Jaime Santos, el 'Guaje' que triunfa en las alturas de Bolivia

Se form¨® en la cantera del Sporting, aprendi¨® en Mirand¨¦s, se cur¨® de espanto en India y ahora despliega su mejor f¨²tbol en Bolivia. Cuando su representante le habl¨® de fichar por el Palmaflor, Jaime Santos (Oviedo, 1995) fue claro: 'Ni me hables de ese tema'. Pero un periodista le convenci¨® y ya ha marcado ocho goles con el club de Cochabamba, donde ni el mal de altura ha podido frenarle. "No quiero hacer toda mi carrera en el extranjero. Si le digo a mi novia que me quiero quedar me mata", descubre un jugador que desvela tener cuentas pendientes con Espa?a: "Me fui al Mirand¨¦s creyendo que era el rey del mundo, pero me encontr¨¦ con un equipo profesional y me di cuenta de que el f¨²tbol no era como yo hab¨ªa aprendido".

?Se esperaba jugar en Bolivia? ?Le ha sorprendido Sudam¨¦rica?

Si hace cinco a?os me dicen que iba a jugar en Bolivia... Jam¨¢s me lo hubiera imaginado, pero me sorprendi¨® el pa¨ªs y me sorprendi¨® mi ciudad, Cochabamba. Es parecida a Europa y no me falta de nada. Tengo una buena casa, estoy c¨®modo, la gente es muy agradable... Esperaba que Bolivia fuera como la India, que es un absoluto caos. Hay ciudades que me gustan menos como Potos¨ª u Oruro, all¨ª lo habr¨ªa pasado mal. Pero tuve suerte y estoy contento en Cochabamba.

?Le tratan bien?

Aqu¨ª la gente da los buenos d¨ªas, las gracias, pregunta qu¨¦ tal est¨¢s, c¨®mo te encuentras... Me parece algo b¨¢sico y fundamental y es algo que en Espa?a se est¨¢ perdiendo. Aqu¨ª es algo que me llama la atenci¨®n. Te cruzas con alguien en el ascensor y nada de silencio. Te pregunta qu¨¦ tal est¨¢s. Son buenas personas y me hacen sentir muy c¨®modo.

Juega en el Palmaflor, que es un club muy joven.

S¨ª, se fund¨® hace cinco o seis a?os. Tienen la sede en Quillacollo y es un club muy humilde. No tienen experiencia, pero se ve que va a m¨¢s porque son ambiciosos. Ya nos est¨¢n exigiendo meternos en Libertadores y ganar la liga cuando hay presupuestos que son cinco veces mayores... Son as¨ª ellos.

?Tienen mucha afici¨®n?

Palmaflor afici¨®n no tiene. De hecho contratan una banda de m¨²sica para que haya ambiente en el estadio, pero va muy poca gente. Cochabamba es una ciudad cuyo equipo principal es Wilstermann. La ciudad tiene un mill¨®n y pico de habitantes y todos son de Wilstermann. ?Qui¨¦n se va a hacer ahora aficionado de Palmaflor? A no ser que hagas una temporada incre¨ªble y la gente se enganche... Es dif¨ªcil.

En Bolivia no son muy pacientes...

Con decirte que en la liga somos 16 equipos y m¨¢s de una decena ya han cambiado de entrenador esta temporada... Quieren los resultados super r¨¢pido, no dan tiempo para el trabajo y son muy exigentes. Quieren victoria o victoria. Si no hay victoria, te echan. Hay entrenadores que tienen estipulado por contrato que si pierden dos o tres partidos seguidos se van a la calle. Es una cosa b¨¢rbara, pero yo he tenido suerte con Palmaflor.

?Es dif¨ªcil jugar en Bolivia?

Mucho. Sadiku hizo una buena temporada en el M¨¢laga, vino aqu¨ª y no se pod¨ªa mover. No es f¨¢cil m¨¢s que nada porque te vas a Santa Cruz, que es en el llano, y juegas a las 15 de la tarde con 40 grados. A la semana siguiente te vas a jugar a Potos¨ª, a 4.200 metros de altura y un fr¨ªo para morirse. Hay que amoldarse a condiciones totalmente distintas cada semana. En ese sentido yo, por suerte, no he tenido ning¨²n problema.

?No sufri¨® mal de altura?

En Cochabamba tenemos 2.800 metros de altura. Cuando llegu¨¦ llevaba muchos meses sin jugar y, nada m¨¢s llegar, el entrenador me puso a correr. La primera semana fue dura, lo pas¨¦ mal. Y la primera vez que vas a jugar en altura te asustas. El cuerpo t¨¦cnico y los propios compa?eros te dicen: '?Es tu primera vez en la altura?'. Y te dan pastillas. Me llegaron a dar viagra para un partido. Les dije: 'Dame, dame'. Yo con tal de funcionar jugando... No me hizo nada. ?Es que sabes qu¨¦ pasa? Cuando vas a la altura, juegas y te vas no se nota mucho. No te aclimatas a la altura y no se nota mucho. Pero si te quedas dos d¨ªas o tres te empieza a doler la cabeza. Eso s¨ª me pas¨®. Parece que est¨¢s mareado... La ciudad nuestra es perfecta porque est¨¢s a mitad de todo.

?El bal¨®n tambi¨¦n se comporta diferente?

Totalmente. Yo suelo sacar el bal¨®n parado y le quiero meter comba hacia dentro. Cuando le doy as¨ª en la altura, en vez de hacer el efecto que yo quiero hace el contrario. Se va recto. Un cambio de juego, si te bota te come, un tiro suave se convierte en un tiro fuerte... En la altura, el bal¨®n vuela. ?C¨®mo se entrena eso si vives a 2.000 metros y juegas el domingo a 4.800? No se entrena. Te dan consejos: 'Dale m¨¢s suave que el bal¨®n va a volar mucho'. Pero yo a veces la saco fuera del campo. Es dif¨ªcil. Si le coges la t¨¦cnica, tienes ventaja. Por eso los equipos de la altura los ¨²ltimos a?os son los dominantes. Mueven el bal¨®n r¨¢pido, no lo ves y se hacen muy fuertes en casa. Por eso Bol¨ªvar, The Strongest... Los que han ganado ¨²ltimamente son de La Paz. Los del llano est¨¢n perdiendo fuerza.

?Esperaba hacer tantos goles?

No es habitual que yo est¨¦ entre los m¨¢ximos goleadores. A veces se habla de las rachas, y es la realidad. Cuando se me cierra la porter¨ªa no meto en tres meses. Pienso: '?Pero qu¨¦ me pasa?'. Luego le das con el tobillo y entra. Hay cosas inexplicables, pero lo que hay que hacer es aprovechar los momentos y seguir ah¨ª. Y los compa?eros lo saben. Se escucha: 'D¨¢sela a Jaime porque la va a meter'. Son cosas que oyes y te lo crees. Piensas que la vas a meter y la metes.

?Busca su nombre en redes sociales despu¨¦s de los partidos para ver qu¨¦ opinan los aficionados?

No. No tengo Twitter ni Facebook. Y desde que estuve en la India no miro los mensajes de desconocidos en Instagram porque me llegan 15 o 20 al d¨ªa simplemente poniendo: 'Buenos d¨ªas'. En general, soy un desastre con el tel¨¦fono. Lo que s¨ª me gusta es ver mis partidos repetidos. Soy bastante loco conmigo mismo. Me corrijo. Pero no, no leo ni criticas ni halagos. Te crees en la cresta de la ola y si fallas un penalti ya van a decir que eres mal¨ªsimo. Cuando est¨¢s lejos de casa lo que tienes que tener es fuerza mental. Ayudar al equipo y ya est¨¢. Quien quiera que hable. Al final el que m¨¢s habla es el que menos sabe.

Ahora est¨¢n a tres puntos de Copa Libertadores, ?lo ve factible?

Siempre he tenido mucha confianza en el equipo, pero no esperaba estar en esta posici¨®n. Hay equipos con un presupuesto cinco veces mayor que el nuestro y les competimos de igual a igual. Creo que la directiva acert¨® con fichajes. Junt¨® un grupo con hambre y, con ver un partido, se ve. Nadie nos ha ganado en casa.

?La gente le reconoce cuando sale a la calle en Cochabamba?

Es verdad que te identifican r¨¢pido, pero porque reconocen r¨¢pidamente al que no es boliviano. A m¨ª me ven joven y extranjero y piensan que soy futbolista. Y aciertan. Pero apenas me conocen por ser jugador del Palmaflor. De vez en cuando me para alg¨²n grupillo de chavales, pero no es nada habitual.

Vino de la India y se march¨® a Bolivia, ?no le apetec¨ªa quedarse un tiempo en Espa?a?

De hecho ten¨ªa decidido que iba a jugar en Espa?a cuando Marcelino Elena -su representante- me llam¨® y me propuso jugar en Bolivia. Mi primera reacci¨®n fue: 'No. Ni me hables de ese tema'. Me dijo que me lo pensara. Me volvi¨® a llamar, me dio m¨¢s detalles... Un factor determinante fue que hay un periodista asturiano que trabaja aqu¨ª en Bolivia. Vino a casa a comentarme c¨®mo es todo esto. Tiene cosas malas, pero medi¨¢ticamente, por ejemplo, es una Primera Divisi¨®n con may¨²sculas. Tambi¨¦n me coment¨® la opci¨®n de que Bolivia me sirviera como trampol¨ªn. El a?o que viene qui¨¦n sabe d¨®nde estar¨¦, pero puedo conseguir un contrato mejor. De momento me est¨¢n saliendo bien las cosas, estoy haciendo ruido en la liga. Se est¨¢ hablando bastante de Palmaflor y creo que acert¨¦ con la elecci¨®n. Pero me podr¨ªa haber salido como a otros espa?oles que han venido aqu¨ª y ni juegan. Hay que tener suerte y yo de momento la estoy teniendo.

?Le gustar¨ªa seguir jugando en el extranjero?

Tengo a mi novia en Espa?a y, si le digo que me quiero quedar aqu¨ª m¨¢s, me mata. Me corta el cuello. Yo le tengo que decir que mi objetivo es volver, que realmente es as¨ª. Mi objetivo es volver a jugar en Espa?a. Tengo una espinita clavada con el f¨²tbol de all¨ª. En ciertos momentos clave o no estuve preparado o no tuve la suerte necesaria. Me gustar¨ªa volver a mi casa, triunfar en mi pa¨ªs, pero de momento no se est¨¢ dando as¨ª. A nivel econ¨®mico se gana m¨¢s aqu¨ª que en Espa?a, pero no todo es eso. Priorizo la comodidad, estar cerca de mi familia, de mi gente, de mi novia... Suenan cosas, salen rumores... No los quieres ver, pero los miras y te montas tus pel¨ªculas. Piensas: 'Qu¨¦ guay ser¨ªa acabar jugando all¨ª'. Pero no me gustar¨ªa hacer toda mi carrera en el extranjero.

?Por qu¨¦ tiene cuentas pendientes con el f¨²tbol espa?ol?

Tengo una espina clavada porque cuando decid¨ª marcharme del Sporting no tenia la inteligencia y la madurez que puedo tener ahora, que igual tampoco es mucha, pero s¨ª m¨¢s que en aquella ¨¦poca. Tom¨¦ la decisi¨®n de marcharme porque necesitaba un cambio y me fui al Mirand¨¦s creyendo que era el rey del mundo, pero llegu¨¦ all¨ª y me encontr¨¦ con un equipo profesional, gente con recorrido. Me di cuenta de que el f¨²tbol no es como yo hab¨ªa aprendido. Es mucho m¨¢s serio, se cuida todo mucho m¨¢s... Me top¨¦ con un equipo que volaba. Me toc¨® esperar mi momento, pero hab¨ªa un jugador en mi puesto que estaba haci¨¦ndolo bien y me toc¨® ser suplente. Aprend¨ª much¨ªsimo y sal¨ª siendo mejor jugador, pero no me llamaron los equipos a los que yo aspiraba. Me llamaron equipos que dec¨ªa: 'Yo ah¨ª no quiero jugar'. Ven¨ªa de jugar en el Mirand¨¦s y de una cantera importante como la del Sporting. No quer¨ªa irme a jugar a un equipo de zona media baja que entrenaba en c¨¦sped artificial. Sali¨® la oportunidad de salir al extranjero y qu¨¦ pasa, que te pierden la pista en Espa?a. El trabajo que haces fuera no se valora en Espa?a. Soy consciente de que si volviese, tendr¨ªa que ser a un equipo por debajo de mis pretensiones. Me fui muy pronto y es dif¨ªcil volver, pero yo soy mejor futbolista que cuando me fui. Seguro.

?Se arrepiente de alguna decisi¨®n que tom¨®?

Yo no me arrepiento de nada. Pude tomar decisiones equivocadas, pero esas decisiones equivocadas me han llevado a otras decisiones acertadas. Yo valoro d¨®nde estoy y todo lo que he vivido. El f¨²tbol me ha permitido conocer culturas, conocer gente, conocerme a m¨ª mismo... La soledad te hace ser m¨¢s independiente. Soy mejor futbolista, pero sobre todo soy mejor persona.

?C¨®mo lleva la distancia?

Es dif¨ªcil. Por ejemplo, mi novia est¨¢ estudiando una oposici¨®n y no la quiero desconcentrar, si no le dir¨ªa que se viniera aqu¨ª conmigo. Dejar la familia y los amigos es duro, pero de momento lo llevo bien. La tecnolog¨ªa nos permite estar m¨¢s cerca, aunque hay momentos dif¨ªciles. Todo el mundo tiene d¨ªas malos. Cuando te apetece darle un beso a tu madre o tu padre y no puedes, se hace complicado. Es duro, pero tengo fuerza mental. Nunca tuve un baj¨®n ni pens¨¦ en irme.

Antes de Bolivia, estuvo en India. ?Le gust¨® la experiencia?

Echo la vista atr¨¢s y echo de menos algunos momentos de mi etapa en India. Era un ¨ªdolo para todos los aficionados del East Bengal, que es como el Real Madrid de all¨ª. Me miraban y temblaban, literalmente. Dec¨ªa: '?Si no soy nadie!'. Pero es que ca¨ª de pie en el equipo. Llegu¨¦ para jugar el Mohun Bagan-East Bengal, que es uno de los derbis m¨¢s antiguos de Asia, y eso para m¨ª era un Recre-Albacete. No sab¨ªa ni d¨®nde estaba. Me dijeron que era un partido important¨ªsimo y dije: 'Bueno, imagino, vamos a ver qu¨¦ pasa'. Y cuando sal¨ª al campo me encontr¨¦ con 75.000 espectadores en las gradas. El campo se ca¨ªa. Era una locura. Ganamos y acabamos haciendo muy buena temporada. Se hablaba mucho de m¨ª all¨ª.

?Qu¨¦ le dijo a Marcelino cuando le propuso ir a jugar a India?

Pues no me acuerdo muy bien, pero seguro que lo m¨¢s bonito que hice fue colgarle el tel¨¦fono. Ten¨ªa 23 a?os y solo hab¨ªa salido de mi casa para ir a Miranda. Dije: '?India? ?Pero qu¨¦ me est¨¢s contando? Imposible. Descartado. Jam¨¢s voy a acabar ah¨ª'. Pero hubo otra llamada, me explic¨® las condiciones, que el entrenador era Alejandro Men¨¦ndez.... Eran cuatro o cinco meses y el club era serio. Pagaba al d¨ªa y hab¨ªa otros espa?oles. Dije: 'Venga, me apetece una aventura'. Los primeros meses estuve encantado y acab¨¦ renovando por dos a?os, pero empezaron a haber problemas y, como era el capit¨¢n, fui quien tuvo que poner el pecho y eso me desgast¨® mucho. No les llegu¨¦ a coger man¨ªa, pero el ¨²ltimo a?o en India fue muy duro. Por eso despu¨¦s de estar en Calcuta a m¨ª todo me parece bien. Comparado con India, Cochabamba es Miami.