El Espanyol flirtea con la crisis
Los blanquiazules fueron bamb¨² en el partido de ayer para el Panda Iglesias, recibieron la peor derrota posible y adem¨¢s la Grada Canito enton¨® un t¨ªmido "Vicente vete ya y Rufete vete ya".
Bamb¨² del Panda. Se escuch¨® el nombre de Borja Iglesias y los decibelios del RCDE Stadium aumentaron, como cuando fue sustituido en el segundo tiempo tras un empacho de goles. El perico no olvida la marcha del Panda al Betis meses despu¨¦s de jurar amor eterno por all¨¢ 2019. Pero el destino, siempre caprichoso, quiso que el delantero gallego fuera el ejecutor de un Espanyol que fue bamb¨² para el Panda, un alimento a base de goles que sigue ampliando el agujero de la defensa blanquiazul en las ¨²ltimas jornadas. Una involuci¨®n que desprende desaz¨®n, por mucho que el equipo siga en ese rango de m¨ªnimos que se estableci¨® desde los despachos a comienzo de curso.
Los n¨²meros. Unos despachos que se abonaron al discurso infantiloide (como la expulsi¨®n de Ra¨²l de Tom¨¢s) de hablar de la Play como si los aficionados no entendieran la dificultad del juego ni vieran, por ejemplo, que el Betis, con todas las salvedades que pueda haber en esos l¨ªmites salariales tramposos, tiene un tope de 71 millones por 77 del Espanyol, que Juanmi golea de verdiblanco y Loren no se encuentra de blanquiazul, que unos est¨¢n en zona Champions y los otros en una tierra sin nombre, tranquilos por ahora, pero con un largo camino por delante.
De Embarba a Aleix. Un camino con otro tropiezo, como ante Elche y C¨¢diz, con Mallorca de por medio. El RCDE Stadium ha perdido su magia y el equipo perico se encuentra con todos los infortunios. Marc¨® RdT sin que lo merecieran los de Vicente Moreno, agazapados en su campo, sometidos por un Betis que sob¨® el bal¨®n. Pero una mano de Aleix Vidal, con ayuda del VAR, depar¨® el penalti del 1-1. Si la paciencia se le acab¨® a la hinchada con un Embarba que volvi¨® a ser suplente, ahora es Aleix quien desespera. Solo Diego L¨®pez sostuvo al equipo, fr¨¢gil incluso a bal¨®n parado, una virtud que ahora es una debilidad.
La gesti¨®n del bal¨®n. Aunque la sangr¨ªa defensiva es evidente, el desespero es la gesti¨®n del bal¨®n del Espanyol. Cuesta salir jugando pese a la ayuda de Calero, que solo aguant¨® 45 minutos. Morlanes, Darder y Melendo solo se activan en recuperaciones en campo propio, presionados y sin la capacidad de combinar entre ellos con continuidad. Puado estuvo perdido, como Aleix, mientras que Pedrosa y ?scar Gil atinaron en los centros en sus pocas subidas, ya que el Espanyol no es capaz de instalarse largo tiempo en campo rival. El gol y poco m¨¢s para un RdT que juega desconectado por sus propios vicios y por las pocas ayudas de las que dispone. Y que acab¨® en la calle sin venir a cuento.
Sin br¨²jula, sin cura. La afici¨®n del Betis core¨® "o¨¦s" mientras ve¨ªa a Loren estorbar a Pedrosa, sin confianza y perdido, como un jugador de waterpolo en un campo de f¨²tbol. Ya sea por la descompensada plantilla, por las vicisitudes del propio f¨²tbol o por la confianza de los jugadores, el equipo parece haber perdido la br¨²jula. Y no por la derrota de este viernes, una m¨¢s, sino por la p¨¦rdida de los valores de un conjunto que era una roca a principio de temporada y ahora es de cart¨®n piedra. Los s¨ªntomas aumentan a la espera de encontrar una cura. El Espanyol flirtea con la crisis como refleja la imagen final: t¨ªmidos, pero ya presentes, c¨¢nticos de la Grada Canito de "Vicente vete ya" y "Rufete vete ya" mientras el Betis buscaba una manita que no lleg¨® por las florituras verdiblancas. Es b¨¢sico volver al origen para evitar males mayores.
