Diego L¨®pez es Benjamin Button
El Espanyol mantiene su apuesta en el portero de 39 a?os y no se han planteado fichar en su puesto este mercado. Es titular indiscutible y arrincona a Oier.
Pasan los a?os, pasan los jugadores y Diego L¨®pez se mantiene inalterable. El portero del Espanyol, a sus 39 a?os, demuestra que a¨²n le queda cuerda para rato y todo ligado al club perico. La entidad blanquiazul, este verano, no apost¨® por reforzar su porter¨ªa (tampoco se plante¨®) dado que Diego L¨®pez es intocable, ofrece garant¨ªas y se conf¨ªa ciegamente en ¨¦l. Es su sexta campa?a en la porter¨ªa del Espanyol y, partido a partido, demuestra que para ver el relevo a¨²n tocar¨¢ esperar.
Diego L¨®pez, adem¨¢s, ha arrancado la temporada a un nivel excepcional. Ante Osasuna y Villarreal mantuvo su porter¨ªa a cero y no fue hasta la jornada 3, contra el Mallorca, cuando recibi¨® su primer gol esta Liga. Eso s¨ª, tuvo intervenciones que evitaron que la derrota ante el conjunto bermell¨®n fuese m¨¢s abultada. El portero es indiscutible bajo palos y tiene la confianza de Vicente Moreno y la direcci¨®n deportiva. La edad es simplemente un n¨²mero que no afecta a un Diego L¨®pez que en el d¨ªa a d¨ªa demuestra la ilusi¨®n de un ni?o. De ah¨ª que la necesidad de buscar porteros en el mercado de fichajes no exista. Oier Olaz¨¢bal, que lleg¨® la pasada campa?a, vive a su sombra y s¨®lo ha podido disputar cinco encuentros con la camiseta blanquiazul: tres de Copa del Rey y dos en Segunda ante Cartagena y Ponferradina.
En el Espanyol es donde Diego L¨®pez ha echado m¨¢s ra¨ªces porque nunca antes hab¨ªa disfrutado de seis temporadas seguidas con minutos en un club de f¨²tbol. En el Villarreal, por ejemplo, estuvo cinco (de 2007 a 2012). Tras un a?o en Segunda, el portero gallego es feliz tras regresar a Primera con el Espanyol y busca seguir superando r¨¦cords. A escasos meses de cumplir los 40 a?os (naci¨® el 3 de noviembre de 1981) estar¨¢ entre los porteros m¨¢s longevos de la historia de LaLiga. Y suma 178 encuentros de blanquiazul. S¨®lo ¨¦l sabe d¨®nde est¨¢ su techo.