El PSG, una prisi¨®n de oro
Mbapp¨¦ sufre ahora la cerraz¨®n del club parisino que ya padecieron Rabiot, Neymar, Marquinhos, Verratti, Thiago Silva... Con el PSG, las posturas de fuerza no valen.
Kylian Mbapp¨¦ ya se vio cara a cara con Nasser-Al Khela?fi, presidente del PSG, y le transmiti¨® que su decisi¨®n es la de no renovar su contrato con el equipo parisino, a la vez que le solicit¨® que se siente a negociar con el Real Madrid para tratar de pactar un traspaso este mismo verano, un a?o antes de que finalice su vinculaci¨®n con el PSG, en junio de 2022, cuando podr¨¢ irse libre. Sin embargo, Mbapp¨¦ se encontr¨® lo que en buena medida ya se esperaba: una negativa del PSG a ponerle precio, emplaz¨¢ndole a cumplir su a?o de contrato, en el cual presionar¨¢ para que firme una extensi¨®n del mismo.?
Mbapp¨¦ es el caso m¨¢s actual, pero ni por asomo es el ¨²nico: el PSG se viene distinguiendo, desde que en 2012 la familia real de Qatar se hiciese con el control total del club, por su cerraz¨®n a la hora de valorar las peticiones de los jugadores que quieren salir, siempre que sean futbolistas importantes para la jerarqu¨ªa del PSG. El mismo trago que tiene que pasar ahora Mbapp¨¦ ya lo sufrieron en su momento Rabiot, Verratti, Neymar, Marquinhos... Son varios los casos, lo que llev¨® a Donato di Campli, exagente de Verratti, a decir en una entrevista, en relaci¨®n a las intenciones de Neymar de regresar al Barcelona en 2018: "Es imposible, los jugadores est¨¢n arrestados en una prisi¨®n de oro". Algunos reos siguen entre las doradas rejas del Parque de los Pr¨ªncipes; otros lograron escapar, aunque tuvieron que pagar un alto precio.
Neymar
El caso del brasile?o con el Barcelona se repiti¨® en los verano de 2018 y 2019: en el primero, el PSG se neg¨® en redondo a ponerle precio; en el ¨²ltimo s¨ª estaba interesado a liberar esa ficha, a la vista de la escasa integraci¨®n del jugador en el vestuario, pero el Barcelona ya empezaba a atravesar apuros econ¨®micos, pese a lo cual lleg¨® a efectuar una oferta de 110 millones, Todibo, Rakitic y la cesi¨®n de Demb¨¦l¨¦. El PSG pidi¨® que el pago fuese de 130 millones y no se lleg¨® a un acuerdo, pero el Barcelona utiliz¨® ese viaje para darle la m¨¢xima publicidad, con la intenci¨®n de que Messi, por entonces pendiente de renovar, viese que hac¨ªan lo posible por reunirle con su amigo de nuevo en la Ciudad Condal.
Neymar se hab¨ªa ido en 2017 a Par¨ªs tras el pago de la cl¨¢usula de rescisi¨®n, de 222 millones de euros. El golpe de efecto fue entendido como una venganza por parte del PSG tras los repetidos intentos del Bar?a de firmar a Verratti ese mismo verano y tambi¨¦n en ocasiones pasadas. Un a?o despu¨¦s, el brasile?o deseaba salir de Par¨ªs y el Barcelona pregunt¨®, pero no hubo manera; tambi¨¦n el Madrid se interes¨® y recibi¨® la misma respuesta. Con su reciente renovaci¨®n hasta 2025 y mucho m¨¢s asentado en el vestuario (le han rodeado con amigos como Messi, Di Mar¨ªa, Paredes, Keylor, Icardi...), Neymar ya sabe que cerrar¨¢ su carrera al m¨¢ximo nivel en Par¨ªs.
Verratti
El inter¨¦s del Barcelona en Verratti es viejo, desde que empez¨® a destacar en Par¨ªs se le vio como el relevo ideal de Xavi Hern¨¢ndez para la medular cul¨¦. Hubo varios acercamientos, pero el principal lleg¨® en el verano de 2017, en el que el jugador y su entonces agente, Donato di Campli, transmitieron al club que quer¨ªan irse y que el Barcelona pagar¨ªa el traspaso que pidiese el PSG.?
Al-Khela?fi y el entonces director deportivo, Antero Henrique, tomaron las intenciones del italiano como una afrenta al modelo del PSG, culparon al agente de todo el asunto y forzaron a Verratti a abandonarle para que terminase firmando con Mino Raiola, agente de Ibrahimovic, uno de los primeros cracks que llegaron a Par¨ªs tras la entrada de Qatar en el accionariado.
Di Campli estall¨® en una entrevista: "Marco se ha convertido en un prisionero del emir de Qatar. No querer traspasarle por 100 millones es una cuesti¨®n de orgullo". Aquello aviv¨® mucho m¨¢s el fuego y Verratti se vio obligado a salir a disculparse: "Me disculpo por esas declaraciones, que no son mis pensamientos; y espero que no vuelvan a pasar cosas as¨ª". Poco despu¨¦s Verratti dej¨® a Di Campli, firm¨® con Raiola y dos a?os despu¨¦s, renov¨® hasta 2024. Con esa excusa, el PSG se lanz¨® al fichaje de Neymar, por el que pag¨® la cifra r¨¦cord de 222 millones. El peque?o medio de Pescara sirvi¨® para dar ejemplo de lo que te pod¨ªa pasar si intentas jug¨¢rsela al PSG.
Rabiot
El centrocampista franc¨¦s es el vivo ejemplo de lo que cuesta salir del PSG. En el verano de 2018, Rabiot encaraba su ¨²ltimo a?o de contrato con las negociaciones para renovar paradas. Meses antes, hab¨ªa trascendido un encontronazo en el entrenamiento en el que el franc¨¦s carg¨® contra Neymar y su gran salario: "S¨®lo hay para ¨¦l. Deber¨ªa jugar ¨¦l solo". No era el primer conflicto en que se met¨ªa el brasile?o, que ese curso protagoniz¨® un desagradable incidente con Cavani por ver qui¨¦n lanzaba los penaltis.?
As¨ª, se lleg¨® al final de 2018 sin renovaci¨®n a la vista y el PSG opt¨® por una decisi¨®n ejemplarizante: mand¨® a Rabiot a la grada. As¨ª lo explic¨® Antero Henrique, entonces director deportivo del PSG: "No hay m¨¢s negociaciones. El jugador me inform¨® de que no firmar¨ªa un contrato y de que quer¨ªa dejar el club siendo libre al final de la temporada, es decir, al final de su contrato. Para el jugador, esto tendr¨¢ una consecuencia muy clara: permanecer¨¢ en el banquillo por un per¨ªodo indefinido.?Parece que el jugador y su representante nos han enga?ado durante varios meses. Debo agregar que esta situaci¨®n es una falta de respeto tanto para el club como para los fans. Especialmente de un jugador que ha jugado bajo nuestros colores desde el f¨²tbol base hasta el primer equipo".
La versi¨®n del PSG siempre estuvo sustentada en que Rabiot y su madre y representante dieron esperanzas de renovaci¨®n al club para, a seis meses del final, cambiar radicalmente. El 11 de diciembre de 2018, jug¨® sus ¨²ltimos minutos con el PSG, en Champions ante el Estrella Roja; no volvi¨® a entrar en una convocatoria, vio el resto del curso desde la grada y en junio firm¨® por la Juventus de Cristiano Ronaldo, donde contin¨²a jugando.
Marquinhos
Lo del Barcelona buscando un central de garant¨ªas ven¨ªa siendo una constante tras la retirada de Puyol y durante el curso 2015-16 el club cul¨¦ puso todas sus energ¨ªas en sacar a Marquinhos del PSG. Ya hab¨ªa intentado tocarle antes (lo pudo fichar cuando jugaba en Brasil, por tres millones, pero Zubizarreta lo rechaz¨®), cuando estaba a la sombra de Thiago Silva y David Luiz, pero ese curso se hizo con la titularidad sin paliativos, lo que dificult¨® a¨²n m¨¢s la operaci¨®n. El jugador, en cualquier caso, no la ve¨ªa con malos ojos: "En junio reflexionar¨¦", dec¨ªa all¨¢ por marzo de 2016.
Como en otros tantos casos, el PSG no quiso saber nada del Barcelona y no se sent¨® a negociar el traspaso del brasile?o. El propio Marquinhos se neg¨® a forzar su salida, sabedor de que s¨®lo pod¨ªa empeorar las cosas. Al mismo tiempo, el PSG empez¨® a negociar con ¨¦l una renovaci¨®n que ver¨ªa la luz en julio de 2017, hasta 2022 y con una buena subida de salario. Y el Barcelona desisti¨® y firm¨® a Umtiti, desde el Lyon.
Thiago Silva
El central brasile?o fue el primer gran objetivo que el Barcelona persigui¨® en el PSG, y tambi¨¦n fue la primera vez que se dio de bruces con la nueva realidad del f¨²tbol europeo. Thiago ya era un objetivo del Bar?a cuando jugaba en Mil¨¢n, pero el PSG se lo llev¨® en 2012 pagando 40 millones.
Tanto en 2013 como en 2014, especialmente en el segundo caso, el club dirigido ya por Josep Mar¨ªa Bartomeu hizo ofertas constantes al PSG para intentar que liberasen al brasile?o, poniendo sobre la mesa 50 millones, pero todas recibieron silencio por respuesta. Thiago Silva estaba por la labor de jugar en Barce?ona, pero Al-Khela?fi no dio opciones: "No tiene precio". Y no lo tuvo.