De despedidas y emociones

Oier nunca hs sido un tipo de buscar protagonismo, pero sab¨ªa que hoy, le gustase o no, le tocaba. El capit¨¢n de Osasuna, despu¨¦s de 15 temporadas en el equipo se su vida, lucir¨ªa por ¨²ltima vez la camiseta rojilla. Ya cuando sali¨® a calentar antes del comienzo del partido ante el Mallorca, la ovaci¨®n fue atronadora. Lo mismo sucedi¨® cuando el speaker de El Sadar cantaba las alineaciones: ¡®Con el n¨²mero 6 gure kapitaina, Oier¡¯, y el feudo rojillo se ven¨ªa abajo. Durante el partido hizo su trabajo, con el mismo compromiso de siempre. Justo antes de comenzar la segunda mitad se pudo observar al navarro con la mirada fija, como queriendo empaparse de todo lo que no volver¨¢ a vivir.

Sigui¨® el encuentro y en el minuto 71 se anunciaba un cambio. Oier dejaba el campo con El Sadar coreando su nombre y se fund¨ªa en un abrazo con su amigo y compa?ero Roberto Torres, quien le dio el relevo. Nada m¨¢s finalizar el encuentro, con el feudo navarro de nuevo coreando su nombre, sus compa?eros se fund¨ªan en un abrazo con ¨¦l, para despu¨¦s mantearlo. Como colof¨®n, el jugador dio la vuelta de honor al estadio, entre los aplausos del p¨²blico. Queda darle las gracias, por su compromiso dentro y fuera del campo y desearle mucha suerte para el futuro.

No ha sido la de Oier la ¨²nica despedida. Ramalho sal¨ªa de inicio y en el minuto 74 era sustituido por otro de los que ha jugado su ¨²ltimo partido con la camiseta del equipo de su tierra, I?igo P¨¦rez. Ramalho ha pasado bastante desapercibido durante el a?o y medio que ha pertenecido a Osasuna.

I?igo P¨¦rez es un jugador de los de quitarse el sombrero, luchador incansable, le hayan salido mejor o peor las cosas, y un ejemplo dentro del vestuario. La grada tambi¨¦n core¨® su nombre al finalizar el partido. Sin duda, un lujo que haya estado en Osasuna durante cuatro temporadas.