Yilmaz destroza a Holanda
Hat-trick del delantero del Lille que facilit¨® la victoria de Turqu¨ªa ante una selecci¨®n holandesa que s¨®lo reaccion¨® al final, cuando ya perd¨ªa 3-0.
Qu¨¦ dura es la vida sin Van Dijk. Que se lo digan a J¨¹rgen Klopp, que desde la lesi¨®n de su central estrella ha tenido que hacer verdaderos sudokus para intentar suplir su ausencia sin ¨¦xito. El Liverpool es un equipo con Virgil y otro, peor, sin ¨¦l. A Holanda le pasa lo mismo. De Ligt no es el mismo sin su tutela, las l¨ªneas de presi¨®n no son tan altas en un equipo dise?ado para robar en campo contrario y el poder¨ªo a¨¦reo queda disminuido en las dos ¨¢reas. La Oranje, aun as¨ª, intent¨® ser fiel todo el tiempo que pudo a sus principios de posesi¨®n y velocidad, pero la manta se le qued¨® corta por los pies ante una gran Turqu¨ªa que tiene mucho que decir en esta fase de clasificaci¨®n.
Y es que la nueva Turqu¨ªa de Gunes tiene razones para so?ar con Qatar. Liderada por un Calhanoglu que ha renacido en el Milan y por los tres mosqueteros del Lille (Celik, Yilmaz y Yazici) Turqu¨ªa es un equipo que apuesta m¨¢s por el talento que por la garra que hist¨®ricamente le ha caracterizado sin olvidar esa pasi¨®n turca tan propia de sus ra¨ªces. Los otomanos supieron siempre d¨®nde hacer da?o a Holanda, buscando continuamente la zona interior derecha de su ataque, la que sol¨ªa cubrir Van Dijk, y antes del descanso ya mandaba claramente en el marcador gracias a un doblete de Yilmaz. El primero, extra?o de explicar, lleg¨® con un tiro de exterior desde fuera del ¨¢rea en el que Cillessen debi¨® decir algo m¨¢s. Un penalti evitable de Malen a Yokuslu supuso el segundo.
En la primera jugada de la segunda parte pareci¨® acabar el partido. Calhanoglu, por el mismo carril en el que los turcos llevaban haciendo da?o todo el partido, encontr¨® todas las facilidades para acomodarse el bal¨®n y sacar un latigazo que se col¨® pegado al palo izquierdo de Cillessen. Ya con todo el pescado vendido, De Boer dio salida a Luuk de Jong e intent¨® darle profundidad al equipo por las bandas con centros laterales. Casi sin quererlo, Holanda se encontr¨® metida en el partido. En un minuto el delantero del Sevilla y Klaassen recortaron distancias en dos jugadas casi calcadas: centro desde la izquierda al coraz¨®n del ¨¢rea y gol.
Quedaban 15 minutos para el final y la Oranje so?aba con la remontada, pero Yilmaz termin¨® con las esperanzas holandesas culminando su gran partido con el tercer tanto en su cuenta particular de falta. Un golazo que se col¨® por la escuadra y sentenci¨® el choque. Ya en el descuento Depay pudo de penalti ajustar m¨¢s el marcador pero Cakir detuvo su lanzamiento. No era la noche de Holanda.