El Lleida Esportiu agoniza
Entre impagos, denuncias y un profundo abandono, jugadores, canteranos y afici¨®n escenificaron este domingo im¨¢genes propias del ep¨ªlogo del club.
Sin seguridad para acceder al estadio, marcadores apagados y el himno brillando por su ausencia en la entrada de los jugadores al terreno de juego. Entre la desidia y la desolaci¨®n, la imagen del Camp d¡¯Esports este domingo era la de un Lleida Esportiu agonizante, que puede afrontar su desaparici¨®n incluso en cuesti¨®n de semanas. Y eso que esa postal y la derrota contra el Terrassa (0-1) en Segunda RFEF fueron solo la punta del iceberg de una jornada en que se escenific¨® la situaci¨®n cr¨ªtica del club.
Hora y media antes del encuentro ya se hicieron escuchar las plantillas de los alevines, infantiles y cadetes del Lleida, acompa?ados por madres y padres, protestando porque este fin de semana no pudieron jugar como consecuencia de que la entidad no paga a los ¨¢rbitros que deben dirigir sus respectivos partidos. Cuando decidieron acceder al estadio, con sus pancartas y c¨¢nticos de protesta, se les deneg¨® en primera instancia el paso aunque finalmente s¨ª pudieron entrar.
La segunda imagen, como ya hab¨ªa ocurrido en el anterior encuentro ante el Cerdanyola, fue el plante de los jugadores del primer equipo una vez el ¨¢rbitro decret¨® el inicio del partido ante el Terrassa. Durante un minuto, alineados y abrazados, los futbolistas se cuadraron en la banda y mirando en direcci¨®n al palco, en el que no apareci¨® ¨Cy en esto, tampoco era la primera vez¨C ning¨²n directivo.
Los recurrentes impagos han desembocado ya en denuncias, hasta el punto de que en pr¨®ximas fechas la AFE (Asociaci¨®n de Futbolistas Espa?oles) puede dar por resueltos los contratos de jugadores para que abandonen el Lleida totalmente liberados de relaci¨®n laboral. En ese sentido se produc¨ªa hace mes y medio la inspecci¨®n de la Guardia Civil en las oficinas de la entidad.
La afici¨®n, solidarizada con la plantilla, no solo rompi¨® el ambiente de funeral que reinaba durante el partido ¨Ccon c¨¢nticos ya habituales como el ¡°?Lleida, s¨ª; Esteve, no!¡±, en alusi¨®n a los hermanos Albert y Jordi, presidentes ¨²ltimos de la entidad¨C, sino que lleg¨® a invadir el vac¨ªo palco en el descanso y, de forma pac¨ªfica, irrumpi¨® en el terreno de juego tras el pitido final para acabar fundi¨¦ndose en abrazos con los jugadores entrenados por el ex futbolista de Barcelona y Ajax Gabri Garc¨ªa. Una imagen poderosa pero propia de un ep¨ªlogo, el del Lleida Esportiu.