Fiasco en la operaci¨®n salida
El Bar?a, incapaz de colocar a Umtiti y Coutinho, regala por Italia a Miralem Pjanic. Mateu Alemany no ha sido capaz de dar salida a los dos primeros.
A falta de oficialidad, y utilizando ligeros eufemismos, puede decirse que Mateu Alemany, mano derecha de Laporta, no ha sido capaz de completar con ¨¦xito su primer trabajo como director de f¨²tbol del Bar?a. La rebaja de sueldo de capitanes era una cuesti¨®n sentimental, pero, en lo ejecutivo, no ha dado salida a Umtiti ni Coutinho. Y la de Pjanic, que parece encaminada, tampoco est¨¢ resuelta. Y si se cierra, ser¨¢ regalada.
El caso de Umtiti es abracadabrante. El Bar?a se refugi¨® extraoficialmente ayer en dos argumentos. Primero, le ech¨® la culpa a Bartomeu por su famosa e imprudente ampliaci¨®n de contrato. Segundo, y m¨¢s sorprendente, se agarr¨® off the record a que el jugador ha tocado la fibra de Laporta. Umtiti le ha contado al nuevo presidente que ha sufrido mucho estos meses. En el vestuario del Bar?a eso nunca va a recibirse bien. Umtiti, campe¨®n del mundo y jugador ya veterano, se tir¨® al callej¨®n el verano pasado. Antes de Lisboa, y despu¨¦s de dejar una imagen p¨¦sima en alg¨²n partido de Liga (Vigo), dijo que no pensaba jugar m¨¢s. Y no lo hizo. Laporta le ha comprado su historia de sufrimiento, pero en la caseta tendr¨¢ que demostrar algo m¨¢s para resultar cre¨ªble. De momento, y como Mateu Alemany encontr¨® poco m¨¢s que un ofrecimiento al Olympique de Marsella en el que el Bar?a tiene algunos amigos, Umtiti se queda en lo que representa un tremendo fracaso del club. El representante de Samuel Umtiti es Arturo Canales, que mantiene buenos negocios con uno de los cuatro capitanes del club que se ha bajado la ficha, Gerard Piqu¨¦.
El segundo caso grave es el de Philippe Coutinho. El brasile?o, que termina de recuperarse de su lesi¨®n, ha sido protegido por Ronald Koeman, que ha anunciado que cuenta con ¨¦l aunque, obviamente, el Bar?a no quer¨ªa a Coutinho. Pero Alemany no le ha encontrado un destino. Son sus dos grandes fracasos. Podr¨ªa haber un tercero, pero ser¨ªa demasiado. Pjanic tiene su cartel en Italia y el Bar?a lo regalar¨¢ con una cesi¨®n.