Sandro da vida al Huesca y ajusticia a una pobre Real
El canario, exrealista, decidi¨® al final con una falta lateral que Aritz Elustondo se meti¨® en su porter¨ªa. Gol falta para la Real. Los oscenses respiran. Los realistas suspiran.
Ten¨ªa que pasar. Toda la semana recordando en San Sebasti¨¢n que Sandro no fue capaz de marcar un solo gol cuando estaba en la Real. Y tanto mentar a la bicha que al final... pues al final el canario te ajusticia. Su gol de falta, con la colaboraci¨®n inestimable de la zaga realista, da vida a un Huesca que respira y saca la cabeza de los puestos de peligro con esta victoria en El Alcoraz por la m¨ªnima. Victoria justa a tenor de las intenciones que pusieron unos y otros, porque el cuadro altoaragon¨¦s puso m¨¢s sobre el terreno de juego, pero le falt¨® rematar su faena, y la Real... pues no fue la Real. Se pareci¨® poco a lo que nos tiene acostumbrados. No se le puede negar pelea y actitud, pero su f¨²tbol brill¨® por su ausencia, porque el Huesca le quit¨® el bal¨®n, y as¨ª la Real tiene menos alegr¨ªa.
El partido se jug¨® m¨¢s a lo que quiso el equipo de Pacheta, y aunque el gol lleg¨® cuando parec¨ªa que mejor estaban los realistas, que hab¨ªan ido creciendo, la realidad es que los oscenses creyeron en sus opciones, y el premio les lleg¨® al final. Un gol de Sandro que puede valer su peso en oro y que puede ser clave, en la lucha por el descenso y por Europa. Porque la Real deja pasar una oportunidad fundamental para seguir metiendo tierra de por medio con sus rivales directos.
En la primera parte, fue el Huesca quien puso por sorpresa el f¨²tbol, y la Real Sociedad la que se limit¨® a defender bien ordenada, esperando a buscar su oportunidad a la contra. Empezaron mejor los donostiarras, con una buena acci¨®n de Oyarzabal, frustrada por ?lvaro Fern¨¢ndez, que tambi¨¦n evit¨® el rechace posterior de Isak. El sueco tuvo la otra buena ocasi¨®n de la Real antes del descanso. Un fuerte disparo dentro del ¨¢rea algo esquinado bien atajado tambi¨¦n por el meta local. Y hasta ah¨ª lo ¨²nico del equipo txuri-urdin en ataque. Porque el protagonismo fue del Huesca, que le arrebat¨® la pelota y busc¨® m¨¢s la porter¨ªa de Remiro, aunque le faltaron ocasiones claras. La mejor la tuvo Rafa Mir, una mano a mano que le sac¨® Remiro, que estuvo inmenso para mantener a la Real en partido. Porque la presi¨®n, intensidad y fuerza del equipo de El Alcoraz desarbolaron por completo a los de Alguacil, a los que les han quitado el f¨²tbol y se lo han cambiado por un buen esfuerzo defensivo, aunque solo con eso no se puede pensar en sacar algo de casa de un Huesca al que le iva la vida en el envite.
Tras el descanso, el gui¨®n no cambi¨® nada. La Real sigui¨® con su gui¨®n contemplativo, mientras el el equipo de Pacheta pon¨ªa m¨¢s intenci¨®n a cada una de sus acciones. Rafa Mir y Sandro merodeaban con peligrosas intenciones, mientras Remiro se apuraba en sacar adelante las llegadas de los oscenses. Con el paso de los minutos, la Real se fue asentando y defendiendo m¨¢s arriba, quiz¨¢ tambi¨¦n porque el ¨ªmpetu local disminu¨ªa. Sali¨® Silva y al Huesca le entr¨® un poco de canguelo. Los donostiarras lo aprovecharon y crecieron en el partido, pero les faltaba precisi¨®n en los ¨²ltimos metros. Solo Barrenetxea parec¨ªa estar enchufado. Demasiado poco. Isak tuvo alg¨²n, pero se march¨® in¨¦dito y un poco desesperado. El sueco apenas tuvo incidencia en el partido, Siovas y Pulido le ganaron totalmente la partida. Portu cambi¨® de banda y sigui¨® siendo como un molesto mosc¨®n, pero parec¨ªa que jugaba precipitado.
Pacheta hizo cambios para aguantar un empate que le serv¨ªa de poco. Y cuando parec¨ªa que todos se conformaban con un 0-0 pobre e insuficiente para ambos, lleg¨® Sandro. No marc¨® ning¨²n gol cuando estuvo en la Real, pero le ajustici¨® sin piedad en El Alcoraz, y sobre todo dio vida a un Huesca que duerme fuera del descenso. Su falta lateral, por una clara mano de Zaldua, la sac¨® con mucha intenci¨®n y veneno. Era muy dif¨ªcil de defender, para la zaga y el portero. Y pas¨® lo que se ve¨ªa venir. Elustondo le dio con la cabeza intentando despejar, y en su intento despist¨® a Remiro, que nada pudo hacer, y el bal¨®n se met¨ªa en la porter¨ªa realista. Los jugadores de la Real se quejaron a Mateu Lahoz de que Mir pod¨ªa interferir en la visi¨®n de Remiro, porque estaba Justo delante; pero al tocar el bal¨®n un realista eso ya invalida la acci¨®n, seg¨²n dice el reglamento. As¨ª que el VAR no necesitaba entrar a corregir al colegiado. Gol vital para el Huesca. Gol falta para la Real. Los oscenses respiran. Los realistas suspiran.