Despegue bajo el s¨ªndrome Burgos
Desde el 4-0 en El Plant¨ªo, el Legan¨¦s no ha hecho m¨¢s que mejorar influenciado por las consecuencias de aquel choque. Aquella goleada sigue a¨²n presente y excita la competitividad.
Hubo un tiempo en el que las derrotas eran derrotas. Varapalos que no ten¨ªan nada positivo m¨¢s all¨¢ del pitido final del ¨¢rbitro, ¨¦se que cerraba el partido para buscar el siguiente camino del un deseo por la redenci¨®n. Tiempos en los que el f¨²tbol era otra cosa. Ahora el f¨²tbol es mensaje. Y con muchas derrotas llega cargado de un llamativo optimismo. Le pas¨® a Xavi y su Bar?a tras caer en la Supercopa de Espa?a ante el Real Madrid. En su discurso, m¨¢s que perder, parec¨ªa haber sometido al eterno rival. Curioso. Desde aquel d¨ªa de 'dulce' derrota (ox¨ªmoron sumo), su equipo fue otro. Mucho mejor. Lanzado. El Legan¨¦s de Mehdi Nafti tambi¨¦n ha tenido su propio cl¨¢sico de redenci¨®n. Aunque en la goleada de Burgos (4-0, 3-0 ya en el 30¡¯), al contrario que la ca¨ªda cul¨¦ en Riad, no dej¨® ni un solo destello positivo m¨¢s que la certeza de que los pepineros hab¨ªan tocado fondo. M¨¢s bajo no se pod¨ªa caer.
Desde entonces, el equipo ha sufrido un vigorizante efecto rebote con gestos de fortaleza en todos los campos posibles. El fundamental, el de los resultados. Despu¨¦s del bochorno en El Plant¨ªo, el Legan¨¦s ha disparado su rendimiento y engarzado cinco partidos seguidos sin perder. En total, 11 puntos de 15 posibles. Dibujan la segunda mejor racha de la era Nafti (tambi¨¦n del curso) que le permite asomarse, aunque sea en la lejan¨ªa, a los puestos de playoff (seis puntos de distancia) con el descenso cada d¨ªa un poco m¨¢s lejos (ya son once los puntos que le ha metido de por medio.
Decirse ¡°cosas a la cara¡±
¡°Una explicaci¨®n en s¨ª misma no hay¡±, cuenta Nafti a prop¨®sito del porqu¨¦ en ese vuelco de un Legan¨¦s paup¨¦rrimo, seguramente de los peores en la ¨²ltima d¨¦cada, al actual, fornido, valiente, descarado y competidor. ¡°Es verdad que despu¨¦s de aquel partido hablamos. Nos dijimos cosas¡±, contin¨²a describiendo el t¨¦cnico. ?l, como otros protagonistas, admite que los d¨ªas siguientes fueron duros, pero tambi¨¦n de mucha charla ¨ªntima para sacudirse verdades a la cara y tomar verdadera dimensi¨®n de la necesidad por cambiar.
| Clasificaci¨®n | PTS | PG | PE | PP |
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| Pr¨®ximos partidos |
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Nafti (como la mayor¨ªa del club) no olvida esa fecha, brecha profunda a¨²n latente y sin cicatrizar. ¡°Parece que ese partido est¨¢ muy lejos¡ est¨¢ muy lejos¡ pero tambi¨¦n est¨¢ presente. Porque no queremos volver a vivir ese tipo de partidos¡±, a?ade. Es por eso que en la previa de los ¨²ltimos duelos, especialmente de las salidas, siempre ha avisado a sus chicos de que la relajaci¨®n, como aquel mediod¨ªa, puede ser letal para el Legan¨¦s.
¡°La clave -contin¨²a- es el trabajo. No conozco otra f¨®rmula. Cuando la cosa funciona tambi¨¦n. Hemos trabajado. El equipo sabe ¨²ltimamente sufrir m¨¢s de lo que se vio en 2021. Somos un equipo m¨¢s arropado, m¨¢s contundente en las dos ¨¢reas (¡) Esto sigue¡±, cierra su an¨¢lisis el preparador, que en su discurso sobre el trabajo esconde varias claves deportivas tambi¨¦n relevantes.
M¨¢s blindaje, menos fantas¨ªa
La primera es que, sin despreciar el gusto por el bal¨®n, el Legan¨¦s ha mutado hacia f¨®rmulas de juego m¨¢s conservadoras que pretenden, por encima de todo, defender su porter¨ªa. Aunque eso conlleve, en ocasiones, jugar feo. No importa. Sacar el resultado ya har¨¢ del duelo algo bonito. Adem¨¢s, Nafti ha acelerado su pol¨ªtica de meritocracia para ajustar alineaciones y dar galones s¨®lo a los que realmente rindan. Si alguien demuestra durante los entrenamientos o un partido que puede jugar, juega. Lo contrario implica banquillo o incluso grada.
Tambi¨¦n fue importante aquella derrota para acelerar un mercado invernal que, por entonces, estaba algo amilanado. En el club aceleraron el paso para tomar decisiones relevantes en las llegadas (cuatro de las cinco caras nuevas se produjeron tras Burgos), pero tambi¨¦n en las salidas, con la marcha de hombres con nombre como Rodrigo Tar¨ªn (fue titular en Burgos) o Sabin Merino.
Y todo por una derrota que fue algo m¨¢s que una derrota. Un ejercicio de redenci¨®n para reencontrarse con la competitividad que siempre se le ha supuesto al Legan¨¦s. Queda claro que las derrotas ahora no son solo derrotas.