Al Cholo le pierde el inmovilismo
Simeone sigue apostando por su vieja guardia, pero hay jugadores lejos de su mejor versi¨®n. Los errores se repiten sin soluci¨®n. Ligera mejor¨ªa con los cambios.
El Atl¨¦tico no da con la tecla para cambiar el rumbo de su temporada. Ni la victoria en la primera vuelta ante el Barcelona, el triunfo en Oporto o la remontada contra el Valencia han servido como punto de inflexi¨®n, simplemente han quedado como peque?os oasis en un desierto cada vez m¨¢s ¨¢rido. Y con el transcurso del curso se est¨¢n complicando cada vez m¨¢s los objetivos m¨ªnimos, quedando fuera de los puestos Champions tras una estrepitosa derrota en el Camp Nou y viendo como en enero se escapaban las opciones para pelear por la Copa del Rey o la Supercopa de Espa?a.
Y a Simeone deben preocuparle muchas cosas. Pero, quiz¨¢s la que m¨¢s, la incapacidad para corregir los errores que se llevan reiterando semana tras semana. El Atl¨¦tico es consciente de su fragilidad defensiva, errores a bal¨®n parado y deficiente defensa ante los centros laterales, pero no logra ponerle soluci¨®n a una sangr¨ªa que ha desembocado en 30 goles encajados en ¨²nicamente 54 remates a porter¨ªa. El Cholo ha hecho constantes referencias a las carencias e incapacidades rojiblancas, pero parece que todo queda en eso, papel mojado sin que se ponga en pr¨¢ctica ning¨²n cambio. Un constante d¨ªa de la marmota. El Atl¨¦tico se sigue cerrando sobre campo propio, una fortaleza que ha dado una d¨¦cada de ¨¦xitos, pero ya no tiene la capacidad de hacerlo, simplemente facilita el trabajo a los atacantes rivales.
Simeone es un t¨¦cnico de costumbres y siempre ha mantenido el ¡°a morir, los m¨ªos mueren¡±, un sentimiento de familia important¨ªsimo en el Atl¨¦tico. Y el t¨¦cnico tambi¨¦n muere por los suyos. Sin embargo, esta temporada est¨¢ dando la sensaci¨®n de que al Cholo le est¨¢ costando dar un giro de tim¨®n en sus esquemas a costa de esa vieja guardia. Futbolistas a un nivel lej¨ªsimos de su mejor versi¨®n, pero que siguen entrando en el esquema titular en todos los partidos importantes. Un buen ejemplo contra el Barcelona se produjo en los laterales. El Cholo obliga a pr¨¢cticamente todos sus fichajes a un proceso de adaptaci¨®n y aclimataci¨®n y decidi¨® apostar por Hermoso y Vrsaljko antes que dar una primera oportunidad a Wass o Reinildo.
Y los costados rojiblancos hicieron aguas. Hermoso sufri¨® una barbaridad como lateral, vi¨¦ndose superado cada vez que le encaraba Adama y quedando retratado en los dos primeros goles blaugranas. El t¨¦cnico del Atl¨¦tico tuvo que modificar su sistema para intentar corregir las carencias en ese costado, moviendo a Carrasco a jugar como carrilero y frenando pr¨¢cticamente por completo al internacional espa?ol, pero ya era muy tarde. Y Vrsaljko vio como Gavi (1,73) le superaba en el salto y marcaba de cabeza desde el punto de penalti como hab¨ªa hecho Januzaj en Copa siendo futbolistas muy poco acostumbrados a destacar con la testa.
Wass salt¨® al c¨¦sped en el descanso, aunque acab¨® visiblemente lesionado (en el Valencia no hab¨ªa sufrido ning¨²n percance f¨ªsico en tres a?os y medio). Y Reinildo debut¨® con el Atl¨¦tico despu¨¦s de que el Barcelona hubiese conseguido el cuarto. El mozambique?o es un claro especialista defensivo, por lo que se vuelve m¨¢s incomprensible que no saliese de inicio cuando Adama estaba enfrente e hiciese presencia cuando el Atl¨¦tico ten¨ªa que volcarse al ataque, siendo elegido por delante de Lodi. Reinildo salt¨® al c¨¦sped en una ristra de cambios que tuvieron un impacto s¨®lo por su energ¨ªa y cambio de actitud.
Correa es uno de los jugadores m¨¢s veteranos de la plantilla, pero quiz¨¢s es el m¨¢s f¨¢cil de sentar para un t¨¦cnico, ya que siempre acepta sus suplencias sin una mala cara. Aunque tambi¨¦n es dif¨ªcil de entender que el mejor jugador de LaLiga en el mes de enero (cuatro goles en tres partidos), salga del once por compa?eros que han demostrado menos que ¨¦l. Una sensaci¨®n parecida a la que ocurre con Cunha.
El brasile?o es joven, reci¨¦n llegado y a priori con un papel m¨¢s secundario. Sin embargo, cuando entra por lo menos muestra esa actitud, sangre y energ¨ªa que otros jugadores no est¨¢n dando. Si ya es habitual ver malos gestos cuando Jo?o F¨¦lix o Su¨¢rez son sustituidos o empiezan en el banquillo, Correa y Cunha no lo exteriorizan, pero parecen con una marcha m¨¢s que sus rivales por el puesto y en la meritocracia son suplencias dif¨ªciles de entender.
Koke es el ¨²nico futbolista que ha vivido con Simeone desde su primer d¨ªa al banquillo colchonero. Indiscutible, el capit¨¢n pasa por un estado de forma muy inferior al de otras temporadas. Tampoco De Paul se acerca al nivel mostrado con la selecci¨®n. Y, amplificado por las lesiones de los centrocampistas, los dos forman doble pivote partido tras partido, pero sin adue?arse pr¨¢cticamente nunca del ritmo de los encuentros.
A Simeone le est¨¢ costando llevar a cabo una revoluci¨®n en sus esquemas que parece necesaria. No se puede hablar de acomodo, ya que parece m¨¢s un bloqueo mental que de actitud en los jugadores. Pero, al Cholo le est¨¢ costando agitar sus apuestas, salir de su zona de confort y est¨¢ manteniendo ciertas esencias del Atl¨¦tico que este a?o se han perdido (bloque bajo, titulares en un nivel de forma deficiente, errores en bucle, defensa nula en centros laterales y bal¨®n parado¡). El Atl¨¦tico necesita salir a flote cuanto antes.