El Real Madrid echa fuego
El arbitraje de Munuera Montero en el 2-2 ante el Sevilla indigna al club blanco. "Verg¨¹enza", es la palabra que retumba en el vestuario. La entidad viene molesta desde el ¨²ltimo Derbi...
"Verg¨¹enza". La palabra retumba en el vestuario del Real Madrid. El club, Zidane y los futbolistas blancos terminaron el 2-2 ante el Sevilla en un mar de indignaci¨®n por el arbitraje de Mart¨ªnez Munuera. El ¨²ltimo agravio, piensa el Madrid, en una tendencia de errores o criterios muy discutibles en acciones clave en tres pinchazos ligueros muy recientes: el fuera de juego de Mariano en el 0-0 en Getafe, que el VAR no revisara una mano de Emerson en el 0-0 contra el Betis y las dos manos de esta ¨²ltima jornada, una en cada ¨¢rea... pero donde s¨®lo se castig¨® como penalti la de Militao.
Fue la culminaci¨®n de un malestar que viene creciendo en el Madrid desde el ¨²ltimo Derbi (1-1) y la famosa mano del rojiblanco Felipe no considerada como penalti, aquella tarde, por Hern¨¢ndez Hern¨¢ndez. El club, de puertas adentro, no entend¨ªa la diferencia de criterio y se pensaba qu¨¦ pasar¨ªa en una acci¨®n similar en su propia ¨¢rea. La mano accidental de Militao, de espaldas a la pelota, les sac¨® de la duda justo cuando la Liga est¨¢ m¨¢s al rojo vivo.
Una noche muy caliente que empez¨® en el propio terreno de juego. La imagen de Toni Kroos y Zidane, probablemente dos de los m¨¢s fr¨ªos y con autocontrol en su relaci¨®n con los ¨¢rbitros, acudiendo al encuentro de Mart¨ªnez Munuera para buscar explicaciones habla por s¨ª misma. "No me convenci¨®", asegur¨® sin empacho el t¨¦cnico franc¨¦s a posteriori. "Necesitamos que nos aclaren las reglas que se aplican en las manos". "Es una acci¨®n decisiva que nos aleja de la Liga", fue la queja despu¨¦s de Marco Asensio casi al mismo tiempo que su entrenador. El equipo se march¨® del Di St¨¦fano echando humo.
Florentino no se lo pod¨ªa creer
El malestar en la c¨²pula del club es importante. Va de abajo hacia arriba. Ni siquiera Butrague?o, generalmente cordial, puede sostenerse.? El portavoz institucional aludi¨® directamente al criterio arbitral con las manos. "Nos inquieta", dijo, sutilmente. Cuando el colegiado se?al¨® el punto de penalti en el ¨¢rea blanca por esa acci¨®n de Militao (en directo, la jugada hab¨ªa terminado con Benzema derribado en el ¨¢rea sevillista) ni Florentino P¨¦rez se lo crey¨® en el mismo palco de honor. El presidente blanco levant¨® los brazos en signo inequ¨ªvoco e universal de incredulidad. Carvajal y Ramos, ausentes por lesi¨®n y term¨®metros del sentir del vestuario, tampoco daban cr¨¦dito...
Es el ¨²ltimo episodio en una temporada donde en el Madrid no ha dejado de asombrar la desigualdad en el ratio de penaltis a favor y en contra sufrido por el equipo de Zidane. Tampoco noches como la del 1-2 del Alav¨¦s en el Di St¨¦fano, cuando ni siquiera se pit¨® penalti en un clamoroso agarr¨®n de pelo de Laguardia a Marcelo. Puntos y m¨¢s puntos que se han ido esfumando. De puertas hacia fuera se insiste en que quedan a¨²n tres partidos, pero el enfado es may¨²sculo.