Espanyol y el test de Rorschach
Volvi¨® a jugar ¨Cy destacar¨C Melendo, a marcar Embarba, a controlar el bal¨®n el equipo, a despistarse la zaga y a videoarbitrar Var¨®n Aceit¨®n. La historia de los pericos, en 90'.
Reivindicativos. En tiempos de pandemia, de malestar, tumultuosos, dos futbolistas tardaron apenas 12 minutos en enarbolar banderas reivindicativas. Los que le cost¨® al Espanyol avanzarse en el marcador. Con un pase genial de ?scar Melendo, quien llevaba pr¨¢cticamente dos meses ¨Cdesde el 3 de enero¨C sin ser titular, y con un gol de Adri¨¢n Embarba, que no anotaba desde el 7 de noviembre. L¨¢stima para ellos que fuera ef¨ªmero y enseguida igualara la contienda el Sporting de David Gallego, que con el punto ¨Cy a juzgar, sobre todo, por su euf¨®rica reacci¨®n en el empate¨C tambi¨¦n pretend¨ªa reivindicarse.
Viejas costumbres. Porque apareci¨® Uros Djurdjevic y necesit¨® solo una carrera, un amago y un chut seco para establecer el 1-1. Para alejarse de su lucha particular por el 'pichichi' con Ra¨²l de Tom¨¢s el d¨ªa en que el delantero perico no estaba. M¨¦rito del serbio pero dem¨¦rito de Keidi Bare, que pierde el bal¨®n en campo propio, de David L¨®pez, que le cierra mal, y en menor medida de Diego L¨®pez, que nunca sabremos si pudo hacer algo m¨¢s. Un gol que evoca al viejo Espanyol, que recibi¨® as¨ª decenas de dianas el a?o pasado en Primera, y que no es si no el nuevo en cuanto delante tiene un ariete que es de m¨¢ximo nivel.
Aceit¨®n y el otro f¨²tbol. Hab¨ªa suscitado durante la semana bastante controversia el nombramiento para la sala VOR de Santiago Var¨®n Aceit¨®n, responsable ¨²ltimo de una pol¨¦mica expulsi¨®n de Llu¨ªs L¨®pez ante Las Palmas y mallorqu¨ªn. Incluso Vicente Moreno, sutilmente, hab¨ªa indicado en la previa que esperaba de ¨¦l profesionalidad porque lo conoc¨ªa de sus tres a?os en la isla. Pues tard¨® media hora en dar alas a los malpensados, al ignorar un probable penalti de Gaspar Campos por pisot¨®n sobre ?scar Gil. Discutible, s¨ª, pero es que ni siquiera lo revis¨® el VAR. Y sigui¨® el juego. Tampoco se comieron al ¨¢rbitro los jugadores del Espanyol, practicando ese otro f¨²tbol que a menudo consigue su objetivo. En el caso del VAR y de esa picard¨ªa, como cantaba Serrat, son aquellas peque?as cosas¡
Debutante Dimata. Y si hasta aqu¨ª no hab¨ªamos escrito de Nany Landry Dimata, pese a que a estas alturas ya sabr¨¢n sobradamente que fue el escogido para sustituir al lesionado De Tom¨¢s, ser¨¢ por algo. Por un papel testimonial. No es que se le exija a un 'nueve' referencia que sea omnipresente en todas las facetas del juego ¨Ctampoco RdT lo hace¨C, pero es que el belga anduvo muy lejos de ser ese delantero providencial que rescat¨® los tres puntos ante el Mallorca. Conect¨® un remate, dio tres pases buenos en el centro del campo y poco m¨¢s. Dicho sea de paso, quiz¨¢ el d¨ªa que m¨¢s le conven¨ªa, tampoco el Espanyol se obcec¨® como otros d¨ªas en enviar centros laterales que Dimata podr¨ªa haber aprovechado.
Palomas en el ¨¢rea. Intervino Vicente Moreno cuando todav¨ªa restaba media hora dando entrada a Wu Lei despu¨¦s de tres jornadas desaparecido ¨Cpara regocijo de fans chinos¨C, pero sobre todo prescindiendo de Keidi Bare y situando a Fran M¨¦rida junto a Sergi Darder. Apuesta por los peloteros para buscar durante unos minutos una victoria que acarici¨® pese a la punter¨ªa de Javi Puado y Nico Melamed, por la pericia de Diego Mari?o ante Adri¨¢n Embarba, el palo de ?scar Gil¡ El cl¨¢sico 'taquigol' del Espanyol visto una y mil veces esta temporada en contextos similares, esta vez sin De Tom¨¢s y sin que diera sus frutos. Y, mientras tanto, en un contraataque aislado de Djurdjevic se apreciaron unas palomas merodeando por el ¨¢rea de Diego L¨®pez, reflejo de lo que estaba siendo ese tramo que precedi¨® a unos ¨²ltimos minutos de aut¨¦ntica tregua.
Un punto como el test de Rorschach. Y, precisamente como palomas que salen volando con su ramita de olivo en el pico, acaso Sporting y Espanyol firmaron la paz con un punto con tantas interpretaciones como temperamentos ¨Cmiles¨C existen entre la afici¨®n del Espanyol. Como el test de Rorschach, esas l¨¢minas que muestran manchas de tinta con figuras difusas que eval¨²an la personalidad del paciente, habr¨¢ quien lo considere un buen punto, quien sienta sus razonables dudas y quien quiera quemarlo todo, con el l¨ªder a cinco puntos y el tercero, a uno. Pero casi todos coincidir¨¢n en que este empate se valorar¨¢ positivamente en caso de victoria el pr¨®ximo viernes ante el Oviedo. Es una evaluaci¨®n tan un¨¢nime que incluso la compartir¨¢ el Sporting.