Miku siempre golpea primero
Seis de los nueve goles del venezolano le han servido al Deportivo para romper un 0-0. S¨®lo ante la SD Logro?¨¦s un tanto suyo no termin¨® en triunfo blanquiazul.
Sobre todo en Riazor, pero tambi¨¦n fuera de casa, el Deportivo est¨¢ teniendo que hacer en pr¨¢cticamente todos los encuentros un ejercicio de paciencia. Es lo que tiene haberse ganado el respeto, y el temor, de los rivales en Primera RFEF. Borja Jim¨¦nez se ve obligado a planificar los encuentros sabiendo que le entregar¨¢n el bal¨®n y tratar¨¢n de poner un muro delante de su ¨¢rea. Y ah¨ª es donde gana importancia un ariete de primer nivel como Miku, que siempre golpea primero.
El venezolano es el pichichi del equipo y tambi¨¦n del grupo con nueve goles. Los mismos que ?lvaro Romero, del Algeciras, acumula en el grupo II. Estas cifras, ya notables en absoluto si tenemos en cuenta que se han registrado en 17 partidos, cobran m¨¢s valor si se ponen bajo la lupa. Porque de esos nueve tantos de Miku, seis han servido para romper un 0-0.
Un desatascador sobresaliente. As¨ª est¨¢ funcionando el veterano delantero para el Deportivo, que no s¨®lo inaugura los marcadores, sino que lo hace siempre en la primera parte. Lo hizo el ¨²ltimo domingo ante el Talavera (24') como ya lo hiciera en la primera jornada ante el Celta B (12'). Tambi¨¦n contra el Sanse (36') y en la visita a la UD Logro?¨¦s (36'), partidos que se decidieron a favor de los deportivistas con el solitario tanto de Miku.
Los goles de Miku, sin¨®nimo de puntos para el Deportivo
En un equipo que apenas encaja, ponerse por delante es oro. Por eso los goles del punta se est¨¢n transformando de manera pr¨¢cticamente autom¨¢tica en victorias. Tambi¨¦n abri¨® fuego ante la Cultural (27') y volvi¨® a marcar en el 90' para sellar el triunfo. Miku ha marcado en ocho encuentros y siete de ellos terminaron en victoria blanquiazul (cinco por la m¨ªnima). El ¨²nico duelo en el que una diana suya no sirvi¨® para ganar fue ante la SD Logro?¨¦s (18'), con el empate en el ¨²ltimo suspiro.