Ancelotti: un fichaje por el Madrid 'gracias' a su amor al Milan

Que Carlo Ancelotti es un hombre con principios y con valores es algo que no se le escapa a nadie en la llamada elite del f¨²tbol europeo, donde todos se conocen. AS ha tenido acceso a una prueba m¨¢s de ello al conocer que hace dos semanas, una vez consumada la marcha voluntaria de Antonio Conte del Inter, el club neroazzurro decidi¨® llamar a Ancelotti para ofrecerle su banquillo. Carlo no se neg¨® aludiendo al argumento m¨¢s f¨¢cil (¡°tengo tres a?os de contrato con el Everton¡±), sino a algo m¨¢s puramente emocional.

El hombre de la D¨¦cima respondi¨® a los emisarios del Inter que no pod¨ªa aceptar su propuesta ¡°porque yo me hice jugador de equipo grande en el Milan y me debo a sus tifosi. No puedo traicionarles¡±. Esa pasi¨®n por el club rossonero (donde conquist¨® 9 t¨ªtulos como jugador y 8 como entrenador, entre ellas dos Champions) es la que, sin darse cuenta en ese momento, iba a permitirle cumplir d¨ªas despu¨¦s su sue?o de poder regresar al Real Madrid.

Ancelotti siempre ha reconocido entre sus personas de m¨¢xima confianza que el Milan y el Madrid son los dos clubes que m¨¢s le han marcado en su carrera. Por eso, cuando el pasado s¨¢bado Jos¨¦ Angel S¨¢nchez, director general del club banco, le llam¨® a Liverpool para saber de su disponibilidad para retornar al banquillo que ocup¨® con ¨¦xito entre 2013 y 2015, no dud¨® ni un segundo en responder ¡°s¨ª¡±. Llam¨® a sus superiores del Everton y les explic¨® que, a pesar de tener contrato hasta 2024, era una oportunidad ¨²nica en su vida. Los toffees entendieron su deseo, le liberaron y ahora cubrir¨¢n su hueco con Nuno Espirito Santo, que en los Wolves ha hecho un gran trabajo estos ¨²ltimos a?os.

Ancelotti es un hombre que se mueve por emociones y sensaciones, no por dinero. Por eso acept¨® la oferta del Madrid a pesar de ver rebajada su ficha casi a la mitad. En el Madrid encontr¨® en su primera etapa la felicidad profesional y personal. Lo dem¨¢s queda para ¨¦l en segundo plano. Su amor al Milan le abri¨® la puerta de su otro amor futbol¨ªstico, el del Bernab¨¦u. Carlo, genio y figura.