GRUPO B | ATL?TICO 0 - MILAN 1
Un fracaso que exige una gesta
Un gol de Messias en los 迆ltimos minutos dejan al Atletico 迆ltimo de grupo. Simeone busc車 el empate y al final termin車 pagando el miedo a perder.

El miedo es malo. Atenaza, asfixia, bloquea. Quien lo tiene, piensa demasiado, no arriesga. El miedo es capaz de arrasarlo todo mientras empuja a un infierno inesperado. Porque, de pronto, el Atleti vivir芍 una final en diciembre. Una final en Oporto con el miedo de no alcanzar los octavos de esta Champions convertido en 芍cido l芍ctico mordiendo las piernas. Piernas entumecidas como anoche ante un Milan que llegaba muerto y se fue muy vivo. Que lleg車 y venci車. Dejando atr芍s tantas dudas, clavos en la garganta, ese partido marcado en el calendario en rojo sangre: los octavos pasan por la gesta en Portugal. ?ltima oportunidad.
No hab赤a echado el bal車n a rodar y Simeone ya gritaba con los brazos a sus jugadores. "Arriba, arriba". Sal赤a abrazado a los cuatro defensas, con Llorente y Hermoso en los laterales y Savic de vuelta. Fiado al juego directo aunque le faltara el bal車n. ?ste pertenec赤a al Milan, que lo masticaba y masticaba, convirtiendo su presi車n de nuevo, como en San Siro, en jerogl赤fico indescifrable. Brahim sobre Koke, Kessi谷 sobre De Paul, Tonali sobre Lemar. Un laberinto en el que el Atleti no encontraba salida. Por el miedo a arriesgar, el miedo a encajar, prefer赤a esperar.
Pioli, desde la alineaci車n, dej車 claras sus intenciones: salir con Krunic para ganar densidad y orden t芍ctico, renunciando a Leao. Los rojiblancos eran s車lo invitados de lujo a una masterclass. La de Brahim. Ese futbolista que vest赤a la camiseta rival. Rapid赤simo entre l赤neas, moviendo y buscando, con velcro en el pie. Indetectable Saelemaekers, agigantados Tonali y Kessi谷. El bal車n, para el Atleti, se hab赤a convertido en ese objeto volador no identificable que sobrevolaba una y otra vez, manso pero ah赤, por el 芍rea de Oblak. Cuando lo bajaba a la hierba, apenas le duraba, salvo que Llorente pudiera correr su banda. Pero eso suced赤a poco, suced赤a apenas. Nada le sal赤a a los rojiblancos, p芍lidos en la noche fr赤a, de paseo entre las sombras. Los delanteros no tiraban desmarques, los interiores iban m芍s hacia atr芍s que hacia delante. Lemar desconectado, Grizi apagado o fuera de cobertura, Su芍rez lento, fuera. Simeone hab赤a ca赤do en la trampa de Pioli. Y eso que sus brazos no hab赤an dejado de gritar. "Arriba, arriba". Como si as赤 pudiera empujar las piernas de Llorente, demasiado bajo, demasiado atr芍s, atravesado en la banda como un coche gripado, que ni llega ni va a lugar alguno.
El descanso vino, al menos, sin heridas: el dominio del Milan no alcanzaba el marcador. La segunda parte comenz車 con dos disparos. El primero fue de Saelemaekers, seco y duro, que atrap車 Oblak. El segundo fue de Carrasco tras una internada de Griezmann haciendo de Griezmann. Pareci車 despertar y echarse todo a la espalda. El partido, la necesidad. Centro a centro, el Atleti dio pasos hacia Tatarusanu. Pero dur車 poco. Como una l芍grima de San Lorenzo en el cielo. Vista y no. El Milan se orden車 mientras Brahim volv赤a a tatuarle su nombre al bal車n y desplegaba un cat芍logo de disparos sobre Oblak. Incapaces los rojiblancos de sacar alguno, de despejar algo, como si se hubieran olvidado c車mo. Pero el miedo ya lo llenaba todo. La precipitaci車n era como fuego que se propagaba por todo el campo.
Pasaba el reloj de la hora cuando Simeone introduc赤a a Lodi y Correa y Pioli hac赤a cuatro cambios de golpe. Dio igual. A los rojiblancos sigui車 falt芍ndoles pecho para meter dentro tantos nervios. Imprecisos, blandos, desconocidos. Incapaces de doblegar al Milan, y quiz芍 aliviados por el resultado que la radio tra赤a de Anfield (la victoria del Liverpool hac赤a que les valiera el empate en la jornada final), se abrazaron al 0-0. Sin pensar que, enfrente, el Milan se jugaba la vida. Y el 0-0 era dejar de estar. A ello se aferraron como no hizo el Atleti en toda la noche.
Si Savic tapon車 un disparo de Bakayoko con el pie, el infierno lo trajo Messias, curioso, al cabecear solo, entre Lodi y Gim谷nez, un centro lateral que silenci車 al Metropolitano. Gol. El Milan, de pronto, muy vivo, en la pelea. Y el Atleti empujado a hacer de verdad el 'ganar, ganar y s車lo ganar' en Portugal. La gesta. Adem芍s de rezar lo que sepa. Porque el Milan no gane al Liverpool. Porque hoy, en la tabla, aunque a迆n puedan ser segundos, amanecen los rojiblancos 迆ltimos.

- 13 Oblak
- 2 Gim谷nez
- 22 Mario Hermoso (63')
- 15 Savic
- 14 Marcos Llorente
- 6 Koke
- 21 Carrasco
- 5 De Paul (76')
- 11 Lemar (63')
- 9 Luis Su芍rez (76')
- 8 Griezmann (80')
- Banquillo
- 12 Renan Augusto (63')
- 24 Vrsaljko (76')
- 10 Correa (63')
- 38 Fran Gonz芍lez
- 1 Lecomte
- 16 H谷ctor Herrera
- 19 Matheus Cunha (76')
- 4 Kondogbia (80')

- 1 Tatarusanu
- 20 Pierre Kalulu Kyatengwa (64')
- 24 Kjaer
- 13 Romagnoli
- 19 Theo Hern芍ndez
- 10 Brahim Diaz (77')
- 33 Rade Krunic (64')
- 56 Alexis Saelemaekers
- 79 Kessi谷 Franck
- 8 Sandro Tonali (64')
- 9 Giroud (65')
- Banquillo
- 41 Bakayoko (64')
- 46 Matteo Gabbia
- 5 Fode Toure
- 83 Mirante
- 30 Junior Messias (64')
- 90 Sebastiano Desplanches
- 4 Bennacer (77')
- 17 Rafael Leao
- 27 Daniel Maldini
- 11 Ibrahimovic (65')
- 25 Florenzi (64')