RAYO VALLECANO 3- REAL ZARAGOZA 2
El Rayo se rehabilita a costa del Real Zaragoza
El equipo aragon¨¦s mandaba a la media hora con dos goles de ventaja, pero sus graves errores defensivos favorecieron la remontada franjirroja.
El Rayo Vallecano se reencontr¨® con la victoria a costa de un Real Zaragoza que se puso con dos goles de ventaja a la media hora, pero que favoreci¨® la remontada de su rival con tres graves errores defensivos. El equipo de Iraola, que no ganaba en Vallecas desde el 2 de enero, se mantiene sexto, renovando sus aspiraciones de ascenso en el ¡®playoff¡¯, mientras el Zaragoza se vuelve una vez m¨¢s de vac¨ªo de un desplazamiento y contin¨²a con el agua al cuello, a la espera de que se complete la jornada.
El Rayo present¨® las novedades en su zaga de Mario Hern¨¢ndez y Saveljilch, en detrimento de Adv¨ªncula e Iv¨¢n Martos, mientras Juan Ignacio Mart¨ªnez dio entrada a Eguaras por James Igbekeme y mantuvo la disposici¨®n en 4-4-2 que estren¨® ante el Tenerife, con Narv¨¢ez y ?lex Alegr¨ªa como pareja de ataque. Un movimiento t¨¢ctico que volvi¨® a rendirle beneficios iniciales.
El primer aviso del partido lo dio ?lvaro Garc¨ªa, cuando a los seis minutos, quiz¨¢ ayud¨¢ndose de la mano, remat¨® alto y cruzado junto al poste izquierdo de Cristian ?lvarez, pero el que abri¨® el marcador fue el Zaragoza, con un derechazo de Narv¨¢ez que culmin¨® una espl¨¦ndida acci¨®n de Vigaray. Fue el octavo gol del delantero colombiano, que, mucho m¨¢s participativo, puso fin a una racha de cinco jornadas sin marcar y demostr¨® el acierto de trasladarlo de la banda izquierda al centro del ¨¢rea.
El 0-1 le dio espacios y tranquilidad al equipo aragon¨¦s frente a un Rayo desconectado que s¨®lo inquiet¨® en un par de acciones a bal¨®n parado. A la media hora lleg¨® el 0-2, en un contraataque de manual entre Bermejo y Zapater, que ?lvaro Garc¨ªa introdujo en su propia porter¨ªa al intentar evitar el remate franco de Nieto ante Dimitrievski, un gol que naci¨® de un c¨®rner contra el Zaragoza y que puso de relieve la fragilidad defensiva del conjunto a Iraola.
A¨²n tuvo el Zaragoza una ocasi¨®n m¨¢s para haber dejado sentenciado el duelo, pero el remate de Zapater, en su mejor primer tiempo con el Zaragoza en varios a?os, se fue rozando el poste izquierdo. El portugu¨¦s Beb¨¦, el m¨¢s destacado de los locales, dio respuesta inmediata con un ca?onazo desde fuera del ¨¢rea que se estrell¨® en el poste, advirtiendo de lo que estaba por llegar.
Y cuando peor lo estaba pasando el Rayo, incapaz de meterle mano al Zaragoza, lleg¨® al filo del descanso el 2-1 en una falta directa desde 25 metros que Beb¨¦ ejecut¨® con la potencia de un ob¨²s y acab¨® sorprendiendo a un Cristian ?lvarez mal posicionado y que, adem¨¢s, no coloc¨® bien su barrera. Un golazo, pero con colaboraci¨®n del portero.
La segunda mitad se inici¨® con una gran jugada de Narv¨¢ez que malogr¨® Bermejo con todo a su favor, pero el que volvi¨® a hacer diana fue el Rayo, al aprovecharse el central Catena de un cabezazo defectuoso de Jair, tras un centro de Fran Garc¨ªa desde la banda izquierda. Empate a dos en el minuto 49 y partido nuevo.
Narv¨¢ez, desde fuera del ¨¢rea, fue el siguiente en probar fortuna, pero el que estuvo m¨¢s cerca del gol fue Andr¨¦s Mart¨ªn con un latigazo que se estrell¨® en el larguero y acab¨® salvando Nieto.
Iraola movi¨® su banquillo en el minuto 65, dando entrada al franc¨¦s Qasmi por Guerrero, una maniobra a la que respondi¨® JIM con la entrada de James por un apagado Chavarr¨ªa, un cambio que precedi¨® por segundos al tercer gol del Rayo, al resolver ?lvaro Garc¨ªa con una exquisita vaselina una cesi¨®n corta de Vigaray a Cristian ?lvarez. Otra vez un error fatal de la defensa del Zaragoza, muy nerviosa en este periodo del encuentro.
A la desesperada, JIM se jug¨® las bazas de Peybernes e Iv¨¢n Az¨®n por un desconocido Jair y un agotado Zapater, pero el partido ya estaba decidido y el Zaragoza vio c¨®mo se le iba un partido que crey¨® tener ganado. Y para colmo Franc¨¦s vio en el ¨²ltimo minuto la quinta tarjeta amarilla del primer ciclo, por lo que ser¨¢ baja ante el Mirand¨¦s.