Campeones express
El Real Madrid ha ganado tres campeonatos de Liga con cinco partidos de adelanto y otros tantos con cuatro, algo que puede repetir esta tarde si suma un punto.

El Real Madrid, primer l¨ªder hist¨®rico de la primera jornada del Campeonato Nacional de Liga (1928-29) se prepara para sumar su trig¨¦simo quinto t¨ªtulo. Le basta con sumar un punto ante el Espanyol y por delante le quedar¨¢n otros cuatro partidos (Atl¨¦tico, Levante, C¨¢diz y Betis). No ser¨ªa la primera vez que el club blanco se proclamar¨ªa campe¨®n con cuatro jornadas de antelaci¨®n, ya lo hizo con anterioridad en tres ocasiones (1985-86, 87-88 y 89-90).
Su mejor registro, no obstante, se cifra en alzar el trofeo con cinco compromisos por disputarse, como sucedi¨® en las temporadas 1960-61, 62-63 (16 clubes y 30 jornadas) y 74-75. Solo el Barcelona (1973-74) ha sido capaz de vivir la misma experiencia. En estos dos ¨²ltimos cursos el campeonato ya ten¨ªa 18 equipos y 34 jornadas. Con la puntuaci¨®n de tres puntos, puesta en vigor en la temporada 95-96, la dificultad de ganar la Liga con tantas jornadas de antelaci¨®n ha aumentado y solo el Barcelona en la 97-98 logr¨® proclamarse campe¨®n en la jornada 34. En las 91 ediciones del campeonato, ning¨²n club ha conquistado el t¨ªtulo con seis jornadas por delante.
De sus 34 alirones, el Real Madrid ha celebrado 21 en casa: 19 en el Bernab¨¦u, uno en el viejo Chamart¨ªn (1932-33) y otro en el Alfredo di St¨¦fano (2019-20). Y 13 fuera: dos en el antiguo Metropolitano, dos en el S¨¢nchez-Pizju¨¢n y uno en Les Corts (Barcelona), Torrero (Zaragoza), Atotxa (San Sebasti¨¢n), viejo Los C¨¢rmenes (Granada), La Romareda (Zaragoza), Nuevo Zorrilla (Valladolid), El Sadar (Pamplona), viejo San Mam¨¦s (Bilbao) y La Rosaleda (M¨¢laga).
Cinco consecutivas y dos con cinco partidos de antelaci¨®n
El Real Madrid fue el primer equipo en ganar el campeonato con cinco jornadas de adelanto. Fue en la temporada 60-61, jornada 25 en el Bernab¨¦u ante el Mallorca (3-0). Hasta ese momento, lo m¨¢s que hab¨ªan conseguido los campeones anteriores era ganar el t¨ªtulo a falta de dos partidos. Aquella fue la s¨¦ptima Liga blanca. La primera la hab¨ªa conquistado en la ¨²ltima jornada y las cinco restantes en las pen¨²ltimas.
Con Miguel Mu?oz como debutante en el banquillo, el equipo encaden¨® varios r¨¦cords: 26 partidos sin perder; m¨¢xima puntuaci¨®n (52 en 30 partidos, campe¨®n con m¨¢s puntos de ventaja sobre el segundo, 12 al Atl¨¦tico de Madrid); menos derrotas (dos) y menos goles recibidos (25). Puskas fue el m¨¢ximo goleador del campeonato (27) y Di St¨¦fano, el segundo (21).
Dos cursos despu¨¦s, 62-63, los hombres de Mu?oz igualaron su propia marca y volvieron a ganar a falta de cinco encuentros. Era la tercera Liga consecutiva, situaci¨®n que no se hab¨ªa dado hasta entonces. Se repiti¨® la jornada, la 25, y el escenario, el Santiago Bernab¨¦u. El rival fue el Atl¨¦tico (4-3), su m¨¢ximo competidor ese a?o, aunque los rojiblancos, al final, quedaron a 12 puntos.
El Real Madrid empalm¨® cinco t¨ªtulos consecutivos 61-66 y solo cinco jugadores sobrevivieron en la plantilla esa media d¨¦cada: Santamar¨ªa, Pach¨ªn, Puskas, Gento¡ y Manol¨ªn Bueno. El extremo sevillano, eterno suplente de Gento. A pesar de las ofertas que recib¨ªa a?o tras a?o para salir del club, se mantuvo siempre fiel al Bernab¨¦u. Desde su C¨¢diz del alma, con los 82 a?os cumplidos, estira su memoria para medio recordar c¨®mo era aquel Madrid capaz de ganar la Liga con cinco jornadas de antelaci¨®n.
"En aquellos tiempos no se hablaba tanto del asunto como se est¨¢ hablando ahora, pero entre los jugadores s¨ª valor¨¢bamos que se pudiera ganar la Liga con tanto adelanto casi dos a?os seguidos y, sobre todo, habl¨¢bamos del hecho de ganar cinco seguidas, algo que nadie hab¨ªa conseguido en Espa?a hasta entonces. Hay que tener presente que el Real Madrid tambi¨¦n luchaba todos los a?os en la Copa de Europa y competir para ganar en las dos competiciones no era tan f¨¢cil. Todos quer¨ªan ganarnos".
Han pasado sesenta a?os desde entonces, pero Manuel mantiene vivos aquellos primeros recuerdos como jugador madridista. "El a?o que llegu¨¦ ganamos la quinta Copa de Europa y los cinco siguientes, la Liga. No me olvido de la Intercontinental, la primera (1960). Jugu¨¦ en la ida, pero no en la vuelta y el club no me dio la insignia de oro y brillantes, como a los dem¨¢s compa?eros. Tampoco me dieron 12 a?os despu¨¦s el homenaje que me hab¨ªa ganado por estar m¨¢s de 10. Son dos espinitas que tengo clavadas. Me dio mucho coraje que me echaran al mismo tiempo que a Gento, pensaba que iba a continuar en el club, pero a pesar de ello sigo siendo muy madridista. ?ramos un equipo de fen¨®menos, incontenibles para el rival. F¨ªjese si ser¨ªamos buenos que me pon¨ªan de extremo derecho para que jugara alg¨²n d¨ªa. Era un equipo incomparable".

1974-75: una temporada se?alada en la historia del club
Tampoco fue mala para el Real Madrid la d¨¦cada de los 70. Conquist¨® otros seis t¨ªtulos de Liga y qued¨® se?alada especialmente la temporada 74-75, en la que los blancos se volvieron a proclamar campeones a falta de cinco jornadas y, adem¨¢s, en la entidad se produjo una transformaci¨®n importante. La marcha de Miguel Mu?oz la temporada anterior y la preferencia de Luis Molowny de mantenerse en los despachos en lugar de en el banquillo propici¨® la llegada de Miljan Miljanic, un t¨¦cnico yugoslavo de reconocido prestigio por su trabajo en el Estrella Roja y en la selecci¨®n de su pa¨ªs, a la que dirigi¨® en el Mundial 74.
El equipo cant¨® el alir¨®n en Atotxa en la jornada 29 tras empatar (1-1). Vicente del Bosque cumpl¨ªa su segunda temporada en el primer equipo tras su doble cesi¨®n al Castell¨®n y al C¨®rdoba. En la del estreno hab¨ªa ganado la Copa, goleada al Bar?a en el Calder¨®n (4-0), revancha del 0-5 de la Liga. No hace falta recordar muchos datos a una enciclopedia andante como Vicente para que entre en materia.
"S¨ª, ganamos la Liga en San Sebasti¨¢n en el ¨²ltimo minuto y de penalti¡ como se dec¨ªa antes. Pirri marc¨® casi al final. De ese partido tengo la imagen de una gran parada de Artola. ?No jugaron Breitner ni Netzer, lesionados? De ese dato no me acordaba. Nos proclamamos campeones, pero no era habitual hacerlo con tantas jornadas de antelaci¨®n. Tres d¨ªas despu¨¦s, el Zaragoza, que hab¨ªa sido nuestro rival m¨¢s directo, nos meti¨® seis (6-1) en La Romareda y ¨¦ramos pr¨¢cticamente los mismos jugadores. Esa temporada tambi¨¦n ganamos la Copa al Atl¨¦tico".
Para Del Bosque, lo realmente trascendental de aquel curso futbol¨ªstico, tanto o m¨¢s que el doblete, fue la llegada de Miljan Miljanic como entrenador. Gran parte de culpa de que el salmantino dirigiera sus pasos hacia la docencia futbol¨ªstica se debe a lo impresionado que le dej¨® el yugoslavo. "No s¨¦ si tambi¨¦n en el f¨²tbol espa?ol, pero desde luego en el Real Madrid, a nivel de trabajo f¨ªsico, t¨¦cnico y t¨¢ctico, existe un antes y un despu¨¦s de su llegada. Lleg¨® acompa?ado de un preparador f¨ªsico, algo que en nuestra Liga todav¨ªa no se daba, y form¨® un equipo de trabajo muy equilibrado. Juan Santisteban, con los porteros; Antonio Ruiz, con los defensas¡".
Vicente se?ala especialmente la figura del preparador f¨ªsico, F¨¦lix Radisic: "Nos hac¨ªa trabajar en tres sesiones de entrenamiento. Era un aprendizaje muy por repeticiones tanto en la t¨¢ctica como en lo f¨ªsico. Comenzamos a conocer el gimnasio¡ La pretemporada fue dur¨ªsima. Recuerdo que Miljanic nos recomend¨® que quien no tuviera una casa cerca de la Ciudad Deportiva, se la comprara, porque nos ¨ªbamos a pasar el d¨ªa all¨ª dentro. Entren¨¢bamos ma?ana y tarde".
Comienza a citar compa?eros y casi completa la plantilla. "Ese a?o lleg¨® Breitner, despu¨¦s del Mundial. Con nosotros jugaba de interior derecho, no de defensa izquierdo como en la selecci¨®n. Estaban ya Netzer y Vel¨¢zquez, que compet¨ªan por un puesto. Pirri jugaba atr¨¢s. Yo, ah¨ª, en el medio, donde me dejaban. No era siempre titular. Jug¨¢bamos muy a la inglesa, con muchos centros laterales desde las bandas, bien de los extremos o de los dos laterales. Santillana y Roberto Mart¨ªnez eran los dos delanteros centros. Muchas veces pens¨¢bamos que se iban a chocar en el aire. Iban a todas. Marcaron muchos goles entre los dos (17, Santillana y 16, Roberto)¡ Qui¨¦n mejor le puede hablar de ello es Carlos. Nunca se olvidar¨¢ de Miljanic. Yo tampoco, fue una gran experiencia en mi carrera".
Dicho y hecho. Carlos Santillana responde al otro lado de la l¨ªnea telef¨®nica y tampoco necesita muchos pre¨¢mbulos para entrar en faena. "?Si me acuerdo? Como para olvidarme. Yo nunca hab¨ªa entrenado de esa forma, ni en el Racing, ni en los cuatro a?os, con ese, que ya llevaba en el Madrid. ?Qu¨¦ intensidad! Descubr¨ª los abdominales, no sab¨ªa lo que eran hasta entonces. De hecho, no sab¨ªa hacerlos. Y las series de velocidad, de resistencia. Era todo muy espartano. Nunca hab¨ªamos hecho nada de eso con Mu?oz. Eran entrenamientos revolucionarios. No me extra?a que gan¨¢ramos la Liga con cinco partidos por delante e hici¨¦ramos doblete. Est¨¢bamos fort¨ªsimos. Otros clubes ven¨ªan a la Ciudad Deportiva a ver como entren¨¢bamos".
"Gan¨¢bamos tanto porque siempre sal¨ªamos a ganar, no especul¨¢bamos"
Desde su puesto de delantero centro, Charly, como le llamaban sus compa?eros entonces, descubri¨® otra faceta del puesto. "Nos pon¨ªa juntos a Roberto Mart¨ªnez y a m¨ª. Todos los d¨ªas, pero todos, entren¨¢bamos los mismos movimientos. Hasta sin bal¨®n. Lo ten¨ªamos todo trabajado. En cada jugada, quien estuviera m¨¢s cerca del ¨¢rea iba al segundo palo; quien estuviera m¨¢s alejado, se cruzaba el primero. Era agotador. Repeticiones y repeticiones. Miljanic no nos dejaba rematar con el pie. Siempre con la cabeza. Yo a veces no pod¨ªa m¨¢s y remataba de volea y me echaba unas broncas tremendas. 'Pisco, mater, pisco mater', me gritaba. Ese primer a?o fue un lujo ganar la Liga con cinco partidos por delante. Marqu¨¦ 17 goles, pero el m¨¢ximo goleador fue Carlos, el delantero centro del Athletic, con 19".
La quinta del Buitre, tambi¨¦n con cuatro de propina
La d¨¦cada de los 80 volvi¨® a mostrar un Real Madrid prol¨ªfico en t¨ªtulos de Liga: cinco consecutivas en la segunda mitad de la d¨¦cada (1986-90) y hasta en tres ocasiones consigui¨® el campeonato en una situaci¨®n id¨¦ntica a la que puede suceder ahora: ganar con cuatro jornadas de adelanto. A?os pares: 86, 88 y 90. La Quinta del Buitre (Sanch¨ªs, Mart¨ªn V¨¢zquez, M¨ªchel, Butrague?o y Pardeza -se marcha al Zaragoza-), en su m¨¢ximo esplendor¡ y la Quinta de los machos (Hugo S¨¢nchez, Maceda y Gordillo) como complemento perfecto. Monta tanto, tanto monta.
En el 86, el t¨ªtulo cae en la jornada 30, al ganar al Valladolid en el Bernab¨¦u con un gol de Valdano (2-1). En la segunda vuelta, el equipo, dirigido por Luis Molowny, suma 15 victorias, un empate y solo una derrota. En casa no cedi¨® ni un solo punto en todo el curso y devolvi¨® la moneda al Bar?a, que la temporada anterior le hab¨ªa sacado 11 puntos de ventaja.
Dos a?os despu¨¦s, 1988, segundo a?o de Leo Beenhakker en el banquillo, Liga de 20 clubes, el ¨¦xito lleg¨® en la jornada 34 con un rotundo 6-0 al Betis en el Bernab¨¦u. El Real Madrid fue l¨ªder de la primera jornada a la ¨²ltima y minimiz¨® a sus rivales. La Real Sociedad, segunda, qued¨® a 11 puntos; el Atl¨¦tico a 14¡ y el Bar?a, sexto, a 23.
En la 89-90, el equipo blanco redondea el ciclo de cinco Ligas consecutivas por segunda vez en su historia con otra temporada impresionante que tambi¨¦n le permiti¨® cantar el alir¨®n con cuatro jornadas por jugar. Toshack sustituy¨® a Beenhakker y sus hombres, acoplados a un nuevo sistema (1-3-5-2/1-5-3-2), superaron el r¨¦cord hist¨®rico de goles, 107, aunque curiosamente en Valladolid, en la jornada 34, en la que consiguieron el punto que necesitaban, no marcaron (0-0). Hugo alcanz¨® las 38 dianas de Zarra y su quinto trofeo de m¨¢ximo goleador liguero.
Rafa Mart¨ªn V¨¢zquez form¨® parte de ese Real Madrid que gan¨® la Liga tres veces con cuatro partidos por delante. Su mejor recuerdo data de la ¨²ltima temporada, de la quinta de la quinta, pero tiene bien claro cu¨¢l era el secreto de ese equipo para ganar con esa diferencia.
"Sal¨ªamos a ganar todos los partidos sin pensar en nada m¨¢s. No especul¨¢bamos. Marc¨¢bamos muchos goles porque siempre jug¨¢bamos al ataque, por las bandas. Ten¨ªamos a Emilio y Hugo en el ¨¢rea, eran diferentes y se complementaban. Tambi¨¦n con Santillana, una garant¨ªa para el juego a¨¦reo. No me olvido de Valdano. Gordillo, M¨ªchel, yo mismo¡ Sab¨ªamos donde ten¨ªamos que poner el bal¨®n. A veces nos bastaba con la mirada. Nos conoc¨ªamos de memoria y siempre quer¨ªamos ganar. La afici¨®n estaba con nosotros, pero siempre nos ped¨ªa un gol m¨¢s. Lo intent¨¢bamos, por eso en mi ¨²ltimo a?o llegamos a los 107".