C¨®mo son los rivales del Bar?a: Bayern, Benfica y Dinamo Kiev
Dur¨ªsimo rival el Bayern de Nagelsmann para el Bar?a. Lewandowski sigue a lo suyo. El Benfica est¨¢ liderado por Rafa Silva y el Dinamo de Lucescu pone la nota amable.


Bayern M¨²nich
El coloso Bayern, intratable en la Bundesliga, enemigo feroz en la Champions, asoma como un rival temible. Aunque la temporada pasada se vio a un equipo m¨¢s terrenal, le dio tiempo para completar el Sextete y caer solo en una eliminatoria bell¨ªsima de Champions contra el PSG. Se ha ido Flick por voluntad propia y ha llegado Nagelsmann, el entrenador entre los j¨®venes m¨¢s caro y singular. Su prop¨®sito es abrir un peque?o per¨ªodo de transici¨®n de cara al futuro que no le aleje del ¨¦xito en el presente. Es un t¨¦cnico indescifrable, vers¨¢til en los dibujos ¡ªpor ahora mantiene el 1-4-2-3-1 de Flick, aunque contra el Colonia prob¨® con una salida de tres centrales¡ª e intervencionista.
La Champions es territorio del Bayern y la gran causa de su hegemon¨ªa absoluta en el f¨²tbol alem¨¢n. Por Europa se explica su autoridad dom¨¦stica. No tiene rival real como demostr¨® en la Supercopa ante el Dortmund (1-3), el primer ¨¦xito del curso. Hasta el momento, Nagelsmann ha tocado muy poco. El adi¨®s de Alaba y Boateng se arregl¨® con el desigual Upamecano, capaz de lo mejor y lo peor. A la espera de un centrocampista, adem¨¢s de la polivalencia de Musiala, que pueda dar un respiro a Kimmich y G?retzka, el esqueleto futbol¨ªstico del Bayern se conserva desde tiempo atr¨¢s. Juega a un ritmo elevad¨ªsimo e impone una presi¨®n asfixiante sobre el contrario. Sus amplios registros, que mezclan la claridad en los ataques posicionales con el v¨¦rtigo en las contras, le convierten en un peligro constante. La inteligencia espacial de M¨¹ller y la credibilidad goleadora de Lewandowski espolean una ofensiva con tanto desborde y profundidad como tienen Gnabry, Coman o San¨¦. O la llegada que aporta G?retzka. Con Kimmich como director de orquesta, su posesi¨®n es fluida y veloz, dif¨ªcil de contrarrestar. Los cambios de orientaci¨®n y env¨ªos entre l¨ªneas dotan de sentido al f¨²tbol b¨¢varo, tambi¨¦n potente en las jugadas de estrategia.

La principal fortaleza del Bayern puede ser, a su vez, su principal debilidad. Queda muy expuesto si no logra recuperar en la presi¨®n. La l¨ªnea defensiva est¨¢ muy adelantada y a su espalda hay muchos metros para correr. Upamecano y S¨¹le sufren en este contexto. Se le puede hacer da?o en transici¨®n, con alguna duda en los laterales donde ha empezado jugando Stanisic (21 a?os) por la lesi¨®n de Pavard y donde Davies anda lejos de su primera gran versi¨®n. Todos conceden demasiado atr¨¢s y no fijan las marcas en el ¨¢rea. Sin embargo, superar a Neuer nunca es una tarea sencilla. Su inicio de curso le eleva de nuevo. Es el muro final del Bayern, que cada vez que puede se encarga de recordar su verdadera etiqueta de favorito.
Estrella: Lewandowski (33 a?os)
Benfica
Entre la m¨¢xima agon¨ªa, con un h¨¦roe como Vlachodimos, el Benfica firm¨® un ejercicio de resistencia heroico para aguantar con un hombre menos al PSV en Eindhoven y certificar su presencia en la fase de grupos. Llega a la misma tras acabar tercero en Portugal y dejar en la cuneta al Spartak de Mosc¨² y al propio PSV en el playoff. El Benfica es un cl¨¢sico de Europa, cuyo nombre apela a la nostalgia de la m¨¢xima competici¨®n, dos veces campe¨®n en los inicios de los a?os sesenta. Pero en sus tres ¨²ltimas apariciones, que datan entre 2017 y 2020, fue incapaz de abrirse paso a los octavos de final pese a afrontar una primera fase accesible. Su influencia pasada todav¨ªa luce en su orgullo competitivo y se permite mirar el presente con cierto optimismo. Por ahora cuenta por triunfos su concurso en el torneo local.

Bajo la direcci¨®n del ilustre Jorge Jesus, el Benfica es un equipo organizado, con variantes t¨¢cticas distintas y amenazante en la estrategia. Viene jugando con tres centrales, pero en cualquier momento puede retomar la defensa de cuatro. Su plantilla est¨¢ engrosada por futbolistas de mayor categor¨ªa de lo que la liga portuguesa exige. El talento de Grimaldo como carrilero o la inteligencia y clase t¨¦cnica de Rafa Silva como interior tendr¨ªan espacio en equipos de otra esfera futbol¨ªstica. Con un doble pivote que combina criterio y estabilidad en las figuras de Weigl y Jo?o M¨¢rio, m¨¢s Meite (fichado del Torino) a la espera, el Benfica tiene alternativas en la creaci¨®n, contenci¨®n y llegada. Weigl conecta bien con Pizzi, Rafa Silva o Everton entre l¨ªneas, pero deber¨ªa limitar ciertas p¨¦rdidas m¨¢s habituales de lo deseable. Arriba disfruta de delanteros de jerarqu¨ªa. A Seferovic (lesionado este agosto), Carlos Vinicius y Darwin N¨²?ez se ha a?adido Yaremchuk, ex del Gent que deleit¨® en la Eurocopa con Ucrania. En el otro lado del campo, Jorge Jesus mueve a los centrales. Tiene para elegir. Desde la experiencia de Otamendi y Vertonghen a la en¨¦rgica irrupci¨®n de Morato, que se gan¨® la fama en la Youth League. Lucas Ver¨ªssimo puede ser su central m¨¢s completo, pero la absurda expulsi¨®n contra el PSV le deja en mal lugar. Suerte para el club lisboeta que el inspirad¨ªsimo Vlachodimos lo par¨® todo.
Estrella: Rafa Silva (28 a?os)
Dinamo Kiev
A la sombra del Shakhtar las ¨²ltimas temporadas, el Dinamo de Kiev logr¨® el t¨ªtulo de liga en Ucrania cinco a?os despu¨¦s. Sin Lucescu nunca se hubiera producido. A sus 76 a?os, mito viviente de los banquillos, nada se le escapa y mantiene intacta una ilusi¨®n por el f¨²tbol que contagia a sus jugadores. Es la clave de este Dinamo, que es cierto que pierde fuelle fuera de sus fronteras. Sin ir m¨¢s lejos, el ¨²ltimo a?o no dej¨® una buena imagen en una fase de grupos en la que ya coincidi¨® con el Barcelona y tampoco en la eliminatoria posterior de Europa League ante el Villarreal. Sali¨® goleado en ambas instancias.

Lucescu no se aparta de su 1-4-4-2 o 1-4-2-3-1 tradicional. Da valor al jugador ucraniano. No obstante, hasta nueve integrantes de este Dinamo disputaron la Eurocopa con la selecci¨®n de Shevchenko. Es un equipo alegre, quiz¨¢ demasiado para permanecer en la Champions. Con futbolistas din¨¢micos y de se?alada calidad, como es el caso de Shaparenko, Tsygankov o el mediapunta Buyalskyi (cuatro goles en los cinco primeros partidos de Liga), amenaza por dentro y por fuera, sin miedo a verse comprometido despu¨¦s. Intenta ser un bloque pegajoso, con las l¨ªneas unidas, pero no lo consigue tantas veces como le gustar¨ªa. Se le ven las costuras con frecuencia. Bushchan, que cuaj¨® una buena Eurocopa, guarda la porter¨ªa. Ahora est¨¢ lesionado, pero deber¨ªa estar listo para el inicio europeo. La l¨ªnea defensiva, con tres nombres interesantes por su juventud como son Zabarnyi (18 a?os), Syrota (21) y Mykolenko (22), admite poco debate para Lucescu tras la grave lesi¨®n de Popov, al igual que la medular con el capit¨¢n Sydorchuk y Shaparenko. Tsygankov act¨²a en la derecha a pierna cambiada y Garmash acompa?a a Buyalskyi con el permiso del lesionado Supryaga. La ¨²nica posici¨®n que suele variar es la banda izquierda donde entran Rodrigues, Carlos de Pena (ex del Oviedo) o Antyukh. En realidad, el Dinamo puede presumir de una buena camada de jugadores interesantes, pero los precedentes le auguran un corto recorrido en la Champions. Ser¨ªa una pena por Lucescu.
Estrella: Tsygankov (23 a?os)