El agente de Lukaku afirma que hay un problema
Pastorello no descarta la salida del delantero belga este verano, incluso podr¨ªa retornar a Italia. En el Chelsea no encaja con Tuchel.
A la tercera tampoco ha ido la vencida para Lukaku. El delantero belga lleg¨® el pasado verano al Chelsea despu¨¦s de arrasar en Italia con la camiseta del Inter. Un fichaje de 113 millones de euros que ten¨ªa que servir para poner la guinda al proyecto de Tuchel, pero ha sido todo lo contrario. La tercera oportunidad del fornido ariete en el club de Stamford Bridge no ha estado a la altura de las expectativas. No ha terminado de encajar en la idea de Tuchel y el t¨¦cnico alem¨¢n ha prescindido de ¨¦l en momentos capitales de la temporada.
Llama la atenci¨®n su participaci¨®n secundaria en la Champions, por ejemplo. Tuchel levant¨® la Liga de Campeones y se gan¨® el derecho a exigir algo m¨¢s al club para poner en duda el gobierno del City y el Liverpool en la Premier. Un delantero goleador. Se realiz¨® un intento por Haaland, pero en ese momento no fue posible y la alternativa fue un Lukaku dominador en la Serie A. Pero eso no se ha trasladado a la Premier y ahora se abren todo tipo de opciones. No lo esconde su agente, Federico Pastorello.
"Dados los par¨¢metros que se dieron en la transferencia, nadie pod¨ªa esperar esta situaci¨®n", afirma Pastorello al diario La Repubblica. "No hablar¨¦ de elecciones t¨¦cnicas, pero est¨¢ claro que hay un problema. Sin embargo, las cifras deben ponerse en contexto. Es el mejor anotador del equipo a pesar de tener menos tiempo de juego que sus compa?eros. Ahora lo principal es asegurar un puesto en la Liga de Campeones y jugar la final de la FA Cup. Eso es lo ¨²nico en lo que est¨¢ enfocado Romelu, no hemos hablado de otra cosa", esgrime el agente.
Desde Italia no paran de llegar rumores de un regreso al Inter o incluso del fichaje estrella del Milan de la nueva propiedad. Hay mucho ruido para nada. El Inter y su afici¨®n est¨¢n en su coraz¨®n. "?l nunca ha ocultado eso y nunca ocult¨® el amor por el Anderlecht, donde le gustar¨ªa terminar su carrera. Sin embargo, no podemos especular sobre negociaciones. La propiedad del Chelsea ha cambiado, no conocemos a los nuevos interlocutores todav¨ªa, y mucho menos podemos imaginar conversaciones con el Inter o el Milan. Tenemos que esperar", resume Pastorello.
Los dos equipos lombardos sue?an con Lukaku, una operaci¨®n financieramente muy complicada. Un traspaso y asumir su salario actual se escapan de las posibilidades transalpinas en este momento, a no ser que se buscara una soluci¨®n imaginativa. Desde hace semanas Lukaku manda se?ales inequ¨ªvocas de que su tercera etapa en el Chelsea tampoco le ha satisfecho. Aguarda ahora una reuni¨®n con la nueva propiedad para darle forma a su futuro. De momento, el belga ha marcado tres goles en los ¨²ltimos dos partidos, despu¨¦s de que Tuchel no le hiciera jugar en la derrota contra el Everton.
Lukaku apaga el fuego
Si bien es una evidencia que algo no casa en Londres, el delantero belga ha querido responder a las informaciones de las ¨²ltimas horas. En este caso, ha actuado de bombero, desmarc¨¢ndose de cualquier tipo de pol¨¦mica: "Nunca permitir¨¦ a alguien hablar por m¨ª... He mantenido mi boca callada y he estado concentrado en ayudar al equipo y acaba la temporada de la mejor manera posible. Si alguien de fuera intenta decir algo sobre m¨ª y el club no ser¨¢ en mi nombre".
Aparentemente, estas palabras responden a Pastorello, aunque tambi¨¦n podr¨ªan referirse a su entrenador Tuchel, que habl¨® este viernes del futuro profesional de su jugador: "Si planea hablar con el due?o, quiz¨¢s no sea su plan hablar conmigo. Si consigue una reuni¨®n, tal vez pueda hablar. Es su derecho y hablaremos con cualquiera y evaluaremos la situaci¨®n de cualquier jugador, incluido Romelu Lukaku". Hace algunos meses una entrevista de Lukaku en Italia ya origin¨® un incendio entre el jugador y su entrenador. Las aguas poco a poco fueron calm¨¢ndose, pero ahora, con el puesto en Champions todav¨ªa por atar, Lukaku ha tenido que intervenir para apagar la pol¨¦mica.