FINAL COPA DE FRANCIA | M?NACO 0-PSG 2
Mbapp¨¦ aniquila al M¨®naco
Un gol y una asistencia del internacional franc¨¦s le dieron la Copa de Francia al PSG ante un M¨®naco que apenas dio batalla y que acab¨® sucumbiendo holgadamente.
El PSG se proclam¨® campe¨®n de la Copa de Francia tras vencer por 2-0 a un d¨¦bil M¨®naco que solo intimid¨® a Keylor Navas con un centro-chut de Gelson Martins que acab¨® en el larguero. Es el segundo t¨ªtulo de Pochettino esta temporada, tras la Supercopa cosechada ante el Marsella en enero. Mbapp¨¦ volvi¨® a ser la estrella del encuentro, asistiendo a Icardi en el 1-0 y marcando el 2-0 con una facilidad extraordinaria.
Se enfrentaban en el Stade France los dos grandes ricos del f¨²tbol franc¨¦s en la ¨²ltima d¨¦cada, PSG y M¨®naco, una final trascendental, sobre todo para Pochettino, que pod¨ªa perder hoy un t¨ªtulo y el domingo otro ante el Lille en la Ligue 1. El argentino, sin Neymar por sanci¨®n, aline¨® a Mbapp¨¦, Icardi y Di Mar¨ªa en ataque.
Sin ser una primera mitad para tirar cohetes, el PSG control¨® al M¨®naco durante los primeros 45 minutos. Aunque la disposici¨®n t¨¢ctica de los de Kovac en los compases iniciales incomod¨® a los parisinos, no fue suficiente para llegar o tan siquiera probar a Keylor Navas. Las finales son detalles y Mbapp¨¦ lo sab¨ªa perfectamente.
El internacional franc¨¦s aprovech¨® un error flagrante de Disasi en salida de bal¨®n para asistir a Icardi en el 1-0 del PSG. Fue la primera llegada del encuentro, pero suficiente como para ser decisiva. El M¨®naco, que estaba bien plantado en el terreno de juego, entr¨® en un bucle de errores del que no sali¨® antes del descanso.
Obligado a reaccionar, Kovac dio entrada en la segunda parte a Gelson Martins, Diatta y Cesc en el tramo final para intentar revertir el encuentro. Sin embargo, el juego del M¨®naco segu¨ªa siendo plomizo, incapaz de encontrar espacios ante un PSG encantado con el resultado y con el flojo ritmo del partido. Gelson Martins avis¨® con un centrochut que acab¨® estrell¨¢ndose en el larguero, pero fue un espejismo, ya que Mbapp¨¦ volvi¨® a oler la sangre y sentenci¨® el partido con un gran gol de la izquierda, no sin antes estar a punto de hacer uno de los goles de la noche con una vaselina de bella factura.