Ancelotti se rehabilita
El t¨¦cnico italiano se merend¨® t¨¢cticamente a Tuchel y remienda sus errores del Cl¨¢sico. C¨®mo utiliz¨® a Valverde, la palmadita a Carvajal, Casemiro como anti-Lukaku...
El viejo zorro que hay en Carlo Ancelotti sali¨® a relucir en un lugar especial para ¨¦l, Stamford Bridge. El italiano qued¨® malherido por el mal planteamiento que decidi¨® para el Cl¨¢sico pero en Londres se rehabilit¨® con varios movimientos de pizarra que desarticularon al estratega Tuchel. La utilizaci¨®n multiusos de Valverde, el voto de confianza a Carvajal y un giro de tuerca para anular la amenaza final de Lukaku... Carletto recuper¨® al Madrid de sus d¨ªas m¨¢s s¨®lidos desde su planteamiento y desde sus decisiones.
Valverde, el apoyo interminable
Se barruntaba en los d¨ªas previos y el italiano lo confirm¨®. Era partido para Fede Valverde en una especie de 4-3-3 asim¨¦trico porque en realidad el uruguayo a veces se incrustr¨® atr¨¢s para formar l¨ªnea de cinco con la misi¨®n de arropar a Carvajal, en otras fortaleci¨® la medular en un 4-4-2 y finalmente incluso se estir¨® a veces como extremo. Apoyos continuados destinados a proteger a Carvajal, con Valverde siempre pendiente de Azpilicueta. Un respiro para el leganense y una mejor soluci¨®n que la que plante¨® la temporada pasada Zidane con Vinicius de carrilero. El propio Ancelotti lo explic¨®, a posteriori, ante los medios: "A Valverde lo he puesto para fijar un poco m¨¢s la posici¨®n del carrilero izquierda (Azpilicueta) y tener a Carvajal m¨¢s por dentro para controlar a Pulisic y Mount. Valverde lo ha hecho muy bien". La ayuda extra de Valverde, que en bastantes momentos despist¨® a Jorginho, permiti¨® a Modric jugar m¨¢s liberado y el efecto en cadena llev¨® a uno de los partidos m¨¢s c¨®modos de Kroos esta temporada. Kant¨¦ nunca lo detect¨®.
No perdi¨® la fe en Carvajal
Doble ¨¦xito, el de sacar rendimiento a Valverde y tambi¨¦n el de, con esa mano del uruguayo en defensa, permitir a Carvajal recuperar sensaciones defensivas y confianza. El lateral no se vio expuesto al sufrimiento continuado que le infligieron tanto Mbapp¨¦ en la eliminatoria contra el PSG como Ferran en el Cl¨¢sico. El internacional espa?ol estaba siendo identificado como el eslab¨®n d¨¦bil del engranaje madridista y Ancelotti le permiti¨® descansar en Vigo. Ese vigor recuperado y la ayuda inestimable del Halc¨®n Valverde trajeron al Carvajal m¨¢s serio en defensa. Todo pese al 1-2 de Havertz, m¨¢s achacable al gran movimiento del atacante blue para generarse el desmarque. Todo lo que sea encaminar al dos madridista a su mejor versi¨®n son buenas noticias para el Real Madrid.
Casemiro, refugio antia¨¦reo
Cuando Tuchel, casi a la desesperada, cambi¨® el estilo de su frente de ataque metiendo a Lukaku por Pulisic en el minuto 63, el partido pudo cambiar de signo. Nacho estaba reci¨¦n entrado al terreno de juego por el lesionado Militao y el resultado es que el Chelsea intent¨® dos acciones laterales por alto a la cabeza de su poderoso ariete belga. La segunda, en el 68', le encontr¨® tan solo que fue casi un milagro que mandase el esf¨¦rico fuera. Desde ah¨ª, el entrenador transalpino tom¨® nota. Ancelotti mand¨® r¨¢pidamente a Casemiro retrasar su posici¨®n, incrustrarse entre Nacho y Alaba y convertirse en el antiLukaku. En otras palabras: el t¨¦cnico blanco puso a su mejor cabeceador a sofocar el nuevo peligro detectado. Desde ese momento, Lukaku qued¨® pr¨¢cticamente neutralizado.
Tres decisiones que terminaron siendo claves dentro de un encuentro que restaura buena parte del cr¨¦dito perdido por Ancelotti. Una situaci¨®n que se pondr¨¢ a prueba en esta semana corta del Madrid, que tendr¨¢ en cinco d¨ªas la visita el s¨¢bado de este Getafe contest¨®n al Bernab¨¦u y la vuelta del Chelsea el martes. Carletto, avezado en remontadas (tambi¨¦n en sus propias carnes), calma por si acaso los caballos de la euforia. "Tranquilidad, esto no se ha acabado", avis¨® el italiano. Ni aunque Tuchel haya dicho que la eliminatoria no est¨¢ viva...