Man¨¦, rey l¨¦on

Los leones de Teranga son los nuevos reyes de ?frica. Senegal gan¨® su primera CAN dos a?os y medio despu¨¦s de quedarse a las puertas tras perder la final de 2019 ante Argelia. Esta vez, la mejor generaci¨®n senegalesa de la historia super¨® a Egipto en una final en la que fue mejor, pero en la que solo pudo deshacer la igualdad en la tanda de penaltis.

Apenas hab¨ªan dejado de sonar los himnos cuando Abdelmonem midi¨® fatal un entrada a Ciss dentro del ¨¢rea y cometi¨® penalti. Man¨¦ cogi¨® r¨¢pidamente el bal¨®n y ret¨® a Gabaski a un juego psicol¨®gico. Le se?al¨® el lado derecho de la porter¨ªa y le dijo al portero que iba a lanzarlo por dicho lado. Salah, que conoce a su compa?ero en el Liverpool como pocos, apareci¨® para asesorar a su compatriota en el ¨²ltimo momento. No sabemos qu¨¦ le dijo pero el portero decidi¨® no creer a Man¨¦ y acert¨® al adivinar el farol. Se tir¨® al lado opuesto y detuvo su cuarto penalti del torneo. Desde que sustituy¨® a El Shenawy en la pr¨®rroga de los octavos de final, Gabaski ha sido el jugador m¨¢s determinante de su equipo, al que ha conducido a la final gracias a sus paradas en las tandas ante Costa de Marfil y Camer¨²n.

El fallo no arrug¨® a Man¨¦. El senegal¨¦s no dej¨® de pedir la pelota e intento encarar cada vez que pudo. Senegal lleg¨® al ¨¢rea varias veces gracias a la verticalidad de su f¨²tbol pero a los leones les falt¨® afilar un poco m¨¢s las garras. Cuando no fallaba el ¨²ltimo pase era el ¨²ltimo regate o un centro que no encontraba rematador. Senegal dominaba y Man¨¦, a pesar de su fallo, brillaba. El escenario volvi¨® celoso a Salah y el egipcio se asegur¨® de pedir el foco con dos eslalones marca de la casa, con la pelota pegada al pie y sorteando rivales. Su primer disparo fue manso a las manos de Mendy. En el segundo oblig¨® al portero del Chelsea a dar lo mejor de s¨ª para desviar la pelota a c¨®rner con una mano que evit¨® que la pelota terminara en la escuadra.

A pesar del dominio senegal¨¦s, Egipto no cambi¨® su plan en el segundo tiempo. Esper¨® a su rival cerca de su ¨¢rea con la esperanza de encontrar a Salah en alguna contra y confiar en que el Fara¨®n hiciera de las suyas. Mientras esperaba el milagro, Senegal iba acumulando ocasiones. Gueye, Man¨¦ y Ciss las tuvieron para abrir el marcador pero se toparon con Gabaski. Despu¨¦s de los tres sustos, Queiroz decidi¨® mover ficha y realiz¨® un triple cambio para reforzar el medio del campo y minimizar los riesgos. Objetivo cumplido. El partido se atasc¨®, el ritmo disminuy¨® y solo a bal¨®n parado los dos equipos se hicieron algo de cosquillas hasta el final del tiempo reglamentario.

En la pr¨®rroga Senegal puso empe?o desde el principio para evitar que su destino se decidiera en la tanda de penaltis, pero volvi¨® a aparecer, en forma de gigante, la figura de Gabaski. El portero egipcio hizo lo imposible para frutrar los intentos de Dieng y Man¨¦ de ponerse por delante en una pr¨®rroga en la que Salah desapareci¨® por completo.

Terminado los 120 minutos, Egipto se encomend¨® a Gabaski, como durante todo el torneo, y Senegal a Mendy. El egipcio detuvo uno y el del Chelsea otro. Abdelmonem tir¨® al palo y Man¨¦ se redimi¨® de su fallo inicial metiendo el lanzamiento definitivo para darle a Senegal su primera Copa de ?frica.