Marcelino: "?Barkala? Nos hace pensar que no somos la primera opci¨®n"
El t¨¦cnico del Athletic se resigna a ver que el aspirante a la presidencia no cuenta con ¨¦l tras airear que ha hablado con otros entrenadores. El corto ciclo del asturiano parece agotarse,
Marcelino se ha centrado la previa del partido en el Atl¨¦tico en dar su punto de vista sobre las desafortunadas manifestaciones el pasado mi¨¦rcoles de Barkala, aspirante a la presidencia del Athletic, en las que constataba que ha hablado con otros entrenadores. Una falta de tacto absoluta, no ya por hacerlo, que puede ser comprensible, sino por soltarlo alegremente a los cuatro vientos mientras otro profesional se afana en ese banquillo por llevar al equipo a Europa. El discurso del preparador asturiano lleva a pensar que su etapa en San Mam¨¦s est¨¢ pr¨®xima a acabar.
"Ha dicho eso (Barkala) y lo respeto absolutamente. El hecho de que cuando se nos ofreci¨® la renovaci¨®n en varias ocasiones hayamos decidido no hacerlo es porque estas personas deben tener la absoluta libertad para formar sus equipos de trabajo y desarrollarlos con las que crean oportunas. Nos hace pensar que no somos la primera opci¨®n para ser los entrenadores y nos puede ayudar a tomar una decisi¨®n definitiva en el Athletic¡±, ha se?alado en tono de despedida. Arechabaleta, el otro precandidato por el momento aunque no lo ha anunciado oficialmente, tiene la palabra, pero con Barkala no parecer¨ªa de recibo que si el Athletic acaba meti¨¦ndose en la Europa League, echara marcha atr¨¢s.
¡°Llevo muchos a?os en el f¨²tbol, he sido muy honesto con el Athletic, las personas que formen parte del club tienen que desarrollar su proyecto con absoluta libertad, con un grupo af¨ªn a lo que pretenden. No me consta si hay un proyecto y si somos las personas adecuadas¡±, ha agregado con media sonrisa el preparador asturiano, quien remarca que han obrado ¡°de la forma m¨¢s correcta, mirando los intereses del Athletic, anteponi¨¦ndolos a los nuestros¡± porque ¡°si fu¨¦ramos ego¨ªstas, habr¨ªamos firmado un contrato, para agarrarnos a ¨¦l, si nos quer¨ªan, bien y si no, tambi¨¦n¡±. Es decir, podr¨ªa haber cogido un buen dinero con Elizegi y posiblemente irse sin cumplir lo firmado si es que saliera elegido Barkala. Porque dej¨® claro que el actual mandatario le ha ofrecido varias veces seguir, pero ha aplazado la firma por si surg¨ªa una contingencia como la que ahora les ocupa.
La par¨¢lisis va ser clara: elecciones casi con la pretemporada en curso, con un entrenador por decidir y un Marcelino que, a esta paso, saldr¨¢ por la puerta de atr¨¢s. "Lo m¨¢s correcto es pensar en el presente, en un partido superatractivo. Mi futuro es eso¡±, zanj¨®. ¡°La victoria nos permite seguir peleando por el puesto europeo".
"Acabo contrato en junio. Ni me condiciona ni me pone nervioso ni me desilusiona, que acabe en poco tiempo o en cinco a?os... lo importante es tener la conciencia tranquila del trabajo que realizamos cada d¨ªa y eso lo tenemos¡±. Adem¨¢s, tras la pol¨¦mica sobre con qui¨¦n iba en la final de Copa, matiz¨® que sus ganas estaban con el Betis. ¡°Mirando los intereses del Athletic, nos aumenta las posibilidades de entrar en Europa y ser¨ªa un mal profesionalidad en la actualidad si no defendiera los intereses del Athletic¡±.
Villalibre finalmente no ha entrado en la convocatoria para el Atl¨¦tico, porque no tiene la confianza absoluta en el golpeo del bal¨®n tras su cuarta lesi¨®n muscular, y Garc¨ªa Toral no descart¨® que Sancet haya concluido ya la temporada por sus molestias en el pubis. Sobre Capa, que acumula un a?o sin jugar y es el ¨²nico futbolista de campo que no se ha estrenado esta campa?a, desvel¨® que los otros tres laterales derechos entrenan mejor: ¡°Tenemos cuatro jugadores en esa posici¨®n. Tres se lesionan en el inicio de competici¨®n y juega uno que rinde. En un engranaje defensivo que funciona muy correctamente, porque somos de los equipos menos goleados, en la mayor¨ªa de los partidos juegan los mismos. Capa est¨¢ entrenando bien, pero hay otros que entrenan mejor y me ofrecen m¨¢s garant¨ªas, los entrenadores tenemos nuestras preferencias¡±.