leon Goretzka, sino el Bochum¡±. El club de la zona del R¨¹hr dio m¨¢s detalles. ¡°Cuando t¨² y tus padres tuvisteis que decidir si firmabas un contrato profesional en Segunda a tus 18 a?os, t¨² podr¨ªas haber dicho que no y marcharte gratis a un gran club. No lo hiciste. En cambio, firmaste un contrato de varios a?os con Bochum porque quer¨ªas devolverle algo al club de tu ciudad. No hay tantas personas en el f¨²tbol profesional que renuncian deliberadamente a dinero para agradecer al club de su juventud por la formaci¨®n recibida¡±.
Una formaci¨®n que no se limita a lo que ocurre sobre el rect¨¢ngulo de juego. Sus inquietudes abarcan tambi¨¦n, por ejemplo, la psicolog¨ªa. Hace un tiempo comparti¨® con sus followers una de sus lecturas, el ensayo de Daniel Kahneman Pensar r¨¢pido, pensar despacio.
No s¨®lo es conocido Leon Goretzka por ejercitar su intelecto, tambi¨¦n ha llamado poderosamente la atenci¨®n el mimo que pone en su f¨ªsico, uno de los m¨¢s privilegiados del f¨²tbol de ¨¦lite con un porcentaje de grasa corporal entre los m¨¢s bajos de la Bundesliga. Se cuenta que varios exfutbolistas del Bayern pidieron su contacto para preguntarle por sus secretos de fitness. Un proceso de automodelaje que aument¨® durante el confinamiento por la pandemia, momento en el que por cierto encabez¨® la recaudaci¨®n de fondos del Bayern para asistir a los habitantes de M¨²nich menos favorecidos.
No se calla en Alemania y tampoco lo hace cuando se trata de un Mundial en Qatar. Como el australiano Jackson Irvine, Goretzka ha sido de los pocos futbolistas presentes en la gran contienda mundialista que ha querido significarse a los cuatro vientos. Cuando el exinternacional catar¨ª Khalid Salman, embajador del Mundial, provoc¨® un esc¨¢ndalo con sus comentarios hom¨®fobos (¡±La homosexualidad es un da?o en el cerebro¡±) en una entrevista en ZDF, el internacional alem¨¢n no se mordi¨® la lengua: ¡°Ese hombre vive en otro milenio. Te deja sin palabras que un tipo as¨ª pueda hablar en nombre de Qatar a las puertas de un Mundial¡±.
Ya se moj¨® en el pasado, cuando Philip Lahm dijo sin ruborizarse que recomendaba a los futbolistas gays que no salieran del armario. ¡°Mi esperanza es que los jugadores tambi¨¦n puedan declararse homosexuales durante mi carrera activa¡±, fue la respuesta, esta vez, de Goretzka. ¡°Estoy seguro de que los aficionados al f¨²tbol abordar¨ªan el tema con mucha m¨¢s naturalidad de lo que a veces pensamos¡±. El canciller in pectore de esta Alemania de Hansi Flick lidera, dentro y fuera.