Nubarrones para Eric
El fichaje del dan¨¦s Andreas Christensen y la petici¨®n de Jules Kound¨¦ demuestran cierta desconfianza en la proyecci¨®n de un central que lleg¨® para ser referente en el Barcelona.
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Nubarrones en el horizonte de Eric Garcia. Fichado el verano pasado procedente del Manchester City para liderar un nuevo ciclo de la defensa azulgrana, ciertos movimientos del Bar?a permiten adivinar que, a d¨ªa de hoy, el cuerpo t¨¦cnico azulgrana no lo considera un indiscutible. No lo ha sido cuando Piqu¨¦ y Ara¨²jo estaban sanos; y no lo ser¨¢ por lo que se avecina en el mercado de fichajes. A falta de firma, Andreas Christensen ser¨¢ jugador del Bar?a las pr¨®ximas cuatro o cinco temporadas. No s¨®lo eso. Xavi ha pedido encarecidamente el fichaje de Kound¨¦, que ya intent¨® el club azulgrana la temporada pasada sin ¨¦xito. Este a?os, las posibilidades de que fructifique son, igualmente, pocas. Detr¨¢s, en la lista de preferencias, est¨¢ Koulibaly. Venga uno u otro, incluso si no acaba llegando nadie, est¨¢ claro que Xavi ve carencias en defensa. Y eso afecta directamente a Eric.
M¨¢s all¨¢ de partidos puntuales como el del Bernab¨¦u, donde estuvo soberbio (con el asterisco de que aquel d¨ªa Benzema no jugaba y las dificultades fueron menores porque Ancelotti se invent¨® a Modric de falso ), el central ha salido en demasiadas fotos de goles rivales. Eric empez¨® la temporada con una roja en San Mam¨¦s (despu¨¦s de un buen debut, eso s¨ª, ante la Real) y ha terminado regalando un penalti decisivo el d¨ªa del Eintracht. Por el camino, estuvo blando en la derrota ante el C¨¢diz y ha tenido alg¨²n que otro error de consideraci¨®n. Se le echa en falta contundencia en el choque y concentraci¨®n para evitar regalos.
A pesar de sus 21 a?os, Eric es un jugador con la cabeza bien amueblada y con capacidad de autocr¨ªtica. Entiende el modelo de juego del Bar?a y sabe que no es f¨¢cil asentarse en ese tipo de defensa salvo que se sea un privilegiado como Piqu¨¦ cuando aterriz¨® en 2008. Sabr¨¢ darse tiempo pero, como cualquier futbolista, tambi¨¦n necesita confianza.
Ha aprendido, seguramente, del mejor, como es Guardiola en el City; y tiene el respaldo, important¨ªsimo, de Luis Enrique en la Selecci¨®n. Con Xavi le est¨¢ costando m¨¢s. Esa petici¨®n de Kound¨¦ le puede hacer sospechar que la fe no es ciega en ¨¦l. Pero el t¨¦cnico tambi¨¦n est¨¢ en su derecho de pedir refuerzos para la parte de atr¨¢s porque Umtiti y Lenglet han sido un lastre en los ¨²ltimos tiempos y nadie sabe cu¨¢nto aguantar¨¢ el f¨ªsico de Piqu¨¦. Xavi ha pedido velocidad y ese no es el fuerte de Christensen. Eric s¨ª es un jugador que arriesga adelantando la l¨ªnea. Tal vez eso le haya jugado una mala pasada este curso. Lo que s¨ª queda claro es que la temporada que viene va a ser un reto sensacional para el medallista ol¨ªmpico.