Memoria con Marcelo
El Bernab¨¦u, lejos de reprocharle su baj¨®n futbol¨ªstico, le dedic¨® una conmovedora ovaci¨®n ante el Granada. Esta es su 16? temporada de blanco, tal vez la ¨²ltima. Se emocion¨®.
Marcelo en la salud, pero sobre todo en la enfermedad. En las malas. Esta temporada, cuando el viento le sopla en contra como un hurac¨¢n, eclipsado por un futbolista imparable llamado Mendy, pod¨ªa esperarse que su gente le reprochase un baj¨®n futbol¨ªstico. Una supuesta dejadez. Pero ante el Granada, noche del juicio, lo que el madridismo regal¨® fue una emocionante ovaci¨®n. A su capit¨¢n, al lateral que lleva 16 temporadas seguidas defendiendo su escudo, decimotercer jugador con m¨¢s partidos en la historia del club (538, a cuatro de Guti) y futbolista con m¨¢s t¨ªtulos en Chamart¨ªn, empatado con Gento (23 ambos). A una leyenda.
El brasile?o llevaba cuatro meses sin ser titular en Liga (desde el 30 de octubre, 1-2 en el Mart¨ªnez Valero), pero la lesi¨®n de Mendy le abri¨® la puerta del once ante el Granada. Pudo haber jugado tres d¨ªas antes, en Copa ante el Athletic, pero su expulsi¨®n contra el Elche le dej¨® sin esa coyuntura. Fue este domingo, por tanto, cuando volvi¨® a enfundarse el brazalete para correr esa banda izquierda del Bernab¨¦u que durante tantos a?os ha galopado. Y lo hizo de manera notable, sin dar sensaci¨®n de estar falto de ritmo y demostrando galones a la hora de dar ¨®rdenes a sus compa?eros, Carvajal, Militao y Alaba. Con esta participaci¨®n ya suma 464' en el presente curso entre todas las competiciones.
La ovaci¨®n
Ante el Granada jug¨® 83 minutos, hasta que Ancelotti decidi¨® retirarle para dar entrada a Nacho. Ah¨ª se produjo el momento m¨¢s emocionante de la noche. El Bernab¨¦u, de manera instant¨¢nea, se puso en pie y dio rienda suelta a una atronadora ovaci¨®n. ?l respondi¨® aplaudiendo a toda la grada y besando el escudo, regalando una estampa que nunca olvidar¨¢; ni ¨¦l, ni muchos aficionados. Al llegar al banquillo, las c¨¢maras captaron su emoci¨®n, tap¨¢ndose el rostro y con la mirada perdida ante lo que acababa de suceder.
El recibimiento del Bernab¨¦u, en este a?o de tanta irregularidad, era una verdadera inc¨®gnita. La afici¨®n blanca siempre ha acostumbrado a ser muy cr¨ªtica con sus futbolistas, llegando a pitar, cuando consideraba que tocaba, a aut¨¦nticos gal¨¢cticos. Sin temblarle el pulso. Con Marcelo, dado su rendimiento actual y vista la hemeroteca, pod¨ªa esperarse una respuesta m¨¢s feroz. Pero ni mucho menos. El madridismo prioriz¨® su entrega durante 16 temporadas consecutivas para llevar a las vitrinas de Chamart¨ªn 23 trofeos m¨¢s.
Y ¨¦l, emocionado y felicitado por sus compa?eros en el banquillo, donde verdaderamente se rompi¨® fue en la entrevista a pie de campo. En ese momento se le vio con los ojos llorosos y s¨®lo tuvo mensajes de agradecimiento hacia su p¨²blico. "S¨®lo puedo estar agradecido a la afici¨®n del Bernab¨¦u. He vivido muchas noches bonitas aqu¨ª, pero la de hoy ha sido especial. El cari?o que me tiene el madridismo es brutal", se?al¨®.
Su futuro, en el aire
Acaba contrato este verano y, con 33 a?os, si renovar¨¢ o no es, a d¨ªa de hoy, una inc¨®gnita. El Madrid ya se plantea una transici¨®n y dos nombres propios conviven en la agenda: Miguel Guti¨¦rrez, cuyo corto plazo parece pasar por una cesi¨®n que le permita seguir creciendo, y Fran Garc¨ªa (actualmente en el Rayo, pero por el cual el Madrid guarda el 50% de los derechos y su cl¨¢usula es de 10 millones; el conjunto blanco, pagando 5, podr¨ªa recuperarlo). De momento, esa plaza sigue siendo de Marcelo, cuyo adi¨®s, cuando se produza y vistos los proleg¨®menos, ser¨¢ emocionante. El Bernab¨¦u demostr¨® ante el Granada que algunas noches puede ser cr¨ªtico, pero tambi¨¦n tiene memoria.