GRUPO E | BENFICA 3 - BARCELONA 0
Aprobados y suspensos del Bar?a: ni Fati se salva del desastre
Desprop¨®sito may¨²sculo de los blaugrana, que escenifican el epitafio de Koeman de la peor de las maneras en la Champions League.
Ter Stegen. Superado en todos los sentidos. Su imagen saliendo a la desesperada casi hasta al mediocampo y sin poder cortar el bal¨®n, que estuvo cerca Darwin de marcar, enviando el bal¨®n al poste, es el paradigma de la impotencia y el grado de caos que vive el equipo.
Eric. El primer gol es culpa suya. Excesivamente blando a la hora de marcar a Darwin, le dej¨® un pasillo abierto para que el uruguayo entrara a placer. Con partidos as¨ª uno empieza a atisbar porque el City tampoco se puso las manos a la cabeza cuando se fue. Acab¨® expulsado. No es la primera vez.
Piqu¨¦. Poco m¨¢s de treinta minutos aguant¨® sobre el campo. Koeman se tem¨ªa que la segunda amarilla estaba m¨¢s cerca que lejos y decidi¨® sustituirlo. De hecho, el ¨¢rbitro le perdon¨® la expulsi¨®n en una falta muy arriesgada. El central catal¨¢n march¨® del campo con cara de circunstancias. Seguramente nunca hab¨ªa vivido algo similar en su carrera profesional, al menos desde que est¨¢ en el Barcelona.
Ara¨²jo. Que un jugador de su car¨¢cter y ambici¨®n no diera una a derechas es un claro signo de que la culpa va m¨¢s all¨¢ de los jugadores. El desconcierto t¨¢ctico del equipo fue gui?olesco.
Sergi Roberto. Lleva muchos a?os apareciendo en la foto de todas las derrotas y humillaciones en la Champions. Habr¨ªa que preguntarse si es tan necesaria su renovaci¨®n, aunque sea a la baja. Es un jugador totalmente intrascendente, que aporta sacrificio pero poco m¨¢s. Y en el Bar?a eso es claramente deficitario.
Sergio Busquets. Cuando le aprietan, su br¨²jula se desorienta. El de Bad¨ªa si no se asocia con comodidad, empieza a tener serios problemas para encontrar compa?eros y dar continuidad en el juego. Est¨¢ claro que la edad no perdona, ni a los mejores.
Frenkie de Jong. El holand¨¦s no est¨¢ fino, pero tambi¨¦n es verdad que Koeman le ha desquiciado. Tras el cambio de Piqu¨¦, se pas¨® el resto del partido jugando de tercer central, una posici¨®n donde no pudo aportar absolutamente nada al equipo.
Pedri. En la primera parte fue el ¨²nico que parec¨ªa tener las ideas claras, filtrando pases entre l¨ªneas y asoci¨¢ndose con sus compa?eros. Pero tras el descanso, se contagi¨® de la mediocridad general y acab¨® absolutamente diluido.
Dest. Si ya tiene altibajos cuando juega en la banda derecha, en la izquierda se multiplica su irregularidad. Es un jugador la mayor¨ªa de veces previsibles y cuando quiere ser imprevisible comete errores infantiles.
Luuk de Jong. No es un delantero para el Barcelona. Ha fallado goles que ni un p¨¢rvulo, pr¨¢cticamente a porter¨ªa vac¨ªa. Verlo en el once titular del Bar?a hace da?o a la vista y en el campo ya no digamos. Estamos ante un Prince Boateng en potencia.
Memphis. No se puede aspirar que el mejor jugador del Olympique de Lyon sea la referencia en ataque. Puede ser un buen socio en ataque, pero no el l¨ªder. Tiene muchas carencias y peca en exceso de individualismo. O le das unas mejores cartas o va camino de convertirse en un delantero m¨¢s.
Sustituciones
Gavi. Que un jugador de su talento no pueda explotarlo debidamente no es culpa suya, es de un entrenador que ha demostrado que le viene grande este equipo. El sevillano sali¨® en el minuto treinta de la primera parte, demostrando claramente que la pizarra de Koeman era desastrosa.
Fati. Ni un jugador con su nivel fue capaz de arreglar el desaguisado t¨¢ctico del holand¨¦s. Jug¨® treinta minutos.
Coutinho. Se pase¨® por el estadio Da Luz. S¨®lo le falt¨® firmar aut¨®grafos.
Nico. Salir en un momento de m¨¢ximo caos no es el mejor escenario para un jugador ordenado y aseado.
Mingueza. Sali¨® por Sergi Roberto. Tard¨® 89 minutos Koeman en darse cuenta que el de Reus no aportaba nada en la banda derecha.