?Sigan a los buenos!

?S¨ªganme los buenos! Ese era el toque a rebato del Chapul¨ªn Colorado. En el f¨²tbol de hoy en d¨ªa lo mejor es gritar lo contrario: ?Sigan a los buenos! Por eso se paga lo que se paga por los cracks y por eso lleva todo el verano el Racing demostrando que es un equipo diferente cuando su estrella est¨¢ en el campo a cuando mira desde el banquillo. Hoy en El Sardinero, ya con tres puntos en juego, se vivi¨® lo mismo que en Lezama o contra el Numancia. Orden, trabajo, compromiso y f¨²tbol pastoso ante un rival, el Tudelano, igual de trabajador y disciplinado, que llevaba el duelo hacia el 0-0. Entr¨® Pablo Torre, aun con esguince de tobillo, y todos supimos que pod¨ªa pasar algo. Y pas¨®. Encontr¨® a otro de los jugadores diferenciales, Cedric, y se juntaron un gran pase con un gran tiro para empezar la Primera RFEF ganando.

?Y la verdad es que el partido empez¨® prometedor para el Racing, que en los primeros minutos monopoliz¨® el bal¨®n, percuti¨® por fuera con Soko y Camus repetidamente y encontr¨® por dentro a Manu Justo con el gatillo f¨¢cil. A los 2' ya remat¨® al palo un centro de Marco Camus desde la izquierda y tuvo otras dos ocasiones desde la forntal que remat¨® de primeras, aunque no encontr¨® porter¨ªa. Eso, en el primer cuarto de hora. A partir de ese momento, el Tudelano hizo acto de presencia en el partido, igual¨® la posesi¨®n y mejor¨® la presi¨®n, lo que hizo que en los de Romo hubiera m¨¢s pases hacia atr¨¢s que hacia adelante. De hecho, la ¨²nica sensaci¨®n de peligro se produc¨ªa ya en las contras, una de Soko que no lleg¨® a un pase profundo de Cedric, otra del nigeriano, que dud¨® entre tirar o pasar (y todav¨ªa no se sabe lo que hizo) y otra, ante la otra porter¨ªa, de Saman¨¦s, que chut¨® con veneno desde la frontal.

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Con el partido bastante parado, lo cierto es que la sensaci¨®n en todo momento era que el Racing estaba m¨¢s cerca de marcar que los de Javier Olaizola. Aunque no pisaran el ¨¢rea, a la grada llegaba la imagen de que los 22 protagonistas asum¨ªan que el Racing era mejor. El centro del campo elegido por Romo hizo exactamente lo que se pod¨ªa esperar de ¨¦l: Tienza dando solidez defensiva, Sergio Marcos ofreci¨¦ndose a sacar el bal¨®n desde atr¨¢s y Manu Justo filo ofensivo. Pero falt¨® f¨²tbol combinativo por dentro, chispa, ruptura de l¨ªneas. El equipo local apareci¨® s¨®lido en la Primera RFEF, pero Pellegrino, el portero del Tudelano, se fue al descanso sin haber tocado el bal¨®n con las manos.

Y la segunda mitad no arranc¨® diferente. El Tudelano esperando una contra y el Racing, previsible, tardando un mundo en llevar el bal¨®n de un ¨¢rea a otra. Manu Justo, adem¨¢s, se fue apagando y a los dos extremos les empezaba a faltar explosividad en el uno contra uno. Un cabezazo de Soko en un c¨®rner y poco m¨¢s hasta que a falta de media hora Romo no se aguant¨® m¨¢s y le pidi¨® a Pablo Torre, con esguince desde el s¨¢bado pasado, que saltara al campo por Manu Justo. No fue su mejor versi¨®n, pero ya empez¨® a aparecer por aqu¨ª y por all¨¢ y a Olaizola le empez¨® a apretar el cuello de la camisa. En el 83' tuvo Soko la m¨¢s clara del partido, cruzando al tercer palo una volea que empalm¨®, solo, ganando la espalda de los defensas.

La acci¨®n definitiva tuvo bastante de trabajo colectivo, es cierto, empezando por la presi¨®n de Cedric en la salida del bal¨®n, la ayuda de los centrocampistas y de Bustos, pero la clave estuvo en un pase filtrado a la espalda de los centrales y Cedric, que se entiende de maravilla del de Soto de la Marina pudo relamerse ante la posibilidad de enchufar el remate especialidad de la casa, una banana con la izquierda, desde la frontal al hierro a la derecha del portero. Golazo. Tres puntos. Todos contentos, menos los del Tudelano, que se dejaron la piel para empatar y que ve¨ªan con un punto en el autob¨²s. No hubiera sido injusto, como tampoco lo fue la victoria local, que hizo m¨¢s por ganar.

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