Los banquillos el¨¦ctricos de Josean Querejeta
Trece etapas con once t¨¦cnicos que han desfilado por el vestuario de Mendizorroza desde la temporada 2015-16 en la que el Glorioso regres¨® a Primera.


Solo 11 clubes que actualmente militan en Primera pueden presumir de haber encadenado seis campa?as seguidas en la m¨¢xima categor¨ªa del f¨²tbol espa?ol. Uno de ellos es el Alav¨¦s, pero a costa de muchos entrenadores porque, cuando Josean Querejeta, propietario de la franquicia, se cansa, saca la espada y corta cabezas. Es como una silla el¨¦ctrica. En algunos casos hay acuerdo, como con Mendilibar, pero en otros se acaba en actos de conciliaci¨®n e incluso juicios.
En la temporada 2015-16, Jos¨¦ Bordal¨¢s ascendi¨® al club a la Liga Santander. La misma noche de la celebraci¨®n ya se supo que no seguir¨ªa al frente del banquillo porque se buscaba a un entrenador con m¨¢s experiencia. Luego pasaron por el banco Mauricio Pellegrino (2016-17), Luis Zubeld¨ªa (2017), Gianni de Biasi (2017), Javi Cabello como interino en dos ocasiones (2017), el Pitu Abelardo (2017-19), Asier Garitano (2019-20), L¨®pez Mu?iz (2020) y, en la pasada, Pablo Mach¨ªn, la segunda etapa de Abelardo y Javi Calleja. Hay que sumar el inicio de la presente temporada de este ¨²ltimo y a Mendilibar.
Bien es conocido que Josean Querejeta es un hombre que procede del mundo del baloncesto y muchos de los gestos que ha venido realizando durante m¨¢s de treinta a?os en el deporte de la canasta los ha llevado al f¨²tbol. Pero los tiempos no son los mismos en uno y otro deporte. Hay una frase m¨ªtica del propietario actual del Alav¨¦s. "No puedes saber si un mel¨®n es bueno o es malo hasta que no lo abres".
El elegido ahora es Julio Vel¨¢zquez, un entrenador que tiene experiencia en Espa?a, Italia y Portugal y que ahora no tiene equipo. Ayer tuvieron lugar los primeros contactos y lo normal es que sea anunciado a lo largo del d¨ªa. Firmar¨ªa hasta final de temporada, pero, en caso de conseguirse la permanencia, lo normal es que pudiera continuar. Con alguna cl¨¢usula especial pero continuidad a fin de cuentas.