Courtois, el ¨²ltimo h¨¦roe
La Champions encumbra al belga, que dej¨® dudas en sus inicios de blanco y que cierra el curso como el mejor portero del mundo. Hizo una final de r¨¦cord.
Dec¨ªa Thibaut Courtois en la previa que ahora estaba ¡°en el lado bueno de la historia¡± tras sufrir el sinsabor de perder en Lisboa 2014. El lado del Real Madrid, en las finales de Champions es (casi) siempre el ganador pero lo es en gran parte por futbolistas como el belga. Hechos para grandes noches sobre todo cuando forman parte de un engranaje de iguales. Tibu se ha ensanchado esta temporada y el Liverpool se encontr¨® un dique capaz de contener el Mersey entero.
Hay mucho de materia prima en el belga, pero tambi¨¦n mucho de entrenamiento. Su famosa parada con el pie a Grealish en la vuelta de las semifinales contra el City la hab¨ªa entrenado una y otra vez en Valdebebas usando pesas 'kettleball'. Ese despeje ante los 'citizens' fue el aperitivo para el tiroteo al que fue sometido por las huestes de Klopp. En la primera parte le hizo la vida imposible a Man¨¦ en el minuto 20 con una intervenci¨®n en la que, como los grandes, se ali¨® con el poste. Luego en la segunda martiriz¨® a Salah. Primero en el 63¡¯, otra a bocajarro del egipcio (69¡¯) y otra desde el ¨¢rea peque?a de nuevo a Salah (82¡¯) que sac¨® con el antebrazo. Un ramillete de paradas de todas formas, gustos y colores...
A Courtois lo han venido calentando con el ninguneo en diferentes galardones individuales. En el Bal¨®n de Oro el premio Yashin fue a Donnarumma y especialmente esa clasificaci¨®n de la revista 'FourFourTwo' en la que no entr¨® ni entre los diez mejores porteros del mundo. Incluso el Zamora, que fue para el sevillista Bono. Pero el destino le ten¨ªa reservado cotas mayores. Ser decisivo en dos finales, la de la Supercopa de Espa?a en Arabia y la Decimocuarta. Los padres de Thibaut, Thierry y Gitte pasearon inadvertidos por los exteriores de Saint-Denis aunque iban en un peque?o grupo con una bandera de B¨¦lgica y dos camisetas del portero. De haberles reconocido, m¨¢s de un madridista preclaro les habr¨ªa dado, seguro, las gracias.
La final de Courtois le vali¨® el MVP (Jugador M¨¢s Valioso, por sus siglas en ingl¨¦s) del partido y, de paso, le lanz¨® directo a los libros de historia de la Champions: realiz¨® nada menos que nueve paradas, m¨¢s que ning¨²n otro portero en una final de Champions desde que Opta (empresa especializada en datos futbol¨ªsticos y estad¨ªstica) recoge cifras, es decir, desde la temporada 2003-04. Tambi¨¦n ha acabado la Champions como el portero que m¨¢s paradas ha hecho en total en una edici¨®n completa, con 59; ha promediado 4,54 en sus 13 duelos europeos del curso.
Empez¨® la temporada dentro del ramillete de mejores guardametas del mundo, acompa?ado por nombres como Neuer, Oblak, Donnarumma o Ter Stegen. A todos ellos el curso 2021-22 les ha puesto en sus sitios, en mayor o menor medida; en el caso de Courtois, la tendencia ha sido evidente: al alza. Es poco discutible que en estos momentos es el portero en mejor forma del mundo. Es favorit¨ªsimo para el premio Yashin e incluso se habla de ¨¦l como candidato claro a estar en el podio del Bal¨®n de Oro, un galard¨®n que, a buen seguro, acabar¨¢ en manos de su compa?ero Karim Benzema.
La Champions de Courtois
Todo esto hoy parece un sue?o; en su momento, sonaba a pesadilla. Su primera temporada en el Madrid fue irregular, perjudicado por esa idea inicial de Lopetegui de rotar porteros entre Liga y Champions (para ¨¦l era el primer torneo, para Keylor el segundo) y tambi¨¦n por el baj¨®n general del equipo. En la 2019-20 arranc¨® con muchas dudas y el Bernab¨¦u lleg¨® a pitarle durante un duelo de Champions ante el Brujas, en el que los blancos se fueron 0-2 al descanso. Encauz¨® su camino para ser parte importante en el t¨ªtulo de Liga y en la 2020-21, pese al curso en blanco, fue elevando paulatinamente su nivel para ganarse del todo a la afici¨®n. Ya el curso pasado, no hab¨ªa ning¨²n aficionado que no pensase que los 35 millones pagados al Chelsea en 2018 fueron una buena inversi¨®n; a d¨ªa de hoy, doblete Liga-Champions mediante, suena a ganga, casi como un regalo.
Su Liga ha sido estupenda, con apenas 29 goles encajados en 36 partidos (0,8 por partido), en los que hizo 93 paradas en total (2,6 por partido). Bono, del Sevilla, le levant¨® el trofeo Zamora por apenas cuatro cent¨¦simas. Pero ha sido en la Champions, en especial en las eliminatorias, donde ha desplegado todo su repertorio: en octavos, le detuvo un penalti a Messi y sec¨® a Mbapp¨¦ varias veces; en cuartos, impidi¨® un golazo de Azpilicueta en Stamford Bridge y sostuvo tambi¨¦n al Madrid en la pr¨®rroga ante el Chelsea; en semifinales, su parada con el pie a Grealish en los minutos finales de la vuelta, en lo que hubiese supuesto el 0-2 para el City, el punto y final, dio esperanzas de remontada; y en la final, el no va m¨¢s, amargando la noche a Man¨¦ y a Salah, que una vez m¨¢s vieron c¨®mo el Madrid les birlaba una Champions. De esta, pueden culpar al mejor portero del mundo.