REAL MADRID CASTILLA 1 - POBLENSE 1
Un Castilla mermado no pasa del empate en casa con la Poblense
Sin Altube, Chust, Miguel, Blanco, Arribas y Duro, todos convocados por Zidane para Valladolid, los de Ra¨²l se adelantaron gracias a Gelabert y Latasa, pero acabaron fundidos.
El Castilla deja pasar otro tren para engancharse a la zona alta de la clasificaci¨®n del Grupo V-A de Segunda B. Lastrado por las numerosas bajas y enredado en un partido tosco, los de Ra¨²l se adelantaron en la primera parte, pero fueron incapaces de contener a una Pobense que s¨®lo ha ganado dos duelos de 15. Jurado dej¨® inservible el tanto de Latasa y el Castilla se mantiene a mitad de camino, ni fr¨ªo ni caliente, en su lucha por ascender a Segunda.
Bien es cierto que Ra¨²l tuvo que lidiar con un pu?ado de ausencias de primer¨ªsimo nivel. No estuvieron Altube, Chust, Miguel Guti¨¦rrez, Blanco, Arribas y Hugo Duro, todos ellos convocados con el primer equipo el s¨¢bado ante el Valladolid en Pucela; los dos ¨²ltimos tuvieron minutos. Con permiso normativo para jugar tambi¨¦n con el Castilla, Ra¨²l no cont¨® con ellos despu¨¦s de que aterrizasen en la capital de madrugada. Las constantes ausencias en el equipo de Zidane producen una onda expansiva que ante la Poblense dej¨® a Ra¨²l en cuadro.
Se las apa?¨® aun as¨ª el t¨¦cnico castillista para lucir un once de garant¨ªas, con Sintes y Dotor reparti¨¦ndose las tareas de Blanco y con Gelabert creando por delante. El enorme Latasa, 191 cent¨ªmetros de ariete, tom¨® el papel de Duro, secundado por Kenneth y Vallejo en los costados. Y pese a las ausencias, el Castilla supo encontrarle el tono al encuentro y se adelant¨® gracias a un chispazo de Gelabert y el acierto de Latasa: el centrocampista rompi¨® l¨ªneas con un cambio de ritmo y cedi¨® al punto de penalti con elegancia; el delantero la alej¨® todo lo posible de Imanol, al poste y para dentro.
La Poblense de ?scar Troya reaccion¨® al instante y roz¨® el empate tras una empanada mental de la defensa del Castilla; inexplicablemente, casi en la l¨ªnea de gol, Jurado vole¨® alt¨ªsimo. Se resarcir¨ªa m¨¢s tarde el hombre-gol visitante con un derechazo raso que igual¨® la contienda, al retorno del descanso. El equipo mallorqu¨ªn sali¨® del t¨²nel con la idea de dar un paso adelante y empujar al Castilla hacia su portero, tirando sobre todo de recuperaciones y transiciones r¨¢pidas desde la medular. As¨ª lleg¨® la igualada, con el Castilla reclamando falta sobre Dotor en la disputa que germin¨® el empate.
Fueron las dos mejores ocasiones de un encuentro f¨ªsico y corpulento, un tost¨®n que pudo aun as¨ª decantar el Castilla desde el punto de penalti, si el colegiado catal¨¢n Romero Freixas hubiese se?alado un evidente penalti sobre Gelabert, ya con el 1-1 en el marcador. Si al Castilla le sigue faltando aplomo para echar el broche a los partidos, tambi¨¦n mantiene su p¨¦sima fortuna arbitral, una herida cada a?o m¨¢s profunda.